La semana termina, el mes casi, y los viernes son esos días deseosos de un descanso merecido. La tentación de justificar una cierta caída de nuestras buenas costumbres en grande, pero en que abrimos los medios sentimos la inevitable subida de adrenalina que nos hace resurgir de nuestras perezas. Otro día muy lleno de noticias sabrosas que intentamos presentar.
Ayer nuestra desierta plaza de San Pedro vivió una imagen, impropio de estos tiempos, y todo gracias a la Acción Católica. No podemos hablar de esos llenos que todos recordamos en los que la plaza de desbordaba por las calles adyacentes y se alargaba en Conciliazione, en todo caso una buena asistencia. El encuentro titulado «Con los brazos abiertos»: “Gracias por este intenso y hermoso abrazo, que desde aquí pretende extenderse a toda la humanidad, especialmente a los que sufren”. “El abrazo es una de las expresiones más espontáneas de la experiencia humana”. “¿Cómo sería nuestra vida y cómo podría realizarse la misión de la Iglesia sin estos abrazos?”. El Papa Francisco habló de “tres tipos de abrazo: el abrazo que falta, el abrazo que salva y el abrazo que cambia la vida”.
Vamos conociendo algunos pasajes de la entrevista en la televisión estadounidense CBS, en la que el Papa Francisco llama «estúpidos» a los científicos y expertos que niegan la emergencia climática. Lamentablemente estamos acostumbrados, sobre todo los sufridos sacerdotes católicos, a expresiones de desprecio que quedarían mal en boca de cualquiera, y mucho más en la de un Papa. Sólo tenemos algunos fragmentos de la entrevista, realizada la semana pasada, que fueron difundidos el miércoles por la tarde; la entrevista completa de una hora será transmitida el 19 de mayo. En el fragmento difundido (ver desde el minuto 4’53») «Hay gente estúpida (dice “necia ” en español, traducido como “tonto” en inglés ), y aunque les muestres investigaciones, no lo creen. ¿Por qué? ¿Porque no entienden la situación o porque tienen sus propios intereses? Santidad, nadie niega el cambio climático porque el cambio climático es normal; desde que se creó el mundo el clima siempre ha cambiado, la «estabilidad climática» nunca ha existido.
Cualquiera con una educación mínima debería recordar haber oído hablar de edades de hielo o de períodos interglaciares. Son los catastrofistas climáticos los que hacen creer a la gente que el clima tendría su propio equilibrio eterno si no fuera por las actividades humanas que lo han arruinado todo desde la revolución industrial en adelante. El punto no es este, sino que hay quienes apoyan la existencia de una emergencia climática y hay quienes niegan que exista esa emergencia climática. El Papa Francisco obviamente apoya lo primero y ha abrazado plenamente no sólo la tesis de la emergencia climática sino también el catastrofismo que la acompaña. La encíclica Laudato Si’ y, peor aún, la exhortación apostólica Laudate Deum, son la demostración de cómo el Pontífice podría recibir fácilmente el nombramiento de miembro honorífico de WWF o Greenpeace.
Los «estúpidos» serían, por tanto, los numerosos científicos y expertos, entre ellos varios premios Nobel, que niegan, con datos en la mano, las tesis catastrofistas y denuncian la explotación de la ciencia con fines políticos. No estaría de más que el Papa Francisco evite juicios precipitados sobre las personas y recuerde que, aunque no se trate del Magisterio, en las entrevistas es importante saber de qué se habla, para no quedar como un necio. Hoy en día cualquier verdad proclamada por la Iglesia durante dos mil años puede ser cuestionada, pero una tesis científica controvertida es una verdad absoluta; un deber moral, so pena de ser insultado públicamente por el propio Papa.
El Papa Francisco ha dejado a Italia sin cardenales, o casi. En realidad, los cardenales italianos siguen allí, pero la mayor parte de ellos están en el Vaticano o en el servicio diplomático. Son 50 cardenales, pero 34 de ellos tienen más de 80 años, 16 son, por ahora, cardenales electores, de los cuales sólo 6 están al frente de una diócesis, algunos fuera de Italia. Vivimos una oleada de nuevos nombres, a menudo elegidos fuera de las viejas lógicas, un cierto signo de renovación que no siempre ha dado buenos resultados. Italia vive una disminución de vocaciones, más del 60 por ciento en los últimos 50 años. Según los datos publicados, los sacerdotes italianos han pasado de 38.209 en 1990 a 29.162 en 2020, contando con la llegada de sacerdotes extranjeros.
