Los viajes del Papa Francisco y el ‘papa de los viajes’, operación Orlandi en el Vaticano, orgullosos de San Juan Pablo II y Benedicto XVI, Spadaro, los pro islámicos, vacunas y dineros.

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Otra semana que terminamos y el caso Orlandi está resucitando viejos fantasmas en el Vaticano. Tenemos frases gloriosas, de dudosa autoría, que nos indican lo que estamos viviendo: «Los muertos que vos matáis gozan de buena salud».  «Con aquesta polvareda, perdimos a Don Beltran».  La realidad actual del Vaticano es de una profesional mediocridad, y somos muy generosos, se pide adhesión absoluta e inquebrantable al Papa Francisco y eso conlleva que vamos bajando el nivel a límites nunca antes conocidos.  Los buenos profesionales van desapareciendo y sus sonoros puestos, en otros momentos prestigiosos, los van ocupando dóciles lacayos agradadores hasta la náusea.

En el Vaticano se contiene la respiración mientras el Papa Francisco confirma la visita apostólica prevista para finales de abril a Hungría. “Dentro de dos semanas, si Dios quiere, partiré para la 41ª peregrinación que visitará Hungría”, “luego estará Marsella, y Mongolia y todas las cosas que están en lista de espera”. El Papa Francisco  recordó los 104 viajes de Juan Pablo II. Incluso Wojtyla nunca se detuvo, a pesar de sus condiciones de salud, tanto que se convirtió en el ‘Papa de los viajes’.  “Para mí es importante encontrar personas, comunidades, fieles, creyentes de otras religiones, mujeres y hombres de buena voluntad”.

El Papa Francisco decidió que no quería un médico personal, después de destituir a varios, aparentemente debido a diferencias en las vías de tratamiento propuestas, eligió a un enfermero como su médico de facto y el caos resultante reina supremo. No tenemos informes médicos, ni los tendremos, el Papa Francisco es su propio médico y solamente necesita ejecutores de sus órdenes. Hemos pasado de la neumonía a la bronquitis, del ataque de fibrilación a la bronconeumonía y al infarto. Todo negado hasta que el propio interesado a un amigo suyo le confesó que había estado muy mal y que había «perdido el conocimiento».  ¿No es mejor volver al viejo y frío boletín médico?

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Nadie quiere decir con claridad que en los procesos emprendidos por el tribunal único del Vaticano se está manifestando ‘urbi et orbi’ la total incapacidad de un sistema imposible. San Juan Pablo II quiso que todo lo relacionado con el proceso de su atentado lo llevara la justicia italiana, era muy consciente, él y sus consejeros, de la imposibilidad del sistema Vaticano de entrar en juicios complejos. Hoy se ha perdido la cabeza y nos atrevemos con todo, con el riesgo, más certeza, de hacer el ridículo sin fin. Tanto el promotor de justicia del Vaticano, el fiscal, Diddi, como el juez Piganatone, están desacreditados por su trayectoria en el caso Orlandi en Italia para juzgar con un mínimo de credibilidad este caso y todos los demás, mucho más este. En ambos casos y según confesión propia, ejecutan órdenes recibidas “por el secretario de Estado y por el Papa Francisco”.

Hoy tenemos mucho artículo sobre el caso Orlandi, sabemos que muchos de nuestros lectores se pierden en el caso y lo consideran muy italiano, pesamos que es un error y, como vemos hoy, salpica al Vaticano y los últimos pontificados y puede tener muchas ramificaciones. La petición de verdad de la familia es totalmente legítima y se debe legar a las últimas consecuencias, pero, una vez más, se les está instrumentalizando. Es impresentable y falsa la insinuación de que Juan Pablo II y Benedicto XVI han  estado involucrados en la desaparición de Emanuela Orlandi, y que han encubierto crímenes abominables.  Las noticias se centran en las más que insinuaciones de Pietro Orlandi sobre Juan Pablo II. El silencio ensordecedor de la Santa Sede y de la Conferencia Episcopal Italiana demuestra una inquietante complicidad en esta vergonzosa operación por parte de quien, más allá de sus proclamas, se ha rodeado de personajes despreciables y moralmente comprometidos, garantizándoles protección e impunidad.

