La noticia es grotesca por varios motivos. El primero porque España no ha solicitado el placet para quien todavía es ministro del Interior. Después no sabemos si este Gobierno se encontrará en situación de nombrar embajadores porque la interinidad puede tener varias salidas: Gobierno Rajoy, Gobierno PP sin Rajoy, Gobierno de coalición en el que los socios tendrán opinión, Gobierno Sánchez-Ciudadanos con Podemos o con la abstención de éste… Parece pues muy prematuro dar por hecho nombramientos y pedir vetos.
Además aviada iba la Santa Sede si para aceptar embajadores fuera a tomar en consideración la opinión de medios y más si no representan nada como Esglèsia Plural. El Vaticano exige poquísimo en los embajadores que le llegan. Ni siquiera el catolicismo de esas personas Cosa que sería imposible con los de bastantes naciones. A lo más que llega es a poner mala cara con algunos que su vida personal difiere abiertamente de los postulados de la Iglesia. Y eso en los procedentes de naciones con raíces católicas. Supongo que no hace la menor cuestión si el embajador de un país musulmán tiene varias esposas. Ni en las creencias religiosas o no religiosas de los representantes de Japón, Uzbekistán o Irán en el caso de que esos países tengan embajada ante la Santa Sede. También quiero suponer que podría ser motivo de rechazo fuera un militante anticatólico radical.
Recientemente hubo un largo conflicto con Francia en el que me parece que Roma no negó el placet sino que se limitó a no darlo sin más explicaciones. Y sin manifestar el por qué no llegaba la respuesta. Simplemente no llegaba.
En España tuvimos un caso parecido cuando de alguna manera, a posteriori, se declaró non grata la persona del embajador acreditado. En ambos casos Francia y España se avinieron. Con notabilísimo enfado del embajador español desautorizado. Y que duró poco más de horas veinticuatro porque jamás se ha vuelto a saber de la que a su juicio era importantísima personalidad que terminaría hundiendo en la indigencia a la Iglesia católica. Hoy no sé si todavía vive o ha fallecido porque lo cierto es que está totalmente missing. Creo que se llamaba, o se sigue llamando, Puente Ojea.
Da la impresión, caso de ser cierto que pueda ser el próximo embajador de España ante la Santa Sede, que como ministro de Rajoy está totalmente amortizado y que no se cuenta con él para un próximo Gobierno en el caso de que Rajoy consiga formarlo. Y digo que da la impresión pero puede ser equivocada.
Que al ministro del Interior le pongan micrófonos en su despacho y luego se hagan públicas sus conversaciones es de traca. Y prueba suficiente de incapacidad. Puedo entender también que le quieran agradecer los servicios prestados, aunque hayan quedado tan maltrechos, con la gabela de la embajada ante el Papa. Que a él, católico convicto y confeso, le puede parecer maravillosa.
Creo que Jorge Fernández Díaz, dicen que supernumerario del Opus Dei, es una buena persona pero de limitadas capacidades. Para la embajada, le sobran. Y lo haría bien y a entera satisfacción del Vaticano. Y también de un Gobierno de España que no sea militantemente anticatólico.
De su catolicismo, que lo exhibe constantemente, lo que me parece muy bien, tengo sin embargo alguna duda. No subjetiva en él sino objetiva. ¿Cómo se puede compaginar tanto catolicismo, tanta comunión, tantas muestras de piedad, con la participación en un Gobierno que todos los años masacra cien mil criaturas en el vientre de sus madres? Quiero pensar que por insuficiencia intelectiva.
No sostengo, tal vez por mi deriva liberal, que un católico no pueda participar en un Gobierno abortista, divorcista… Puede hacerlo sin exigir la desaparición del aborto, del divorcio… Que posiblemente hoy sean imposibles, por muy deseables que fueran, en nuestra sociedad. Antes habría que cambiar la sociedad y luego implantar lo que ella exigiera. Pero caben atenuaciones. Y en el Gobierno del que ha formado parte Fernández Díaz no hemos visto ninguna. Entendería la participación en un Gobierno de un católico que pudiera decir al salir de él que gracias a su participación y a las medidas que se tomaron los abortos son la mitad de lo que eran, los divorcios se han reducido en un 30% por las medidas que hemos tomado de protección a las familias. ¿Pero para seguir igual, qué hay que agradecerte? ¿Qué te puede agradecer Dios?
