El mendigo, el muletero, el besos y el viejo

Al mendigo de votos no le ha salido la cuenta completa. A su muletero se le ha ocurrido pescar en la pecera vecina. Al de los besos no le queda más que el amor y la espera a otra ocasión. Al viejo del cuento pepero no le ha convencido nada y acusa de corrupción el papelucho presentado como tabula salvationis Hispaniae. España camina, mientras, sin gobierno en efectivo, pero con un deseo de solucionar el laberinto del sistema de votos de hace más de dos meses. ¿Qué ocurrirá a partir de ahora?. No lo saben ni los padres constitucionales que restan aún, aunque sean viejos. ¿Nueva ronda de candidatos ante el Rey para proponer a otro? No lo saben ni los mejores consejeros de su majestad. ¿Puede el Rey elegir a un ajeno a la lucha partidista? Existe división de opiniones entre los constitucionalistas. ¿Nuevas elecciones generales? Algunos no lo desean, otros están ansiándolas como el sediento el agua. Todo está en el aire…Mientras Europa nos mira con lupa, y los señores de negro desempolvan sus levitones. Tomás de la Torre Lendínez