Munilla planta cara al arzobispo Scicluna: «¿Acaso no existen multitud de matrimonios con doble vida?»

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En menos de un mes el secretario adjunto de Doctrina de la Fe, el arzobispo de Malta Charles Scicluna, se ha manifestado hasta en dos ocasiones abiertamente contra el celibato sacerdotal.

En una entrevista con el National Catholic Reporter, el secretario adjunto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe ha reiterado su inusual llamado para que la Iglesia considere poner fin a su requisito milenario de que los sacerdotes permanezcan célibes, diciendo que permitir el matrimonio sacerdotal podría ser un medio para evitar que los clérigos vivan una doble vida peligrosa.

La reacción de Munilla

La primera vez que Scicluna se pidió públicamente revisar la obligatoriedad del celibato sacerdotal, Munilla ya salió a corregir al secretario adjunto de Doctrina de la Fe. A través de sus redes sociales, el obispo de Alicante-Orihuela declaró lo siguiente: «Me parece a mí que algunos han olvidado que la vocación -al sacerdocio, en este caso- es una llamada personal de Dios, en la que Él nos da su gracia para que podamos seguirle; y no una mera elección individual entre las distintas posibilidades que a cada uno le resulten más atrayentes…»

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Ahora, tras la segunda declaración pública de Scicluna contra el celibato, el obispo de Orihuela-Alicante tampoco ha dejado pasar por alto esta declaración de intenciones del arzobispo y ha respondido con mayor contundencia.

A través de un mensaje compartido en sus redes sociales, Munilla lanza las siguientes preguntas al secretario adjunto del Dicasterio que dirige Víctor Manuel Fernández: «¿De verdad cree que el matrimonio es el remedio contra la infidelidad sacerdotal? ¿Acaso no existen multitud de matrimonios con doble vida? Y, por otra parte, ¿qué hacemos con los sacerdotes que se divorcien?»

Por otro lado, el ex obispo de San Sebastián defiende que «la evolución de la disciplina del celibato en la tradición de la Iglesia (tanto en oriente como en occidente) ha ido dando pasos a lo largo de los siglos, siempre en la dirección de una mayor adecuación con Jesucristo, el cual fue célibe». Para Munilla, «la propuesta del Sr. Scicluna supondría una «involución» por primera vez en la tradición de la Iglesia, alejando nuestra disciplina del sacerdocio celibatario de Cristo».

«El Sr. Scicluna parece olvidar que la vocación al sacerdocio es una llamada personal de Dios, en la que Él nos da su gracia para que podamos seguirle; y no una mera elección individual entre las distintas posibilidades que a cada uno le resulten más atrayentes…», agrega el obispo vasco.

Por último, Munilla escribe que «a muchos católicos nos gustaría saber si Mons. Scicluna está haciendo declaraciones contra la ley del celibato desde su condición de miembro del Dicasterio para la Doctrina de la Fe de la Santa Sede, o si lo hace a título personal. ¡Es por saber a qué atenernos!»

El secretario adjunto de Doctrina de la Fe insiste en cargarse el celibato para evitar una «doble vida»

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Comentarios
14 comentarios en “Munilla planta cara al arzobispo Scicluna: «¿Acaso no existen multitud de matrimonios con doble vida?»
  1. Pregunta el obispo: «¿qué hacemos con los sacerdotes que se divorcien?», cosa harto probable, vista su fidelidad al compromiso sacerdotal. Pero hay otras preguntas, ¿qué hacemos con los sacerdotes que vivan en pareja con otro hombre? ¿les damos la bendición «Fiducia supplicans»…? ¿Por qué no expulsan de una vez a todos los que traicionan su compromiso?

    No puede ser sacerdote quien es infiel a su compromiso sacerdotal. En caso necesario, sí se podría aceptar que hombres casados accedan al sacerdocio, pero con el compromiso firme de no volver a casarse, ni a emparejarse…, pase lo que pase.

  2. La condición de pecadores hace que todos los hombres en mayor o menor medida tengamos una doble vida. Si quitar el celibato nos va a hacer perfectos a los sacerdotes… conozco muchos casados infieles, pedófilos, violadores y otras atrocidades.

    1. «conozco muchos casados infieles, pedófilos, violadores y otras atrocidades»

      Es que, es una falsedad que quienes no han escogido voluntariamente un estado de vida que conlleva el celibato (caso del sacerdocio católico), estén libres de llevar una doble vida o ser menos pecadores: los millones de divorcios, en gran parte debidos a infidelidades y adulterios, son prueba de lo contrario. Y los casos de abusos entre clérigos luteranos (casi todos casados), cuyas cifras han sido publicadas recientemente, demuestran que es mentira que se eviten con el «matrimonio» clerical (además de que los clérigos jamás se han podido casar, desde la misma época de los apóstoles: una vez ordenados, solteros para siempre, jamás se ha administrado el sacramento del matrimonio a un hombre ordenado).

