Agencia Católica de Noticias / De nuevo, la lucha por el aborto en el Estado de Guerrero… Tras el ascenso de Evelyn Salgado Pineda al gobierno del Estado, la Cámara de Diputados local pone de nuevo el tema en la mesa de las discusiones ganando en la Comisión de Justicia el primer peldaño para llevar al pleno el dictamen de reformas al Código Penal y tolerarlo hasta la doceava semana de gestación.
Pero el asunto no es terso ni sencillo. Tal dictamen fue aprobado a través de un golpe legislativo operado por la secretaria de la Comisión, la morenista Beatriz Mojica Morga, quien presidió la reunión extraordinaria con la ausencia del presidente, el diputado Jesús Parra García (PRI) y de la vocal, la diputada Ana Lenis Reséndiz Javier (PAN) quienes protestaron por el desarrollo de una sesión ilegal que “no se realizó en apego al procedimiento legislativo y al cronograma de actividades planteado al interior de la Comisión, que consistía en el desarrollo de diversas reuniones con las instituciones involucradas y colectivos de la sociedad que están a favor y en contra de la interrupción legal del embarazo”, sostuvo el presidente quien no dudó en decir que este golpe es una demostración más del autoritarismo de morena, pleno de ilegalidad y agandalle.
El aborto en Guerrero trae una larga historia de fracasos legislativos. En 1992 fue presentada la primera propuesta; en 2007, otro proyecto incluso llevó a la conformación de foros y debates, pero la división del PRD hizo que la iniciativa naufragara. En 2014, otro intento corrió con la misma suerte hasta este 2022 que, con la Legislatura estatal con mayoría de grupo parlamentario de morena, se reimpulsa esta intención que ha dividido y polarizado siendo el PRI y el PAN de los objetores para no aprobar en el pleno este dictamen el cual acusan de ser un resultado de la ilegalidad por no haber seguido los procesos legislativos.
No obstante las dudas sobre la legalidad, el Congreso estaría en condiciones de iniciar la discusión este 11 de mayo y no son pocas las voces que reclaman el respeto a la vida a través de movilizaciones de grupos provida y sectores religiosos. El 30 de abril, los obispos de la provincia eclesiástica de Acapulco animaron a los fieles a salir a las calles y exigieron a los integrantes de la LXIII Legislatura a cumplir con “su deber de proteger los derechos fundamentales sin discriminación alguna. No puede condenarse a muerte a un ser humano porque no ha alcanzado las doce semanas de desarrollo en el seno de su madre”.
Poco a poco, el aborto avanza en la República mexicana. El principal factor de su tolerancia fue la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación -SCJN- cuando, en septiembre de 2021, declaró la inconstitucionalidad del aborto punible, pronunciándose, por primera vez, a favor de garantizar el derecho de las mujeres y personas gestantes a decidir sin enfrentar consecuencias penales. Ciudad de México, Oaxaca, Hidalgo, Veracruz, Baja California, Colima y Sinaloa son las entidades en las que es garantizado sin consecuencias punitivas.
Mientras en los Estados Unidos, la Corte Suprema pretendería prohibir el aborto y declararlo delito grave, en México las cosas marchan por otros derroteros. El aborto avanza y no hay medidas ni políticas sólidas para el desarrollo de las mujeres y la protección de la familia que den posibilidad de prevenir este deleznable crimen en contra de los más débiles. Es claro, aunque la SCJN determine la inconstitucionalidad, lo real es la urgencia de medidas que beneficien a las mujeres para no favorecer la salida más fácil: el asesinato de las personas en gestación.
En este clima de polarización, incitado por el partido en el poder, la mejor forma de distraer sobre sus errores es levantar distractores y cortinas de humo. El tema del aborto parece ser uno de ellos. Guerrero, de los Estados más pobres en el país, no sólo tiene un rezago ancestral y sus habitantes viven en condiciones de inseguridad y violencia, crecen los feminicidios y la trata de personas. Ahora, el mal llamado progresismo quiere hacerlo parte de este execrable dominó del aborto y ser la próxima ficha en caer. ¿Cuál seguirá después?