El controvertido cardenal Hollerich y estrecho colaborador del Papa Francisco ha concedido una entrevista a un medio luxemburgués.
Preguntado por la bendición a parejas homosexuales, el cardenal Jean Claude Hollerich ha afirmado que él está «en la misma línea que el Papa. ¿Nos negaríamos a bendecir a una pareja homosexual porque son “pecadores” y bendeciríamos a un empresario que va a invertir contra la humanidad? Es hipócrita».
El purpurado luxemburgués y miembro del Consejo de Cardenales, asegura que «el Papa se considera un “pecador” y yo también». «Al Papa no le gusta condenar los pecados de los demás sin mirar los propios. Y añade: “¿Por qué preocuparse sólo por la moralidad que está por debajo del cinturón?”, señala el cardenal.
Hollerich se muestra partidario de «evolucionar» en estos aspectos. Además, sostiene que «muchos obispos se plantean la cuestión del matrimonio de los sacerdotes» porque «a algunas personas les resulta difícil estar solteras y vivir el celibato. Darles la opción permitiría tener algunas personas más listas para el sacerdocio».
Por último, el cardenal Hollerich no se ve como sucesor de Francisco. «Estoy al servicio del Papa, a quien debo obediencia. Está ahí, no pienso en reemplazarlo. Y hay hombres mucho más cualificados que yo», concluye el cardenal luxemburgués.
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El purpurado dice «el Papa se considera un “pecador” y yo también». <>. El Papa no condena ni perdona nada. El Papa NO ES la Verdad. Sirve a la verdad.
Y añade:<> ¿Y por qué excluirla?
Observando las simplezas que verbalizan la mayoría de los Obispos, me pregunto.
Quién los selecciona?
Quién lo hace no usa las enseñanzas De Dios.
Estamos fritos con estos inservibles
Buena pregunta
Pues en el libro de Charles Murr «Asesinato en grado 33» se explica muy bien, que durante 12 años un masón era el encargado de seleccionar a los obispos de todo el mundo.
Imagínate el desastre.
Obró durante el pontificado de Pablo VI, Juan Pablo I y JuanPablo II (supongo que una parte también con Juan XXIII)
El matrimonio canónico es una forma mas de castidad. El que quiera quitarse de encima las tentaciones de la lujuria casándose, está perdido. Además de un mal sacerdote será adúltero. Llegados a este punto en que la inmensa parte de los sacerdotes no pueden vivir en castidad por los motivos que sean, pues muy fácil, que se salgan, que se hagan un nudo, que tomen bromuro, o se tiren a una zarza. El celibato es solo para héroes que quieren ser otros Cristos a su imagen y semejanza y debe mantenerse a toda costa. Las rebajas modernistas en la iglesia solo llevan al desastre.
Si de pequeño cuando me daban tanta caña con lo del sexo, me hubiera imaginado que los prelados de la iglesia llegarían a ser unos pajilleros como mal menor, jamás lo hubiera creído.
Yo conozco varios hombres casados y por las infidelidades públicas, es evidente que le cuesta vivir también el celibato. Si no hay virtud una sola no alcanza.
A mí, sobre todo con lo que se ve en las redes, me está costando ser fiel a mi esposa. Aún le soy fiel, pero cuesta. Entonces, según el razonamiento de este señor (por llamarlo de alguna manera porque no sé si eso sea razonamiento) según el cardenal, La Iglesia debería autorizar la infidelidad o el adulterio sin que eso afecte el matrimonio. Vaya parranda de pillos que tenemos de obispos, cardenales y papa.
Parece ser que ayudar a quienes les cuesta a cargar con su cruz es algo que al cardenal Hollerich ni se le pasa por la cabeza.
No nos tomen por tontos, el tema no es el celibato es la Castidad, eso es lo que falta. Que se casen y cuando no soporten aguantar casados que se divorcien.
Esas palabras son sensatas y honestas. Una forma de combatir los escándalos que permanentemente están saliendo a la superficie es con el celibato opcional y también con el diaconado femenino. La tradición de la Iglesia, durante siglos, acogió ambas opciones.
Tostón, no solo eres eso, sino que además eres bien TONTÓN. Desaparece de una vez cretino.
«Una forma de combatir los escándalos que permanentemente están saliendo a la superficie es con el celibato opcional y también con el diaconado femenino»
¡Qué cacho de mentira! Los abusos del «clero» luterano que han salido recientemente a la luz lo demuestra: las tres cuartas partes de los abusadores estaban casados. Si esa mentira no se la creía casi nadie antes (salvo los ya convencidos, a quienes la verdad les importa una higa), ahora ya no se la cree absolutamente nadie. Y mejor no hablemos de vocaciones: los herejes protestantes están peor aún que la Iglesia católica: ni con barra libre aumentan (homosexuales confesos, casados, mujeres…). Los demoledores tendrán que inventarse otra trola (no les costará mucho, dada la práctica que tienen). En cuanto a la Tradición, ¿cuándo han podido casarse los curas? Jamás. Entre los ortodoxos tampoco; y los casados a los que ordenan (a la inversa está prohibido) tienen vetado el episcopado.
