Desaparece en Panamá el cardenal Lacunza

Cardenal Lacunza Cardenal Lacunza
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La archidiócesis de Panamá  ha confirmado a través de una breve nota la desaparición del cardenal de origen español José Luis Lacunza.

«Al confirmar con las autoridades eclesiales de la Diócesis de David, el desconocimiento del paradero del Cardenal José Luis Lacunza, pedimos al pueblo de Dios a unirse en oración en estos momentos, pidiendo su pronta aparición», ha escrito monseñor José Domingo Ulloa Mendieta.

Según informaciones que llegan a este medio, el cardenal desapareció el martes. Salió de su casa vestido de laico con su coche a hacer gestiones y ya no ha dado señales de vida. Las primeras informaciones aseguran a InfoVaticana que el cardenal dejó en su casa tanto el teléfono como el resto de pertenencias personales.

Medios de Panamá avanzan que la diócesis ha puesto la correspondiente denuncia por la desaparición del cardenal Lacunza. La Procuraduría General de la Nación confirmó que inició una investigación de oficio por la presunta desaparición del cardenal Lacunza, una vez fueron informados de la misma.

Funcionarios de la Fiscalía de homicidios y femicidios dolosos del Ministerio Público ya solicitaron al centro de operaciones municipales de David las cámaras de videovigilancia, desde el pasado martes en horas de la tarde en este sector en donde está ubicado el obispado, para dar seguimiento y tratar de verificar la ruta del del auto asignado a Lacunza.

¿Quién es José Luis Lacunza Maestrojuán?

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Comentarios
14 comentarios en “Desaparece en Panamá el cardenal Lacunza
  1. Con Francisco, suceden cosas inéditas e inauditas que aunque no tenga ninguna relación, nunca se habían visto con los anteriores pontífices. Lagarto, lagarto…

      1. Ya lo dice el propio comentarista al que responde, por lo que su comentario es redundante. Fíjese:

        «Con Francisco…» (no «por Francisco»).

        «…aunque no tenga ninguna relación…»

        Vamos, que no sé para qué reitera usted lo que ya ha dicho previamente Alvar, además de que lo que dice está a la vista de todos: con Francisco suceden cosas inéditas e inauditas, no siendo la más rara ni grave que desaparezca un cardenal. De hecho, si se perdieran algunos de ellos y no se les buscase, no pasaría nada.

  2. Esta desaparición podría ser atribuible a varias causas:
    1-La delincuencia común, que en América está muy extendida.
    3-Persecución anticatólica de algún grupo o persona hostil.
    3-Enajenación mental súbita u otro fallo de salud.
    4-Accidente.
    Etc.
    Las desapariciones generan mucha intranquilidad por el desconocimiento del hecho que las causa y las consecuencias que conllevan.
    Oremos a Dios para que esto se resuelva bien.

    1. ya lo encontraron, todo apunta al No. 3 ya que aparentemente condujo sin rumbo hasta que se le agotó el combustible, fue llevado a un centro hospitalario y aún no hay información de su estado de salud.

      1. O eso, o se “se fue a por tabaco” pero se arrepintió (este pontificado es enloquecedor), o es una excusa para alguna cita forzosamente discreta (¿Diplomáticos, servicios secretos? En Panamá se ventilan muchas cosas raras). Lo de salir de paisano y sin teléfono apunta a no querer ser localizado.

    2. Leo que estaba «dentro de su vehículo y algo desorientado, en un área semiboscosa del corregimiento Jaramillo. Lacunza, que cumplirá 80 años el próximo 24 de febrero, ha sido trasladado a un centro médico para evaluar su estado de salud.»

      Si tiene 80 años y estaba desorientado, quizás indica un accidente cerebrovascular, un ictus cerebral o cualquier dolencia cerebral, más que nada por la desorientación, y porque se dejó cosas particulares en su casa: móvil…

  3. «el cardenal dejó en su casa tanto el teléfono como el resto de pertenencias personales»

    Raro, raro. Para salir a tirar la basura o recoger el correo, quizás alguien deje el móvil en casa; pero cuando alguien coge el coche no es que vaya a desplazarse hasta la esquina, precisamente; y un poco extraño que no cogiera el móvil para ir a a «hacer gestiones», sí es. No tiene buena pinta.

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