Esperando nombramientos episcopales

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Pasado el paréntesis de agosto es previsible que comiencen a caer nombramientos más o menos pronto.

En estos momentos hay cuatro diócesis vacantes que en buena lógica serían las primeras a cubrir: San Sebastián, Menorca, Gerona y Ávila.

Dos de ellas, la vasca y la catalana, en situación agónica, San Sebastián comenzaba a apuntar brotes verdes gracias al ímprobo trabajo de Munilla pero impresentables consejeros que parecen al servicio de Satanás consiguieron que lo removieran. Al obispo le causaron un disgusto y a la diócesis un daño seguramente irreparable. Dependerá bastante de quien nombren para sustituir a Munilla.  Y, aunque él no lo creía y los que le echaron no lo pretendían, le hicieron tal recibimiento en Orihuela-Alicante, harta esta diócesis de la absoluta nadedad de Murgui, que el que llegaba quedó encantado y quienes pretendieron fastidiarle,  reconcomidos de rabia,

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Gerona parece no tener ya solución, con muy poco clero y muy mayor y ejemplo de catalanismo, progresismo y secularización quedará un mínimo resto de catolicismo que será tradicional pues los otros se morirán o lo dejarán en muy poco tiempo. Es la diócesis que se encuentra peor de Cataluña y no seria extraño que hasta perdiera el obispado pasando a ser de Vich-Gerona. Unos pésimos obispos: Jubany, Camprodón y Soler llevaron a esta situación seguramente ya irrecuperable. Pardo, mejor persona y más simpático que los anteriores pero tan catalanista como ellos no quiso o no supo arreglar nada.

Menorca es la más insignificante de las diócesis españolas. Oficialmente tiene 84.ooo católicos que en realidad no llegarán a 20.000. Y poco más de una docena de sacerdotes, mayores la casi totalidad. Si no fuera una isla habría corrido ya la suerte de Jaca y Ciudad Rodrigo. De la que no creo que pueda escapar.

Ávila es la cuarta sede vacante. Se trata de un obispado pequeño, oficialmente 150,000 habitantes. Su problema como en general el de las diócesis de Castilla y León es la escasez de vocaciones.

Luego están los obispos pasados de fecha que hasta el momento son 10:

-Osoro, Madrid (16 de mayo de 2020)

-Cañizares, Valencia (15 de octubre de 2020)

-Omella, Barcelona (21 de abril de 2021)

-Barrio, Santiago (15 de agosto de 2021)

-Atilano Rodríguez, Sigüenza-Guadalajara (25 de octubre de 2021)

-Francisco Pérez, Pamplona (13 de enero de 2022)

-Herrero, Palencia (17 de enero de 2022)

.Sánchez Monge, Santander (18 de abril de 2022)

-Quinteiro, Tuy-Vigo (26 de junio de 2022)

-Reig, Alcalá de Henares (7 de julio 2022)

Y están en puertas, en lo que resta de año

-Cortés, Sant Feliu (23 de octubre de 2022)

-Yanguas, Cuenca (26 de octubre de 2022)

-Javier Martínez, Granada (20 de diciembre de 2022)

Y en 2023

Salinas, auxiliar Valencia (23 de enero de 2023)

Taltavull, Mallorca, (28 de enero de 2023)

.Morga, Mérida-Badajoz ( 28 de enero de 2023)

Giménez Valls, Lérida (31 de mayo de 2023)

–Melgar, Ciudad Real (24 de septiembre de 2023)

-Franco, Segovia (16 de diciembre de 2023)

 

Comentarios
9 comentarios en “Esperando nombramientos episcopales
  1. Para comprender el desastre episcopal de muchos obispos os animo a ver la entrevista qué subió ayer el P. Javier Oliveira Ravasi al P. Charles Murr…

  2. Trabajo no le falta al Sr. Nuncio, si le dejan. La jugada maestra sería despues de cubir las sedes vacantes, jubilar a Osoro y Omella, y quitarse estorbos.

    1. Omella seguramente no sea relevado antes de la primavera de 2024 salvo sorpresas. Osoro está menos claro, aunque está bien de fuerzas, habrá que ver en qué se queda el asunto de las fundaciones y qué hay de cierto en los rumores de que está enfrentado con Omella. Cañizares no está bien de fuerzas, pero por otra parte no parece que quiera irse, habrá que ver quién se sale con la suya, si él (que tiene buenos amigos en Roma) o el aragonés. El resto de los relevos de los que están en tiempo de descuento seguramente tarden, salvo claro está el de Granada, que ya está decidido.

      Sobre las vacantes: me llama la atención que ocho meses después los que echaron a Munilla de la Bella Easo no hayan conseguido un sustituto de su cuerda, ¿será que hay disputas a ese respecto? Gerona y Menorca deberían ser absorbidas por Vich y Mallorca. Ávila, finalmente, seguramente será para un sacerdote aunque no debería descartarse que la cubriera un auxiliar (Martínez Camino sería perfecto).

    2. El nivel Episcopal es lastimoso en general, empezando por el Cardenal Presidente de la CEE y terminando por los aún sin consagrar como Brotons: si fueran elegidos por méritos y con un examen para su capacidad para la función, de otra cosa hablaríamos porque el espíritu siempre está. De qué nivelazo episcopal sufrimos y padecemos!!! La ignorancia es muy atrevida. Lo único malo es que entre todos se están cargando la Iglesia.

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