A medida que la manga ancha del modernismo eclesial vaya suprimiendo el sexto mandamiento, todos los demás mandamientos y virtudes se verán afectados. La virtud de la castidad y de la pureza son imprescindibles para ser santos, la lujuria desenfrenada acaba por distorsionar las conciencias y se acaba por perder la fe. La virtud es el beneficio inestimable de nuestra redención. Sin virtudes estamos condenados al infierno. Con la pérdida de la fe generalizada la iglesia está condenada a la desaparición. En ese camino estamos y ciego está quien no lo vea. Estamos posiblemente en la peor tribulación que vieron los tiempos, son tiempos para llorar la pérdida de la esposa de Cristo. Dios mío, por qué nos has abandonado.
Y desde tiempos inmemoriales, a los tostones siempre se los tuvo que soportar.
Por ese regla de tres, a los casados hay que permitirles adulterar, porque a algunos les cuesta vivir el matrimonio. Así habrían más matrimonios
Lo que es hipócrita es bendecir parejas ilícitas, y decir que se bendice personas, cosa que siempre se ha hecho.
Lo que es hipócrita es abogar por la traición del compromiso sacerdotal, y por el matrimonio de los sacerdotes, más aún cuando muchos de esos a los que les resulta difícil vivir el celibato tienen gustos homosexuales.
Y quienes parecen preocuparse «sólo por la moralidad que está por debajo del cinturón», para destruirla, son quienes, como él, ni siquiera saben, o sí, que el cuerpo es el templo del Espíritu Santo, y que, destruyendo esa moralidad, también destruyen su templo.
«¿No saben que ustedes son templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en ustedes? Si alguno destruye el templo de Dios, Dios lo destruirá a él. Porque el templo de Dios es sagrado, y ustedes son ese templo» (1 Cor. 3, 16-17).
Este es un vendido al protestantismo y a todos los poderes globales, que en vez de ir de cardenal estrella portavoz de no se que Europa que vaya a confesar al soberano de Luxemburgo podrido de millones.
Soberana tontería que resulta mentira. El celibato es algo muy rico pero no es de derecho divino si no eclesiástico y puede haber reforma, otra cosa es que sea conveniente o no, pero decir que se debe de quitar porque les es muy difícil cumplir con el celibato, es asumir que la pureza no tiene importancia, que un santo no necesita la castidad (hay santos que fueron casados, viudos pero ninguno de sexualidad desenfrenada) y que eso es algo que desparece como valor.
Más bien creo y es una vergüenza que estamos viendo mucho cura impostado haciendo lo que le da la gana desde hace mucho tiempo sin que funcione la disciplina en la Iglesia y pocos o muy pocos dados a las mujeres que sería lo menos malo. Este cardenal masoncillo no se entera que el gusto va por otro lado en el 90%.
Como por cierto es muy difícil llevar la castidad con la misma siempre pues ala cada tres meses cambiamos y que lo permitan porque tenemos graves problemas y el ejemplo grotesco lo tenemos en un detenido sobrino famoso de una cantante famosa promíscuo como él sólo, varios matrimonios arrasados y cuando le va a detener la Guardia Civil por supuesto robo le pillan por decirlo finamente practicando el onanismo.
Es muy posible que este cardenal tenga problemas de pureza
A mí me cuesta amar al prójimo…o a mí misma incluso…para cuándo me dispensan de algún mandamiento que me permita no seguir lidiando con eso?…
La verdad son incómodas las cruces no?…
Ah…me suena que alguien también le dijo al Señor que se baje de la cruz… otro que no vaya a Jerusalén… Tan retrógrado nuestro Señor…
Hace rato que cruzaron el límite de lo absurdo este grupo de viejos degenerados.
«El cardenal Hollerich es partidario de que los sacerdotes se casen porque a algunos les cuesta vivir el celibato» = «El cardenal Hollerich es partidario de que los cónyuges adulteren porque a algunos les cuesta vivir la fidelidad».
Dice el muy cret… : ¿»nos negaríamos a bendecir a una pareja de homosexuales, pero bendeciríamos a un empresario que va a invertir contra la humanidad»? Sí Sr Hollerich, hay que negarse a ambas. Y ¿quien hace eso? Ah, sí, ya recuerdo: el Papa Francisco! El fue el que bendijo el Foro de Davos, hace poco, o sea, a satanás y a una bruja que fue allí. Ambas cosas son una aberración Sr. Hollerich, hay que negarse a bendecir ambas cosas porque son pecaminosas y son contrarias a la ley de Dios. Otra cosa es ser homosexual y creyente, pero vive en gracia, sin pareja y cumpliendo los mandamientos. Ése no tiene la culpa, si por cosas de la genética, le han cambiado las hormonas.