¿Fue Juan Pablo II un depredador sexual de las niñas? ¿Salía por las tardes de su apartamento en el Vaticano con dos monseñores polacos para satisfacer sus gustos pedófilos? ¿La desaparición y eliminación de Emanuela Orlandi en junio de 1983 fue precedida por un intento del Papa Wojtyła de solicitar a la ciudadana-estado de 15 años en los jardines del Vaticano? De esto estamos hablando, suena muy duro, es lo que está en los medios.  La fábrica de calumnias funciona muy bien, no hacen falta pruebas, ni siquiera pistas para acusar de lo que sea y a quien sea. Son  lapidaciones post-mortem de quienes no pueden defenderse, y contra todo principio de civilización, quienes acusan no asumen  la carga de la prueba.  La avalancha que partió de La7 y el fiscal del Papa, Alessandro Diddi, revela a Pietro Orlandi, que dice a los cuatro vientos y las mil cámaras: «que desde la base hasta la cima» nadie gozará de inmunidad. Es decir, Wojtyla está investigando?  ¿Juan Pablo II y Benedicto XVI ocultaron, entorpecieron, encubrieron? . La campaña contra los predecesores de Francisco está ocurriendo desde hace  tiempo. Benedicto XVI fue recientemente extraído del ataúd para ser apuñalado y presentado como un protector en toda regla de sacerdotes pedófilos. Meses atrás paso lo mismo en Polonia, si hubiera tenido ese vicio atroz, los servicios secretos soviéticos y los del Pacto de Varsovia  lo habrían «tenido en la mano», chantajeándolos para condicionar su Pontificado. Tuvieron que dispararle. Hamos asistido con gozo en la Catedral de Roma a un concierto, sirva de desagravio, de un coro croata y otro polaco que rendían homenaje al Santo Papa Karol Józef Wojtyła.

Tornielli, Director Editorial del Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede, después de tres días de silencio, ha publicado: «Nadie merece ser difamado de esta manera, sin siquiera una pizca de pistas, sobre la base de los «rumores» de algún personaje desconocido del hampa criminal o de algún sórdido comentario anónimo emitido en directo por televisión». Editorial de Angelo Scelzo, exdirector adjunto de la Oficina de Prensa de la Santa Sede: «El caso Orlandi es un riesgo tóxico.».

El cardenal Konrad Krajewski, limosnero pontificio del papa Francisco, sale en defensa de su compatriota Juan Pablo II, en una posición que le honra: «Figuras cómo San Juan Pablo II y Benedicto XVI no necesitan defensores públicos. Es el servicio que han prestado a la Iglesia hasta el final lo que habla por ellos. El resto son cháchara ridícula que ni siquiera vale la pena comentar».  “Solo digo que en estos casos la fe no tiene nada que ver. Es la política la que levanta un alboroto similar contra figuras amadas por millones y millones de personas, no solo los católicos». «Todos sabemos que en Polonia desde hace tiempo hay un duro enfrentamiento entre los distintos partidos en temas delicados como el aborto, los matrimonios homosexuales, las parejas de hecho, la defensa de la familia tradicional formada por un hombre y una mujer unidos en matrimonio. Temas en los que la enseñanza del Papa Wojtyła fue demasiado clara, en el sentido de la defensa del vínculo matrimonial, defensa de la vida desde la primera concepción hasta la muerte natural».

Antonio Spadaro SJ es de Messina, Sicilia, ordenado en la catedral de Catania, y presenta en su tierra: «El Vaticano y la política internacional»  se vende como ilustrador de las estrategias, inquietudes y esperanzas que han movido y mueven la iniciativa del obispo de Roma. La Civiltà Cattolica marca las coordenadas de la actual administración de la secretaría de Estado vaticana: “Francisco desmonta, precisamente desde  la cátedra de San Pedro, las ideologías de la ‘guerra santa’. La ‘geopolítica’ bergogliana pretende desatar los nudos, fluidificándolos con la unción del bálsamo evangélico, es decir, de la misericordia, o al menos lo intenta, imaginando una convivencia humana y una acción política que hable el lenguaje de la reconciliación con el enemigo , sin excluirlo. Precisamente esta dinámica política que también es espiritual, da forma a las reacciones del Papa ante el horror. La reacción de Francisco ante las tragedias de los atentados y el terrorismo es de consternación, no de bando».

Comentario de Iustitia in Veritate sobre el episodio de la maestra suspendida porque hizo recitar a los niños un Ave María, por recomendación de dos madres de alumnos.  Estamos en la Italia de la corrección política, de la homologación al poder, abiertamente proislámica y obstinadamente anticatólica, que nunca pierde la oportunidad de castigar a quienes se atreven a ir en contra de los dictados de la narrativa dominante.  Este gravísimo «acto delictivo» (¡recitar un Ave María! ¡Tener un rosario hecho en forma de pulsera!).  Ya en 1968 se decía: “golpear uno para educar a cien”; ¡pero aquí estamos ahora en «castigar a uno para educar a sesenta millones»! Los medios de comunicación nos están blanqueando el Islam, pero la Cuaresma y la Pascua están completamente en silencio, y todo lo relacionado con la Iglesia Católica está cubierto por un silencio de muerte. El islam permite un control infinitamente más fuerte sobre las personas que el cristianismo.

Se ha presentado una denuncia penal contra Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, en los tribunales belgas, acusada de anular el gobierno federal durante la pandemia de covid-19, negociando el megacontrato para vacunas. Se trata de «usurpación de funciones y títulos», «destrucción de documentos públicos» y «apropiación ilícita de intereses y corrupción».  Se acusa al presidente de la Comisión de haber actuado «sin mandato alguno» en nombre de los Estados miembros de la UE -incluido el Gobierno federal belga- al negociar «directa y secretamente», en particular a través de SMS, contratos para la compra de vacunas con el CEO de Pfizer, Albert Bourla, durante la pandemia de Covid-19: “entre agosto de 2020 y noviembre de 2021, la Comisión firmó 11 contratos con ocho fabricantes de vacunas, obteniendo hasta 4.600 millones de dosis de vacunas con un coste total previsto de casi 71.000 millones de euros”.

«Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación».

Buena lectura.

 

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Comentarios
2 comentarios en “Los viajes del Papa Francisco y el ‘papa de los viajes’, operación Orlandi en el Vaticano, orgullosos de San Juan Pablo II y Benedicto XVI, Spadaro, los pro islámicos, vacunas y dineros.
  1. Esta gente tan despreciable, son carne de Satanás y casi sin posibilidad de salvación alguna, porque niegan a Dio, huyen de Él, le desprecian y humillan salvajemete, sin piedad y sin temor de Dios. En estas condiciones, sin saber la trama que está detrás de estas gravísimas acusaciones, estos individuos cumplen su misión miserable pensando que al morir no hay nada y por tanto, con los fines preconcebidos, hacen su labor de zapa y a esperar resultados. Me niego a creer que haya alguien importante detrás de estas acusaciones despreciables, pero me duele el silencio de la Santa Sede y de la Conferencia Episcopal Italiana. Pues tengan cuidado, porque si no creen en la condenación eterna lo han de saber. El pueblo polaco ha saltado como una ballesta a las noticias comunistas de sus mentiras y patrañas. Se sabe demasiado bien la técnica sádica de los esbirros comunistas. ¿Por qué en Italia no? Causa pavor las intrigas palaciegas. Creo en Dios y en mi corazón vive San Juan PABLO II y Benedicto XVI. No podrán contras las fuerzas del mal contra Jesús y su Iglesia

  2. 1. La creencia en información falsa y difamatoria sobre Juan Pablo II y Benedicto XVI, los estudios muestran que en general, se tiene una tendencia a creer en información que confirma las propias creencias preexistentes, independientemente de su veracidad: esto se llama sesgo de confirmación.

    2. Este sesgo de confirmación se ve exacerbado en el entorno incendiario de las redes sociales y la polarización política de todo tipo (odio a Juan Pablo II y Benedicto XVI por la defensa de la Fé), donde la gente recibe información de fuentes que comparten sus puntos de vista y son renuentes a cuestionar la veracidad de esa falsa información: vivir dentro de las redes afines se llama isla o burbuja informativa, pero es mejor llamarlo cueva informativa, formativa y performativa.

    3. Si hay difamación e injuria, los estudios indican que muchos se creen la información negativa sobre individuos y grupos que ya son percibidos negativamente: el efecto de halo negativo o de refuerzo mutuo.

    4. La calidad de la fuente de información afecta a la percepción de la veracidad, así como la cantidad de veces que una información se repite (efecto Goebbels): «¡Lo dice cada día la prensa y radio del III Reich, luego es verdad!»

    5. La falta de conocimiento o comprensión sobre un tema induce a creer información falsa o engañosa, ya que se la gente es más susceptible a la persuasión y con menor capacidad de evaluar críticamente la información.

    6. Los prejuicios y estereotipos culturales también alteran la percepción de la veracidad de una información. Por ejemplo, si un estereotipo negativo sobre un individuo y grupo ya está arraigado en la sociedad, el mundo puede ser más propenso a creer información vejatoria que confirma ese estereotipo.

    7. Emociones: afectan a la capacidad para procesar y evaluar críticamente la información. El enojado o temeroso se cree información falsa que confirme esas emociones

    8. Autoridad: información falsa que proviene de una fuente o emisor que es autoridad o experto: la falacia de autoridad.

    9. Sesgo o favoritismo de grupo: se tiene una opinión más favorable de los de mi colectivo, y negativa sobre los de «fuera del grupo».

    10. Memoria selectiva: se recuerda mejor la información que confirma creencias preexistentes, mientras que se olvida o ignora información que las contradice.

    11. Comodidad cognitiva: sentirse cómodos con esa información sin hacer un esfuerzo cognitivo para evaluarla críticamente.

    12. Disonancia cognitiva: no se cambia de opinión incluso cuando se presenta información que contradice estas creencias preexistentes, y justifica o racionaliza su creencia original falsa para reducir la incomodidad de la disonancia cognitiva

    …..

    La finalidad de la información falsa no es más que introducir un conocimiento falso en la sociedad, para así hundir la reputación de quien es considerado un enemigo contra el cual no existe en ningún tipo de reproche, cómo son los dos titanes de la lucha contra las ideologías demoníacas del comunismo, nazismo, neoliberalismo, laicismo, masonería islamismo, Juan Pablo II y Benedicto XVI.

    El bulo sólo anhela conseguir que todo el mundo acepte esta frase, que oí hace tiempo:

    – la Iglesia Católica está tan podrida que incluso están metidos de lleno Juan Pablo y Benedicto, y eso que parecían ser buenos, pero ya ves como han acabado…

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