El defenestrado obispo emérito de Tyler, Joseph Strickland está verdaderamente preocupado por el futuro de la Iglesia tal y como se aprecia en su última carta publicada en su página web personal.
El obispo Strickland recuerda en la carta publicada la semana pasada que «el propósito último de la Iglesia que Jesucristo estableció es la salvación de las almas. Esto cumple el mandato divino con el que comienza esta carta: que nuestra misión es traer a Jesucristo, la Verdad Encarnada, a la humanidad como la revelación de la verdad sobrenatural».
Strickland escribe que «es de suma importancia que la humanidad abrace a Jesucristo y Su Iglesia. Sin embargo, el tremendo desafío de esto se ve claramente en estos tiempos cuando Su vaso elegido, la Iglesia, que está plagada de debilidad humana y pecaminosidad, lucha contra Aquel que la creó: el Divino Hijo de Dios».
«La Iglesia es santa, pero está compuesta de seres humanos pecadores y, aunque está guiada por la verdad sobrenatural, a menudo se estanca e incluso se corrompe por las cosas de este mundo natural«, reconoce el obispo obligado a dimitir el pasado año por su claridad doctrinal.
Ahora, con la libertad que goza de ser emérito, el obispo sigue proclamando a los cuatro vientos la dura situación que atraviesa la Iglesia en estos momentos. Strickland señala que «en nuestro tiempo, parece que la abrumadora presencia de arcilla frágil en la Iglesia amenaza con borrar la verdad sobrenatural que es su corazón y su alma. Cristo nos ha prometido que la Iglesia no será aniquilada por los poderes del infierno, pero debemos elegir diariamente vivir la verdad sobrenatural que es Jesucristo».
Es por ello que afirma que «es imperativo que también reconozcamos que esta tendencia de la Iglesia a ser dominada por la frágil arcilla de este mundo –en detrimento de su verdadera misión de construir una fe sobrenatural– ha ido ganando impulso durante más de un siglo» y no duda en señalar que «más de un papado está seriamente implicado en la falta de fe sobrenatural necesaria para hacer frente a la marea de apostasía».
Con la claridad y valentía que le caracteriza, Strickland critica que «demasiados prelados no sólo exhiben una falta de fe sobrenatural de su parte, sino que también están “empeñados” en eliminar todo vestigio de fe sobrenatural de la Iglesia«. El obispo emérito de Tyler asegura que «esto ha ido cobrando impulso durante muchas décadas, pero debemos abrir los ojos al crescendo de la apostasía que estamos presenciando ahora. Ya sea en la liturgia, la doctrina o la simple piedad cotidiana de los católicos, demasiados prelados y fuerzas poderosas en el Vaticano están haciendo todo lo posible para desmantelar todo vestigio de fe sobrenatural, así como cualquier comprensión de la verdad sobrenatural que Jesucristo nos ha revelado».
El obispo Joseph Strickland anima a los fieles católicos de todo el mundo en estos momentos «en que muchos de los pastores encargados de proteger el rebaño está ahora aliados con los lobos» a participar con especial devoción en la Santa Misa y creer «en la presencia real y sobrenatural de Cristo en la Eucaristía es el corazón y el alma de nuestra fe».
Ayuda a Infovaticana a seguir informando
A estas alturas, nadie que se mantenga incontaminado doctrinalmente puede dudar de que «la Iglesia de Francisco» está en apostasía.
Como ejemplo basta ver que todos los documentos que llevan la firma del Papa actual, contienen errores contrarios al Magisterio Ponttificio. Así lo vemos por ejemplo en el último publicado, Dignitas Infinita, que se opone a la doctrina católica en temas como el juicio divino, la guerra justa, la pena de muerte, etc., y que falsea el concepto de la dignidad, atribuyéndole de forma desafortunada la idea de la infinitud, cuando el mismo Sto. Tomás daba a entender que, al elevarse la dignidad en Jesucristo, es evidente que no puede ser en esencia infinita, pues si lo fuera ya no podría elevarse.
Y como esto hay muchos otros ejemplos.
Menos mal –para quien intenta mantenerse junto a Cristo hasta el fin de sus días– que la Providencia siempre suscita unos pocos testigos fieles del Evangelio como ahora Strickland. De nosotros depende.