El Fernández, ha anunciado que tras los esfuerzos de Dignitas Infinita ya está trabajando y ultimando un documento sobre el discernimiento de las apariciones y otros acontecimientos sobrenaturales. Teniendo en cuenta la formidable experiencia adquirida con Fiducia supplicans, es posible que estemos ante la distinción entre apariciones pastorales y apariciones litúrgicas. Las primeras, se desarrollan en lugares aislados y recónditos y de entre diez y quince segundos; los segundos, que tienen lugar en un lugar sagrado y se repiten en el tiempo con solemnidad. La pastoral puede expresarse ante personas individuales o parejas, ya sean regulares o irregulares; las liturgias frente a una asamblea. Para la veracidad confiaremos en las encuestas y basta con que se alcancen porcentajes favorables cercanos al 75%, pero sólo entre los jóvenes menores de treinta y cinco años. En cuanto a otros acontecimientos sobrenaturales, quién sabe si algún día se estudiará con suficiente discernimiento cómo es posible que tantos clérigos inadecuados hayan llegado a la cima de las jerarquías vaticanas.
Parolin nos habla de una conversación con el ministro de Exteriores ruso, Sergej Lavrov, en Nueva York la semana pasada. «El ministro de exteriores ruso me expresó la posición ya destacada ante el Consejo de Seguridad. Un sustancial reproche al Occidente por no haber hecho nada cuando el Donbass era escenario de un conflicto de baja intensidad. Es decir, por no haber condenado la actitud de Ucrania y el incumplimiento de los derechos de las minorías ruso parlantes. En práctica, hizo un largo análisis sobre la actitud occidental que no condenó el cuadro que se delineaba». El encuentro «lo solicité yo para expresar la preocupación de la Santa Sede y reiterar la posibilidad ya expresada por el Santo Padre de que estamos siempre listos para facilitar un diálogo». El panorama general sobre la deriva bélica es inquietante y no deja dormir tranquilos. En los últimos días, Vladimir Putin – que controla el mayor arsenal nuclear del mundo – afirmó tener «todos los poderes y medios para defender a Rusia». También añadió que los Estados Unidos establecieron «un precedente» cuando lanzaron dos bombas atómicas sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki en 1945.
Seguimos con las ‘novedades’ del Anuario Pontificio de 2024, hoy es noticia la corrección en la fecha de nacimiento de un cardenal que iba a dejar de ser elector este 2024 y que ahora podría serlo por dos años más. John Njue, Arzobispo emérito de Nairobi (Kenia) fue creado cardenal por el Papa Benedicto XVI en el consistorio de 2007. Al no saberse la fecha exacta del nacimiento del cardenal, pero sí el año se tenía registrado como nacido el último día del mes: 31 de diciembre de 1944. El Anuario Pontificio y el sitio web del Vaticano han modificado la fecha de nacimiento al 1 de enero de 1946. En febrero de 2005 se modificó la fecha de nacimiento del Cardenal polaco Henryk Gulbinowicz, de quien se creía había nacido en 1928; y no en 1923. Explicó que el cambio de fecha fue algo que hicieron sus padres para evitar que fuera reclutado por el ejército durante la Segunda Guerra Mundial. En diciembre de este año el número de cardenales electores será de 120, el número establecido por el Papa San Pablo VI.
El caso Perlasca sigue en las noticias, de sospechoso que se convirtió en testigo y ha sido restituido como Promotor Adjunto de Justicia, fiscal, del Tribunal Supremo de la Signatura Apostólica. La Santa Sede aún no ha confirmado la noticia, pero no ha dicho nada para desmentirla. En el maltratado Anuario Pontificio, en el índice aparece su el nombre, pero no hay ninguna referencia a él en ninguna página o puesto. Durante el juicio, Perlasca dio testimonios contradictorios, tanto es así que algunas de sus declaraciones fueron incluso consideradas perjurio. Fue interrogado de maneras que muchos consideraron poco ortodoxas y no está claro cómo sus declaraciones podrían haber sido consideradas creíbles. El caso de Monseñor Perlasca no hace más que reabrir preguntas, sabiendo que no habrá respuesta.
Un artículo de hoy refresca un hecho muy extraño relatado en el Acta Apostolicae Sedis de abril mayo de 2013. El 28 de febrero de 2013, el apartamento apostólico, la «casa» del Papa Benedicto, fue cerrado y sellado por el entonces Secretario de Estado, Bertone. El 13 de marzo de 2013, el Papa Francisco debería haber roto los sellos del apartamento apostólico para tomar posesión. La mañana del 14 de marzo se quitan oficialmente los precintos previamente colocados en las entradas al Apartamento Papal, a excepción de la puerta de entrada al Apartamento y de la puerta que da acceso al ascensor «noble». Se encuentran con una sorpresa: seis de los siete sellos han sido rotos. Sólo quedó intacto (¿coincidencia?) «el séptimo sello».