No recuerdo bien si una votación sobre el aborto fue en el Congreso. Creo que sí. Algunos votantes del PP no la aprobaron y hoy ya no existen. ¿La votó Fernández Díaz? ¿Un Ministerio bien valen cien mil abortos? ¿O ya cuatrocientos mil en la legislatura? Pues mucho estómago hace falta para tragarse esos sapos. Tal vez de entonces sea una infausta declaración de que los antiabortistas no caben en el PP? ¿Comprenden que no les vote?
Entiendo que hasta Rajoy pueda pensar en cambiar su ministro del Interior en el caso de que vuelva a formar Gobierno. El Vaticano puede ser una salida para un ministro sobrante. No se necesita casi nada para cubrir el desempeño. Hubo un embajador socialista que me pareció dignísimo, que siempre se confesó católico, con mucho más riesgo que Fernández, aunque posiblemente con menos comuniones públicas, medallas y novenas. Estoy seguro de que si nombraran al hoy Ministro no llegará nunca a la talla de Paco Vázquez, pero también pienso que no lo haría mal.
Lo de pedir que el Vaticano le vete me parece una estupidez más de las muchas que nos encontramos todos los días. Si es que los hay todavía mucho más insuficientes neuronales que Don Jorge. Al que no se me ocurre negarle su buena intención.
http://www.periodistadigital.com/religion/espana/2016/07/19/esglesia-plural-recoge-firmas-para-pedir-al-papa-que-vete-a-fernandez-diaz-como-embajadro-en-el-vaticano-religion-iglesia-espana.shtml
http://germinansgerminabit.blogspot.com.es/2016/07/el-entranable-josep-torrens.html
«Fernández Díaz ha sido un gran ministro del interior», sin ninguna duda. Sólo hay que ir a http://www.interior.gob.es y valorar las estadísticas: atentados, robos, tráfico, asesinatos, violencia contra la mujer…etc. La disminución de los principales índices de criminalidad así lo atestiguan.
«El problema es por qué no hay católicos bien preparados en filosofía, ciencias políticas y Doctrina Social de la Iglesia para involucrarse en política», porque resulta poco satisfactorio en todos los sentidos. Al artículo y al párrafo anterior me remito.
Que vaya a haber un gobierno PP sin Rajoy, no va a haber. Antes habría otras eleccionesy ganaría Rajoy por goleada porque le gente está harta del circo que hay montado por los políticos. ¿Por qué los católicos votan por el PP? Pues, por ser los menos malos. ¿Acaso deberían de votar por los podemitas o Ciudadanos, ni permite militar en el partido el que es contrario al aborto? El problema es por qué no hay católicos bien preparados en filosofía, ciencias políticas y Doctrina Social de la Iglesia para involucrarse en política? No hay en Esàña ni en ninguna parte, por lo visto.
Ha hecho una buena descripción del Sr ministro y solo me queda preguntar: Al cesar ¿cuantos niños habrá salvado?
Porque tragaderas, todas. Si eso ha servido para salvar algunos niños o conseguir que las leyes de ingeniería social hayan sido menos agresivas, vale, pero si no… Gastado y deshonrado, que dicen en algunos pueblos.
Fernández Díaz ha sido un gran ministro del interior. Espero que no tengamos que acordarnos de él. Y no voto al PP. Con respecto a lo que dice usted de convivir con un gobierno que aprueba el aborto y toma represalias con los pocos coherentes que votaron en conciencia le doy la razón. Que los católicos sigan votando al PP es otro misterio que se puede deber como usted dice a razones intelectivas.