Información es poder. Vivir es comunicarse. La sociedad está en la Red. Es certísimo. Pero hoy hay exceso de todo: hasta de información. Le dedicamos un tiempo excesivo. Ahora triunfan en TV ‘programas’ tales como concursos, Magazines, reality shows… Son informaciones poco “útiles”: sólo para quien se aburre, como la célebre Telebasura. ¿Dan cultura? Escasa. ¿Ofrecen valores? Pocos. ¿Dignifican? Ni un milímetro. ¿Por qué ofrecen entonces algo tan zafio? Por ganar audiencia (= ingresos publicitarios). Usan los tres cebos fáciles para captar público: Violencia, Sexo y Glamour. ¿Es algo nocivo? Sí. Te acostumbras a entretenerte con dolor ajeno, con daños, con intimidades de terceros. Eso rebaja hasta al más sano. Malacostumbra. Convierte en válido y normal, habitual y comentable, asuntos increíbles, que son de psiquiatra. Línea roja. Hay asuntos que son privados. Jamás deben usarse para enriquecerse. – Burlarse o ridiculizar los problemas, deficiencias y creencias de las personas. – Nunca darle publicidad gratis al terrorismo, ni a la violencia, ni a los odios. – Sin censura, pero salvaguardar la intimidad, como ya se hace con las fotos de menores. No vale todo. Que algo no sea delito, ni punible, ni ilegal, no significa que puedas hacerlo tan feliz. Es un daño grave rebajar la calidad, hundir el nivel humano, ofrecer como ejemplo y modelo casos que son impresentables, corroer la cultura, difundir un lenguaje analfabeto, animalizar y asilvestrar los gustos del público. La información debe ir por elevación, por superación, por mejorar y enriquecer. No puede ir por mínimos, ni por dar al público “pan y circo” (basura moral e inmundicia intelectual), so pretexto de que “es lo que quiere” y “es lo que demanda la audiencia”. Cito a José Manuel Lara, de Planeta. 1.- La audiencia no justifica todo (Cuanto más bestia hablo, más me oyen). No valen “Morbo,sensacionalismo y escándalo, como estrategias de atracción de la audiencia”. 2.- La rentabilidad, tampoco es pretexto: no es lo prioritario. Hay obligaciones que van antes que forrarse. Clínica: dar salud. Universidad: dar conocimientos. Televisión: informar (función social). “La televisión no tiene la obligación de “formar”. Pero sí de no “malformar”. “Atenta contra la función social del medio”. 3.- Sobran algunos contenidos que sólo buscan audiencia: hacen daño, rebajan, animalizan. 4.- Huyo de la palabra “televisión basura”. La llamo televisión de bragueta. Yo lo llamo «teleporquería». Es un “Enfoque distorsionado de asuntos y personajes”, un “Desprecio a la dignidad, a la vida privada, a la intimidad, que toda persona merece”, una “Utilización de un lenguaje chillón, grosero e impúdico”. En definitiva, es “Mal gusto, lo escandaloso, el enfrentamiento personal, el insulto y la denigración”, pues “Ataca contra valores como la veracidad, la intimidad, la dignidad de las personas, la no discriminación y la protección de la infancia”, y “Conculca el respeto al honor, la fama, la vida privada y los derechos y libertades ciudadanos”.
Perder el tiempo
| 13 septiembre, 2014
José Manuel Lara es el menos indicado para dar lecciones a nadie.