La superiora de la Santísima Trinidad en Arlington ha sido acusada de violar su voto de castidad con llamadas telefónicas lascivas a un sacerdote. El obispo local quiere tomar el control del instituto, pero no será fácil. El caso terminó en los tribunales en una disputa legal sin precedentes. Las monjas pidieron bloquear la medida iniciada por el obispo Michael Olson y lo denunciaron a él, a la diócesis de Fort Worth y a la Asociación de Cristo Rey. Está en juego el monasterio, treinta hectáreas de terreno valoradas en cinco millones de dólares. El terreno había sido donado a las monjas por una la familia y los herederos podrían unirse a las monjas carmelitas en la batalla legal, dispuestos a todo. En los últimos días el monasterio, en un comunicado oficial, hablaba de «continuos ataques y abusos» por parte del obispo en un «horrible intento de tomar el control de nuestra administración, de nuestras vidas y de nuestras finanzas». “Rezamos para que el obispo de Fort Worth se arrepienta y pida disculpas públicamente y ante nosotras en persona. Hasta que esto suceda, ni él ni sus ayudantes serán bienvenidos en nuestra propiedad».
En medio de las realidades virtuales ya tenemos al “Padre Justin” , en realidad no es sacerdote en absoluto, ni siquiera es una persona real. Nace de Catholic Answers , una organización sin fines de lucro de San Diego que se ocupa de la apologética y ha anunciado el lanzamiento de este nuevo experimento de inteligencia artificial, el sacerdote-avatar «Father Justin», diseñado para responder preguntas sobre la fe católica utilizando el material recopilado. en la biblioteca de Respuestas Católicas, que consta de artículos, discursos y textos de apologética. Pensamos que podría ser una buena idea tratar de encontrar otra forma interesante y divertida (un poco caricaturesca, por así decirlo) de darle a la gente respuestas legítimas sobre la fe católica. Intentaremos corregir los defectos que la gente está encontrando y probablemente cambiaremos el personaje. Por ahora, Catholic Answers confirmó que había decidido abandonar el personaje del “Padre Justin” mientras revisaba su iniciativa de IA.
Un problema poco visible en los medios es el de los sacerdotes llamados a las armas en Ucrania. «Hemos subrayado que si se movilizan los párrocos o los responsables del sector humanitario, en particular Cáritas y todas sus divisiones, entonces surgirán grandes problemas, si algunas personas clave, abandonan este servicio y son llevados al frente». Zelensky expresa su «agradecimiento por el servicio de nuestros capellanes militares». Gracias a ustedes, nuestros hombres y mujeres en el frente tienen la oportunidad de comunicarse y sentir su apoyo». Por otro lado Zelensky ha pisoteado todos los derechos relacionados con la religión y los acuerdos con las distintas Iglesias.
Tosatti nos ofrece la petición de que sean los sacerdotes los que distribuyan la comunión dejando de lado los llamados ‘ministros Extraordinarios’. Ahora más que nunca estamos firmemente convencidos, como lo estaba Juan Pablo II, de que es absolutamente necesario readquirir el sentido catequético de los ritos, para que podamos volver a transmitir la verdadera fe católica y la fe en la Presencia Real de Cristo en la Eucaristía. Fue el propio Santo Padre Juan Pablo II quien dijo que: “La Eucaristía edifica a la Iglesia”.
Y terminamos con un largo artículo de hoy no ofrece la historia de impresionante martirio de San José Luis Sánchez del Río, mártir de la represión anticatólica llevada a cabo en México. Son muchos los mártires de la fe entre las filas de los cristeros, entre ellos un niño de sólo catorce años, José Luis Sánchez Del Río, nacido en el seno de una familia muy modesta pero profundamente católica junto a sus seis hermanos. El pequeño José creció en la fe cristiana y el 12 de octubre de 1922 recibió su primera Comunión. A partir de ese momento nació su gran amor por Jesús, llegando a ser asiduo a participar en las funciones religiosas, los sacramentos, junto con las oraciones y sobre todo el rezo del rosario en familia.