  3. Pues anda que no hay tampoco seglares con doble vida. Diez minutos después de comulgar ya están por aquí «evangelizando» JAJAJAJA

    1. Pero, ¿cuándo le da tiempo a usted de hacer de detective y seguir a cada fiel al salir de misa, si se pasa aquí la vida trolleando? ¿O es que ha hecho una encuesta telefónica, ya que usted es «raro» y no sale de casa? ¿Cómo ha conseguido sus números telefónicos? ¿Y que les preguntaba? ¿»Tiene usted doble vida»? Lástima que el circo ya no esté de moda, porque usted se habría forrado. ¡Qué manera de decir payasadas! Y, encima, acompañadas de fingidas risas enlatadas, para que el sufrido público sepa cuándo ha hecho una «gracieta», ya que si no, no se enteraría, pues tiene menos gracia que estudios, que ya es decir.

      1. A mí me viene a acusar de mucho tiempo libre, el misionero condoniano este de las narices, que parece que ha hecho votos de acudir como las avispas cada vez que lee cualquier tontería que, por supuesto, para él es blasfemia, anatema y auto de fe JAJAJAJAJA

        Tengo respuestas suyas a las 4 y media de la mañana, OJO, y no un día ni dos. Me replicó que en el planeta existen diferentes husos horarios. ¿Se puede ser más estafador y sinvergüenza con la excusa de la apologética? Maldita sea tu estampa.

        1. «A mí me viene a acusar de mucho tiempo libre»

          A usted nadie le ha acusado de tener tiempo libre, troll mostrenco, sino de malgastar todo su tiempo trolleando, por lo que no le queda más para hacer seguimiento a los feligreses que salen de misa (solamente usted dice saber lo que hacen después de salir del templo).

          «…cada vez que lee cualquier tontería que, por supuesto, para él es blasfemia, anatema y auto de fe»

          Como bien las define, usted sólo escribe tonterías, como el disparate de adjudicar a cualquiera de sus payasadas la categoría que supone un delito (blasfemia), la pena (anatema) y una ejecución de penas (auto de fe, que ya no existen desde que usted era joven, por cierto). No podrían ser las tres cosas a la vez, ya que no son sinónimas. Pero, en su caso, ni siquiera una de ellas, pues no pasan de la categoría de bufonadas (no da para más). De ahí que siempre las acompañe de las histriónicas y fingidas risas enlatadas.

          1. «Tengo respuestas suyas a las 4 y media de la mañana»

            Pues guárdelas bien, no se le pierdan. Y, ¿dónde dice que eran las cuatro y media de la mañana? ¡Ah, en su aldea! Pues vale.

            «Me replicó que en el planeta existen diferentes husos horarios»

            Su imaginación le juega malas pasadas: en el planeta hay diferentes husos horarios, sí; pero nunca le he contestado tal cosa, ni he hablado jamás de ningún huso horario en esta página. Eso es cosa suya. Si cree que le voy a proporcionar a usted información personal, abandone toda esperanza. Y tome sal de frutas, que va a acabar con una úlcera, troll mostrenco (bastantes achaques tiene ya, para añadir otro más).

          2. Libre o malgastado no eres quién para juzgar mi tiempo, y mejor harías con dedicar el tuyo a disfrutar de la vida, pero de ESTA, no de la que estás coleccionando puntos, imbécil.
            Eres un psicópata de libro. No acabarás bien, acuérdate de lo que te digo.

          3. Tiene usted un poquito de obsesión, ¿no? Otra más, quiero decir. Pero vamos, que si le entretiene ponerse a contar el número de mis comentarios, es cosa suya: cada uno se entretiene como quiere. Imagino que también habrá comprobado que de los 63 comentarios que cita, 43 eran respuestas a deposiciones puestas por usted, y el resto respuestas a su alter ego gay «Jose» (sin tilde). Es decir, la mitad de los comentarios parasitados por los propagandistas de la sodomía. ¡Y aún finge sorpresa por que le respondan!

            «Con indicaciones horarias de las 4, 5, 6, 7 de la mañana»

            ¿Indicaciones de la hora del sistema? ¿O de la hora en el lugar donde escribe el comentarista? Me temo que el sistema no es tan listo; y usted, por lo que se ve, tampoco (lo cual ya era de conocimiento público). Como demuestra al final, yo no le he indicado desde dónde escribo: le he dicho una obviedad, que cualquiera con estudios entendería (usted no: es un mostrenco).

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