El cardenal arzobispo de Utrecht (Holanda), Willem Jacobus Eijk, de 64 años, nombrado por Benedicto XVI en el consistorio de 2012, se une a las voces críticas del caos eclesial que ha creado o permite que se cree el Papa Francisco.
Son ya relevantes los cardenales y obispos que en conciencia han creído que deberían hablar ante el auténtico desmadre producido en la Iglesia sobre cuestiones verdaderamente fundamentales dejando a Francisco en una situación desairada o al menos poco cómoda. Porque los que se están manifestando, con riesgo propio, todos sabemos que son además la punta del iceberg de otros muchos que piensan lo mismo y que de algún modo están hablando también con su silencio clamoroso.
Por otra parte son también muchos los católicos convencidos de que quienes se han volcado más en apoyo de las tesis que dicen ser del Papa Francisco, en lo que el Papa no se ha declarado mucho aunque ciertamente algo, pero de algún modo nadando y guardando la ropa, se han separado de la doctrina y la moral de la Iglesia logrando el rechazo de muchos católicos practicantes y formados y sólo el apoyo de los no católicos y, entre quienes lo son, los más ignaros.
En esas estamos. Uno, en su insignificancia, se une al cardenal holandés, a los cuatro de los dubia, al letón, a los obispos kazakos, a Negri, Viganó, Laun… pidiendo al Papa que acaba con esta situación irrespirable para la Iglesia que parece la hora de la potestad de las tinieblas. Y al cardenal Zen y al heroico, perseguido, masacrado catolicismo chino al que algunos desde la comodidad de sus despachos quieren vergonzosamente traicionar.
http://infocatolica.com/?t=noticia&cod=31478
https://secretummeummihi.blogspot.com.es/search/label/Amoris%20L%C3%A6titia
https://www.leforumcatholique.org/message.php?num=843376
El Cardenal Eijk pide al Papa que aclare la confusión alrededor de Amoris Laetitia
http://www.ilgiornale.it/news/cronache/vaticano-laccusa-cardinale-persone-sono-confuse-1487544.html
Francisco ya tiene dada la respuesta y es inútil insistir o molestar sobre el caso. Respuesta: preguntar al episcopado argentino al que se le ha transferido el don de la infalibilidad de Magisterio CATÓLICO-interconfesional. O a Schönborn. Es la recomendación a los oráculos pontificios.Y si no se está conforme acudir a Kasper el teólogo de rodillas ante el mundo mundial.
¿El cardenal preguntador EIJK arzobispo de Mastrique? Es solo católico sin interconfesionalizar. ¡Va! ni caso. El ejemplo no cunde y los demás obispos están a partir un piñón con la desacralización devenida del Vaticano II.
Caso Boabdil.
De confusión nada. Está todo clarísimo. Francisco, por primera vez en la historia de la Iglesia, autoriza la comunión en pecado mortal y encima tiene la osadía de pedir el asentimiento de la inteligencia y la voluntad a semejante aberración que le lleva al infierno, salvo que rectifique, cosa que no parece probable, salvo un milagro de categoría, que haberlos haylos. La comunión para todos y el cielo para todos, aunque no quieras, lleva a la gente a alejarse todavía más de la Iglesia. Si ya estamos salvados sin necesidad de conversión ¿ qué necesidad tengo, no ya de comunión o confesión, sino de curas, obispos y papas. A la misericorditis le encanta hablar de olor a oveja, pero esa oveja, si ya está está salvada, no necesita de un pastor que viva del cuento del pastor y la oveja.
Por criticar los desvergonzados Amores de Letizzia te va a misericordiar Pater Georgius Marius de mala manera y muy pronto.
Coincido con D. Fco José en la opinión sobre el Papa. Considero que es el Papa, es manifiestamente mejorable, pero es el que hay y así será hasta que haya Sede Vacante.
Y como Papa, le respeto y le obedezco en cosas de su competencia. Afortunadamente no ha proclamado ningún dogma, de modo que respecto a lo que dice, lo pongo en cuarentena y utilizando mi discernimiento, actúo.
Me parece mal que un divorciado comulgue, pero será su conciencia y la de su confesor si le ha dicho que puede hacerlo. Yo no sé lo que ocurre en la intimidad de esa pareja.