Las cosas se complican y los obispos locales participaron de alguna manera en la revuelta, casi por unanimidad y con la esperanza de persuadir al gobierno a hacer las paces, adoptando una medida sensacional: la suspensión indefinida del culto público. Las misas fueron canceladas y celebradas sólo en forma estrictamente privada, cualquier otra forma de culto como: procesiones, confesiones, celebración del bautismo, crisma y ritos matrimoniales fueron cancelados. Se llega a prohibición de utilizar expresiones como: «Si Dios quiere» y la prohibición de llevar sotana. En algunas regiones incluso quisieron obligar a los sacerdotes a casarse. El pueblo reaccionó, después de muchas masacres, con armas para defender su libertad, comenzó la revuelta que tomará el nombre de Cristiada, el nombre cristeros es una contracción del término Cristos Reyes, dado por el gobierno en sentido despectivo a los rebeldes, por su grito de batalla: «Viva Cristo rey».
Al comienzo de la revuelta, dos de los hermanos mayores de José ya se habían unido a la Cristiada y José quiso irse, pero sólo tenía 12 años. Visitando la tumba de un héroe de esta revuelta, el abogado Anacleto González Flores, asesinado en olor de santidad, pidió a Dios poder morir como él, en defensa de la fe y recitó el juramento de los cristeros «Juro solemnemente por Cristo y por la Santísima Virgen de Guadalupe Reina de México, para la salvación de mi alma; guardar absoluto secreto sobre todo aquello que pueda comprometer la santa causa que abrazo; defender con las armas en la mano la completa libertad religiosa de México. Si cumplo este juramento, que Dios me recompense; si fallo, que Dios me castigue». “Nunca ha sido tan fácil ganarse el camino al cielo como lo es ahora”.
Su profunda religiosidad y participación en las misas celebradas por los sacerdotes clandestinos que asistían espiritualmente a los voluntarios de la Cristiada, impresionaron mucho a sus «compañeros» quienes quedaron asombrados de su fe, tan seria para su edad. Se había convertido en presa fácil del ejército federal que lo capturó junto con otro indio muy joven, Lorenzo. Los dos jóvenes fueron encarcelados, pero, al no haber cárceles, fueron encerrados en las instalaciones de la antigua iglesia parroquial. La vida de los dos niños presos, José y Lorenzo, era muy dura, sin embargo a través de una pequeña ventana conseguían hablar con el mundo exterior, luego pasaban el resto del tiempo en oración, especialmente recitando el Rosario.
Impresionante una carta: «Mi querida madre: hoy fui hecho prisionero en combate. Pienso en el momento en que voy a morir; pero no es importante, madre. Debes someterte a la voluntad de Dios; muero feliz porque estoy muriendo junto a Nuestro Señor. No te preocupes por mi muerte, que es lo que me mortifica. En cambio, di a mis otros hermanos que sigan el ejemplo de los más jóvenes y harás la voluntad de Dios. Ten fuerza y envíame tu bendición junto con mi padre. Despídete de todos por última vez y recibe el corazón de tu hijo que os ama a ambos y hubiera querido veros antes de morir.»
Le cortaron las plantas de los pies, obligándolo, a caminar hacia el lugar de su ejecución entre empujones, escupitajos y palabrotas. Cuando llegó frente a la tumba preparada para él, por última vez le pidieron que renunciara a su fe, pero él se negó, indignado. Para evitar que el pueblo cercano oyera el ruido de los disparos, los soldados recibieron la orden de apuñalarlo, pero a cada golpe José respondía siempre con todo el aliento que aún le quedaba: «¡Viva Cristo Rey!». Sólo el disparo de un revólver logró interrumpir sus oraciones. José morirá poco después de dibujar una cruz en el suelo con su sangre como un verdadero mártir. Estos son , sin duda, los nuestros, ¿tanto cuesta entenderlo?
«Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre sino por mí».
Buena lectura.
El Papa Pio XI, de tendencia de monarca absoluto, mandó a los católicos que estaban ganando la guerra contra el ejército masónico, a abandonaran las armas. Intervino el embajador useño y se realizaron lo que llegaron a llamar «arreglos» como resultado de negociaciones. El gobierno del también Masónico, se comprometió a evitar matanzas, pero no cumplió este compromiso y el gobierno mató a miles de Cristeros, mientras los que no fueron masacrados lograron escaparse a EUEUU. Los obispos fueron los que negaciaron con el gobierno y manifestaron una ingenuidad extrema. Los Cristeros se sometieron la orden del Papa, un gran error, pues en una guerra no tenían ninguna obligación de cumplir la órdenes del Papa ni de los obispos, máxime cuando estaban apunto de ganar. Lección: ni el Papa ni los obispos debe meterse en la política ni en la guerra.
Creo que los disparates del Papa Bergoglio pueden tener un aspecto positivo que sería una contribución a la eliminación de la papalotria.