Con todos mis respetos por alguien tan excepcional como el obispo tejano, pero todo me suena a dar la alerta por fuego cuando ya se ha quemado el bosque. Por supuesto que suscribo todo lo que dice. Hago hincapié en el objeto de la Iglesia como «salvadora de almas» y no como herramienta para «hacer un mundo mejor». No hay una sola teoría política ni partido que no proclame a los cuatro vientos que sus ideas realizarán «un mundo mejor». Pero, ahora bien, ¿Cuál es la misión de la Iglesia?: «Salvar las almas», pero, ¿Salvarlas de qué?: del Infierno, de la condenación eterna. Según el señor que dirige la Iglesia actualmente, el Infierno está vacío y aquí se salvan todos, todas y todes. Así pues, la Iglesia y su misión son innecesarias. Por otra parte, el bautismo nos hace «hijos de Dios», pero el señor de Roma dice que «hijos somos todos», por lo que vuelve a hacer innecesarios a la Iglesia y al sacramento. En fin, con todos mis respetos, la alerta de monseñor llega con retraso, 60 años.
La alerta llega con retraso porque la pasta y los incontables medios con que cuentan las estructuras de la apostasía eclesiástica sí que llegan puntualmente. Sin éstos el sanedrín de Bergoglio no sería nada, porque ninguno cree más que en lo material con lo que seguir desplegando para su Amo el cutre espectáculo de la hipocresía.
El mismo monseñor dice que varios papados están implicados en la falta de fe.
Y tiene toda la razón.
Hemos visto papas “orando” junto a todo tipo de bichos, poniendo nuestra fe al mismo nivel que lo que creen los que andan por la selva recogiendo mandrágoras… y aquí estamos
Zacarias 11
Con «hijos somos todos» nos ponen la mosca en la oreja, y con razón, pero tienen siempre una salida para decir que ellos no niegan que la verdadera filiación divina se obtiene con el bautismo (nos citarán que somos creaturas… hermano sol y hermana luna, bla, bla, bla…).
No es Bergoglio el único que ha jugado a esto: “… la petición: «No se haga mi voluntad sino la tuya» (Le 22,42), es realmente una oración del Hijo al Padre, en la que la voluntad natural humana ha sido llevada por entero dentro del Yo del Hijo, cuya esencia se expresa precisamente en el «no yo, sino tú», en el abandono total del Yo al Tú de Dios Padre. Pero este «Yo» ha acogido en sí la oposición de la humanidad y la ha transformado, de modo que, ahora, todos nosotros estamos presentes en la obediencia del Hijo, hemos sido incluidos dentro de la condición de hijos”. (Benedicto XVI, Jesús de Nazaret, Desde la entrada en Jerusalén hasta la Resurrección, pág 64).
«No es Bergoglio el único que ha jugado a esto […] Benedicto XVI »
😴 Zzzzzzzz
–TOC, TOC. –¿Se puede, doctor?
–Sí, sí; pase, pase.
El Papa Francisco jamás ha dicho que el infierno está vacío; sino que le gustaría pensar que el infierno estuviera vacío.
Estas palabras de J. M. Escribá de Balaguer demuestran que hay mucha gente que piensa que todos somos hermanos:
«Todos somos hermanos!”
Escribió también el Apóstol que «no hay distinción de gentil y judío, de circunciso y no circunciso, de bárbaro y escita, de esclavo y libre, sino que Cristo es todo y está en todos». Estas palabras valen hoy como ayer: ante el Señor, no existen diferencias de nación, de raza, de clase, de estado… Cada uno de nosotros ha renacido en Cristo, para ser una nueva criatura, un hijo de Dios: ¡todos somos hermanos, y fraternalmente hemos de conducirnos! (Surco, 317).
Y por otra parte lo mínimo que podemos pedir es sólo pensar salvarnos del infierno; es mejor enseñar que Dios es puro amor, y si conociéramos cuanto nos quiere no dejaríamos de llorar.
Pienso que por aquí va el pensamiento del Papa Francisco. Errar es humano.
«El Papa Francisco jamás ha dicho que el infierno está vacío; sino que le gustaría pensar que el infierno estuviera vacío»
Francisco jamás ha dicho que «le gustaría» pensar que el infierno «estuviera» vacío, sino que «le gusta» (en presente, no en condicional, que son tiempos verbales cuyo empleo no significa lo mismo) que «está» vacío (idem).
«Estas palabras de J. M. Escribá de Balaguer demuestran que hay mucha gente que piensa que todos somos hermanos»
Lo que usted ha transcrito no «demuestra» tal cosa, pues se refiere exclusivamente a los cristianos, con independencia de su condición de esclavo o libre; ser judío de nacimiento o converso del paganismo; proceder de un sitio o de otro… Lo aclara perfectamente con la frase: «Cada uno de nosotros ha renacido en Cristo», sólo aplicable a los bautizados, que es la única forma de renacer en Cristo.
«es mejor enseñar que Dios es puro amor»
Pero sólo perdona a quienes se arrepienten.
