Repetir una cosa es algo que casi todos hacemos en la vida cotidiana. ¿Qué mayor no cuenta cientos de veces a sus hijos o nietos algo que le pasó hace años? ¿O cuenta una anécdota miles de veces? No es una enfermedad, en todo caso es una pesadez propia de la vejez o un olvido del mayor de que ya ha contado eso muchas veces. Y nada más. Tener una neurosis obsesiva o tener una psicosis es estar enfermo, como lo es el que tiene un tumor o una insuficiencia renal o una estenosis de carótida. Afortunadamente la gran mayoría de los pesados o reiterativos, no están afectados por la enfermedad obsesivo compulsiva (TOC)
No ceja en el empeño de difuminar lo preciso, embarullar lo claro, desdibujar lo concreto e ignorar el mandato de anunciar el Evangelio. Da la sensación, y así lo percibo, de encontrarse más a gusto con los enemigos de la Iglesia que con sus fieles. En definitiva, constituye en si mismo una tremenda contradicción que no contribuye en nada a la salvación de la almas. Deberemos esperar a que el paso inexorable del tiempo permita el retorno de la sana doctrina. En el mientras tanto rezaremos pidiéndole a Dios ayuda.
Esto es un verdadero suplicio para los católicos.
Repetir una cosa es algo que casi todos hacemos en la vida cotidiana. ¿Qué mayor no cuenta cientos de veces a sus hijos o nietos algo que le pasó hace años? ¿O cuenta una anécdota miles de veces? No es una enfermedad, en todo caso es una pesadez propia de la vejez o un olvido del mayor de que ya ha contado eso muchas veces. Y nada más. Tener una neurosis obsesiva o tener una psicosis es estar enfermo, como lo es el que tiene un tumor o una insuficiencia renal o una estenosis de carótida. Afortunadamente la gran mayoría de los pesados o reiterativos, no están afectados por la enfermedad obsesivo compulsiva (TOC)
La clave para mi, es el añadido «elegante y RICA». Eso es lo que hace que se pueda descargar sobre ella todo lo aue se antoje..
No ceja en el empeño de difuminar lo preciso, embarullar lo claro, desdibujar lo concreto e ignorar el mandato de anunciar el Evangelio. Da la sensación, y así lo percibo, de encontrarse más a gusto con los enemigos de la Iglesia que con sus fieles. En definitiva, constituye en si mismo una tremenda contradicción que no contribuye en nada a la salvación de la almas. Deberemos esperar a que el paso inexorable del tiempo permita el retorno de la sana doctrina. En el mientras tanto rezaremos pidiéndole a Dios ayuda.
definitivamente don bergoglio es un disco rayado bastante cansino que aburre hasta bostezar.