Me pareció mal que en una encíclica se tratara de aspectos meteorológicos un asunto sobre el que cada «experto» tiene su opinión y ahora es la opinión del Papa, que firmó lago sobre lo que no tenía ni idea, porque un tipo del Vaticano, que se supone experto, se lo dijo.
Todos los papas recurren a expertos, pero ellos se reservan la última palabra, porque es su firma la que figura, no la de los expertos. Por eso todos los documentos papales tratan de dogma, moral y similares, materias en las que se supone que el papa es experto.
Silvia
Es increible que haya católicos que, haciendo gala de una de-formación religiosa lamentable, consideren a la obediencia “ciega” por sobre todas las demás virtudes, tanto teologales como cardinales, al modo de una “súper virtud” capaz de solucionar todos los problemas morales, con lo cual se quedan muy tranquilos aunque esto implique mutilar el propio raciocinio. Y así, obedeciendo ciegamente, creen quedar excentos de cualquier responsabilidad moral objetiva: “el que obedece no se equivoca”, cacarean sin descansar como único argumento contra la evidencia de los hechos y de la realidad misma. Han instituido esta especie de “claudicación de la propia conciencia” como la esencia misma de la vida Cristiana, creyendo que podrán salvarse a tenor de la conciencia de otro, en este caso, el superior. Esto degenera rápidamente en la “idolatría de la autoridad” y en el “culto a la personalidad” del superior, que se tornará, gracias a esta “obediencia”, en una especie de oráculo infalible. Y sino, véase la historia reciente de la Iglesia.
Habrá que repetirlo hasta el cansancio: esta forma de obediencia no es católica, mal que les pese a muchos que creen que es más probable que se equivoque el Espíritu Santo a que se equivoque el papa o el obispo; o que viven felices creyendo que el obispo o el papa son una especie de cuarta persona de la Trinidad.
Hombre, uno el dedo no se lo chupa. Pero siempre he querido, a veces con notable esfuerzo, guardar un respeto por lo menos formal al Papa. Creo que debo obrar así y por eso lo hago. Pese a ello no pocos piensan que este es un Blog contra el Papa. Otros en cambio creen que me callo lo que debería decir. Yo de las opiniones de los demás no puedo responder, son de ellos. Las mías son las que me leen y que bastantes entienden. Pues así voy a seguir.
Esto es ya perdida de tiempo. Es más de lo mismo; cansa, visto que Frco ha contestado a esa confusión que sólo ellos tienen. Los cardenales con Fe verdadera ( si quedan) deberían tomar ya otro tipo de acción .
Don Paco Pepe, esta Ud. muy acertado en su comentario, al que solo veo un pero: Francisco es el mayor responsable de lo que está sucediendo. Hay más responsables, evidentemente, pero el es el máximo, por su condición de ?Papa?
«en lo que el Papa no se ha declarado mucho aunque ciertamente algo, pero de algún modo nadando y guardando la ropa»
¿En serio, Paco Pepe? ¿Le parece poco que Francisco haya ordenado la publicación de la carta de los Obispos de Buenos Aires y la contestación papal en las Actas del Pontificado, con la mención expresa de que debe considerarse magisterio auténtico?
Hace poco era el cardenal de Boston, O’ Malley, quien criticaba duramente a Francisco a propósito de la pederastia, en la que Bergoglio ya forma parte del problema y no de la solución, al devaluar las pruebas testificales; ahora es el cardenal de Utrecht, Eijk, quien le acusa de haber generado una confusión sin precedentes y que hay que remediar. El problema es que Francisco no quiere remediar sino agravar con la comunión para todos y el cielo para todos, menos para los católicos, por esa rigidez que ha quedado como el único pecado que se atreve a condenar la misericorditis en consonancia con el pensamiento único.
a bergoglio, el tirano banderas del vaticano, se le esta complicando la situación por cuenta de su culebrón latinoamericano llamado los amores de leticia-amoris laetitia. y eso puede llevar a bergoglio a misericordiar a sus críticos en un intento desesperado por silenciar toda critica, pero eso se le devolvería como un boomerang al mismo bergoglio.