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La sobrevaloración de Taltavull

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Creo que Germinans se equivoca sobre Taltavull: http://germinansgerminabit.blogspot.com.es/2015/06/taltavull-una-buena-persona-que-no.html Puedo entender la equivocación. Los que siempre han recibido patadas pueden sobrevalorar una sonrisa. Y dejarse engañar, incluso encantados, con una sonrisa. Las sonrisas sirven de poco si con ellas no va el alma. Hay quien sonríe porque esa es su mueca habitual. Como hay obispos abrazadores. Abrazan a todo el mundo. Pero, ¿hay algo detrás del abrazo o es un gesto repetitivo y sin contenido alguno? Tras la frialdad de Sistach puede engañar cualquier sonrisa. Pero no nos equivoquemos. El que algunos quieren traer es mucho peor que quien está abriendo la puerta de salida. Cierto que Germinans no se deja engañar del todo y advierte que no iba a ser un buen obispo para Barcelona. Personalmente pienso que incluso es peor que Vives. Que doctrinalmente, me refiero a doctrina católica y no a la separatista, me parece más seguro que Taltavull. Y en la otra, por ahí se andarán. Con la agravante que uno lo es de toda la vida y no tiene que hacer méritos para acreditarlo y el otro tiene que hacerse perdonar que viene de las colonias. Mi admiración por Germinans, tantas veces declarada, no se ve disminuida en nada por alguna discrepancia puntual. Que creo, además, mucho más afectiva que racional. Quien se muere de hambre agradece hasta un mendrugo de pan duro. Y quien s muere de falta de afecto sobrevalora una sonrisa aunque pueda ser fingida. Carrera fue una desgracia y Taltavull  lo es para la Iglesia catalana. ¿Fueron una desgracia sonriente? Pues peor. Porque la sonrisa puede hacer tragar la desgracia. Que es lo verdaderamente grave.

Comentarios
0 comentarios en “La sobrevaloración de Taltavull
  1. Cuidado con Taltavull. Es un calculador, un político taimado. Cuando le interesa juega a la moderación y buena vecindad pero en sí mismo es un obispo que sintetiza todo lo peor del progresismo eclesial.

  2. Me viene aquello de la ran y el escorpión. El escorpión quería pasar el río y no podía. Le pidió a la rana que le pasará. La sabia rana le dijo que no, porque la picaría, pero tanto insistió el escorpión, incluso creyéndose lo que decía, que no, que no la picaría; entre otras razones, la lógica de que moriría él también si lo hiciera, que al final convenció a la rana. Y mientras cruzaban, a mitad del río, la picó. Y ya ahogándose los dos, la rana le preguntó, ¡pero por qué? a lo que el escorpión la respondió, es mi naturaleza.

  3. La disputa esta en quien es peor,Herodes o Pilatos.
    A este paso,la dignidad de arzobispo de Barcelona se concederá in partibus infidelium,pues la única cristiana que va a quedar en tan querida tierra será la Dama del paraguas de la Ciudadela…

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