Quebec: cierran 612 iglesias en 7 años

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Si explicábamos el otro día la transformación de la iglesia de Santa Ana de Gante, en Bélgica, en un supermercado, la situación no es mucho mejor en el Quebec. El territorio francófono de Canadá, antaño bastión del catolicismo, sufre desde hace décadas un intenso proceso de secularización que provoca, como signo externo, la acelerada erosión de su patrimonio religioso.

Las iglesias que cierran sus puertas definitivamente se multiplican a  un ritmo frenético: de las 2.746 iglesias con las que la provincia de Quebec contaba en 2013, 612 han sido cerradas, demolidas o reconvertidas para otros usos en estos siete años. Un número que no se detiene pues cada vez son más las iglesias vacías, inmuebles que ya nadie puede ni quiere mantener. El presupuesto de 20 millones anunciado por el gobierno de François Legault para preservar este patrimonio es a todas luces insuficiente para la vasta inversión que se requeriría.

Este terrible fenómeno es el que ha querido llevar a la pantalla a través de varios documentales el sociólogo Pierre Fraser, cineasta y redactor en jefe de la revista Sociologie visuelle. Estos documentales se pueden ver a través de la página web del autor y en palabras del propio Legault, “informa sobre las implicaciones sociales del cierre de una iglesia. En el barrio de St-Jean-Baptiste de la ciudad de Quebec, la iglesia de St-Jean-Baptiste ocupa una posición geográfica central, no sólo en el espacio físico, sino también en el espacio social. Muchos servicios a los ciudadanos menos afortunados se verán recortados, al igual que las actividades comunitarias que ayudaban a mantener una cierta cohesión social para muchos miembros de esta comunidad. En un fuego cruzado entre las autoridades políticas, la diócesis y los ciudadanos, el documental explica cómo la sociedad ha llegado al punto de cerrar estos edificios de su patrimonio y cómo es difícil encontrar nuevas funciones para ellos”. El modelo en el que las iglesias, a pesar del abandono de la práctica religiosa, continuaban siendo centros de servicios sociales, se muestra agotado y es ya insostenible.

En cualquier caso, lo que está ocurriendo en Quebec es una avanzada de lo que puede ocurrir en poco tiempo en muchos países occidentales: con una práctica religiosa declinante, la Iglesia tendrá cada vez más dificultades para sostener unos edificios que, si bien forman parte del patrimonio arquitectónico, tienen un mantenimiento costoso. Un problema de difícil solución.

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Comentarios
22 comentarios en “Quebec: cierran 612 iglesias en 7 años
    1. Era una sociedad super-católica la quebequesa justo antes del Concilio Vaticano II. Como Irlanda, Bélgica, España, Portugal, toda Iberoamérica…

    2. Dejémonos de concilios, que esto es el efecto del dominio de la masonería.
      Es un enemigo externo, pero si no hablamos de ello, sino de otras cosas, no lo vamos a combatir

      1. Tengo mas miedo del compañero que me quiere vender que del enemigo que me compra, además los traidores hacen siempre mas daño sino miren a Judas.

  1. Y los catolicos y la jerarquia corrupta, los clerigos y obispos pede rastas y la drones…¿no tendrán gran parte de la culpa en estos cierres?

    1. Claro que la tienen. Junto con los católicos y la jerarquía mediocres/cobardes, pero no solo ellos. En la demolición de la Fé hay muchos más responsables. Como bien han dicho historiadores, el post-concilio es consecuencia de algo que se venía arrastrando por lo menos desde la primera mitad del siglo XX. Los católicos ahora nos declaramos atónitos ante lo que está pasando, pero somos corresponsables en el sentido moral, y no nos podemos lavar las manos.

  2. La Iglesia gracias a los obispos y en estos ocho años ha entrado en un proceso de destrucción y de suicidio asistido el problema es quién se hace cargo del muerto, los obispos dicen «que Francisco se haga cargo de los problemas que generó» pero lo generaron ellos también en estos ocho años de apoyo de 5000 obispos salvo dos que me señaló Mbm y que confirman la regla.

  3. Los obispos ven la situación desesperante inminente y no sabrían como accionar y sacar a la Iglesia ilesa o con los menores daños posibles se han puesto en la dulce espera, esperan que la bomba le explote a Francisco antes que muera pero esto es un proceso.

  4. Por su parte Francisco hombre de edad y una inteligencia especulativa limitada y una gran inteligencia práctica sigue para adelante salga pato a gallareta pero en este caso todos sabemos que va a salir gallareta pero mientras tanto pierden los obispos un tiempo valioso y aceleran el tiempo final de destrucción de la Iglesia.
    ¡Felicitaciones por sus éxitos!

  5. Y todavía los sacerdotes de Infavaticana se les ocurre censurar a quienes lo están ayudando a ver la realidad y a razonar probando su paciencia y tratando de expulsarlos del sitió. ¡Sensacional!

  6. La Iglesia atraviesa una grave crisis que le afecta desde fuera, por quienes la difaman injustamente y la atacan de muchas maneras, y también desde dentro, por quienes la pervierten con la confusión doctrinal. Y en este segundo grupo hay que situar a Francisco.

  7. Un Reino dividido no se puede mantener. La crisis ha sido y es profunda y, además, empezó antes de que naciera el Concilio Vaticano II.

  8. Las causas de la crisis de la Iglesia son diversas, pero entre ellas debemos considerar como especialmente lamentable, el seguidismo de muchos obispos con respecto al Papa Francisco, lo que agrava la situación.

  9. Sólo una verdadera CONVERSIÓN a Cristo (empezando por la conversión de sus pastores y de las estructuras y entidades que gobiernan) puede parar el proceso que destruye a la Iglesia. Eso implica aceptar la muerte mística de la Iglesia (la muerte en su entraña más profunda, carnal y abierta a la relación con los hombres) y RENUNCIAR a todo lo que significa acomodamiento a los poderes y gustos del mundo; morir a todo lo que, en el día a día de la Iglesia, pueda significar o traducirse en poder e influencia y miramientos políticos. Ser «Cuerpo» de Cristo tiene que significar y traducirse, para la propia Iglesia y ante el mundo, en «ser verdaderamente de Cristo». Que Él, que todo lo puede, y la Virgen, nos ayuden.

  10. Esto requiere ser estudiado bien a fondo.
    El último párrafo del artículo es revelador y preocupante.
    Si caen los valores cristianos se perjudican cristianos y no cristianos, aunque sean personas sin religión.

  11. Prefieren convertir los templos en charcuterías que cedérselos a las congregaciones «tradicionalistas» que, teniendo muchas vocaciones, se ve obligados a mendigar locales.

  12. ¿ Qué ha dicho la francisquista Agenda Global 2030 sobre el cierre de las iglesias ? Merecerá esto un comentario el miércoles. Seguramente no. Haremos como que nada pasa y hablaremos sobre cambio climático y fraternidad universal, la cual no necesita una iglesia, le basta el campo

    1. Muy grave.
      No sabía que la élite global había dicho algo en su Agenda 2030, acerca de cerrar las Iglesias.

      Aunque de hecho ya las cerró, con el pretexto de la plandemia.
      Y con la próxima plandemia, que está a punto de ser lanzada al mercado, a juzgar por la intensa campaña mediática de miedo con la cual nos amenazan.

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