EL SEÑOR, ¡NUNCA NOS ABANDONARÁ!. AMÉN
Un poco tarde. La Gran Apostasía está casi completada y solo unos pocos resisten como católicos de los de siempre. Creo que deberíamos enfocarnos en la siguiente amenaza que nos señala la Sagrada Escritura: el Anticristo que predice, una vez que la Fe católica haya desaparecido del mundo.
El obispo Stryckland tiene razón al constatar que el Vaticano (empezando por Francisco) se ha separado de la doctrina católica y ha caído en apostasía. Por eso debemos resistirles corrigiendo sus errores.
«más de un papado está seriamente implicado en la falta de fe sobrenatural necesaria para hacer frente a la marea de apostasía».
¡CATHOLICUUUUUS…!
Corra, que aquí hay otro con TOC.
Si sumamos a Viganó… ya somos tres.
Si lo tiene, desde luego no es el de usted. Pero, como usted nunca entiende ni lo que lee, ni lo que transcribe… En eso se parece usted tanto a Francisco, que no me extraña que se pase la vida blanqueándolo: él también suele soltar la coletilla: «como decía el papa tal [póngase el nombre del papa que corresponda según el tema tratado]…», para, a continuación, decir justo lo contrario. Pues, usted igual: «digo lo mismo que éste o aquel». Pues, qué bien: ni ese ni aquel son el oráculo de la verdad, ni tampoco dicen lo que usted. Pero, si le hace «ilu» creérselo…
El asalariado no le interesan las ovejas como al buen pastor .
Ya Jesús hacìa ese reproche que algunos les servìan con los labios pero su corazón esta lejos de Dios.
Hay muchos Judas Iscariotes infiltrados en la Iglesia comenzando en Alemania y mucho tiene que ver con poder y dinero . Los que mas hablan de los pobres son los mas sedientos de poder y dinero.
Que sean honestos consigo mismos los tantos teologos que no creen en Jesús , ni en su enseñanza, ni en la biblia , ni en la iglesia.
Nos estan robando la fe y la iglesia fundada por Jesús para crear otra cosa diferente . Es mi opinión.
Bueno Monseñor anda con la devoción de la Virgen Desatanudos.
Y creo le está afectando para mal.
Esta poniendo el ventilador?. Eso parece,. Habla de otros papás, sin mencionar sus nombres. Uff.
Hay que diferenciar los errores de gobierno, las opiniones personales, la predilección de una u otra filosofía, de lo que es falta de fe o decir
herejías.
Y Bergoglio es un disparate con piernas o en silla de ruedas. Lo mismo da.
Que han existido papas deplorables o
Con vida disoluta, pues si. Ahora bien nadie se ha atrevido a manosear el depósito de la fe como Bergoglio. No es equiparable a nadie.
Ni papa, ni antipapa, el es otra cosa.
Llama la atención a que se refiere a «prelados y fuerzas poderosas». No le pone el cascabel al gato. La culpa siempre de otros. Cuando aquí si te mueves no sales en la foto :despotismo de libro.
Bergoglio : miau.
De falsos profetas está llena la historia. Polarizar la fe es un gran error y si lo humano y lo divino no van juntos, eso si es apostasía.
Oremos más bien para no andar tirando piedras como los fariseos de la época de Jesús que querían lapidar a la mujer adultera.
No eran los fariseos quienes «querían» lapidar a ninguna adúltera: era la ley judía de entonces la que lo prescribía, y no sólo para los adúlteros (se lo prescribía a todos, no sólo a los fariseos). ¿A cuántas adúlteras han lapidado los católicos en los 2.000 años de historia de la Iglesia? A ninguna. Pero, de eso, a no decirles que pecan, a animarles a comulgar en pecado, o a darles «bendiciones» truchas, hay un trecho muy grande, y demuestra una total falta de caridad.
Hay infinidad de textos provenientes de la enseñanza directa del cielo que deben servir para transitar dentro del arca de María, nueva arca de Noé, el libro de Gabriela Bossis, Un llamamiento al amor, Luisa Picarreta (sin mediaciones), A Mis hijos predilectos los sacerdotes, María Valtorta, y tantos otros, otros que permanecen en lo escondido pública de la iglesia, pero han llegado a muchas almas. Su lectura continuada permite situarse en el corazón de la Madre. Decir sin más que hay que hablar de la salvación es poco, hay que hablar del camino hacia ella que es Ella.
Está en apostasía pero igual vale para beatificar santos del opus. Vaya a contarle el cuento a otro, «sacerdote anónimo».
¿De quién habla usted?