ATEÍSMO MILITANTE

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ATEÍSMO MILITANTE

Ya que andamos entre agnósticos y ateos cristianos, nos ocuparemos hoy de otro ateísmo, este militante, puesto en circulación en la Argentina por Carmen Argibay, cuando fue designada como integrante de la Corte Suprema de Justicia.

En ese tiempo, le dedicamos al tema un par de clases en la Universidad Católica, esas que molestaban a sus autoridades y a algunos obispos, publicada en Verbo 427/428 año 2004, con un capitel de Prometeo: “Odio a todos los dioses”.

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Allí señalamos que el ateísmo niega la existencia de un Absoluto trascendente y concibe a la realidad encerrada dentro de los límites de la finitud. Señalamos la existencia de diversos ateísmos y seleccionamos a dos para tratarlos: el filosófico y el de Estado; aquí por razones de espacio nos ocuparemos solo del último.

Carlos Marx, en “La cuestión judía” quiere resolver la oposición entre el judío y el cristiano y se pregunta: ¿cómo se resuelve una oposición? Volviéndola imposible. Y así, la oposición religiosa se vuelve imposible suprimiendo la religión.

Esa idea fue aplicada en los países comunistas y aun hoy está vigente en China, Corea del Norte, Cuba y Nicaragua en forma estricta. Las consecuencias en algunos países fueron tremendas y en Camboya se eliminaron unos dos millones de personas por condenas a muerte, purgas políticas, trabajos forzados o hambrunas, sobre una población de quince millones cuando durante cuatro años se aplicó el maoísmo más estricto, mientras los Estados Unidos y China miraban para otro lado porque querían evitar la intervención allí de Vietnam. Muchos años después, fueron declarados culpables de genocidio y crímenes contra la humanidad y condenados a prisión perpetua, los dos últimos líderes vivos del régimen de Pol Pot por un tribunal auspiciado por la ONU.

Como comenta Gilson “la sola existencia de un Estado ateo militante prueba que Dios sigue siendo una resistente realidad. El Dios del burgués capitalista Francisco de Asís aun no ha muerto; si lo está el museo moscovita al ateísmo, el único consagrado a algo que no existe”.

Porque como expresa el historiador inglés Paul Johnson: “lo más extraordinario del siglo XX fue el fracaso de hacer que Dios desapareciera”.

Las alternativas a Dios han fracasado, los ídolos contemporáneos también; la única solución es derribarlos y reconocer a Dios creador y a sus mandatos. Es la simple y verdadera opción que le señala San Remigio al rey franco Clodoveo: “Fiero sicambro: quema lo que has adorado y adora lo que has quemado”.

Es verdad que la fe es un don. Si no la tenemos, nos falta algo, debemos buscarla. Si tenemos la gracia de poseerla, debemos rezar para conservarla y acrecentarla.

Dios no tiene sustituto y volvemos a citar a Paul Johnson: “Sin Dios la muerte es horrenda. Con Dios es temible, pero se puede pensar que tiene un significado, un propósito y una esperanza. Solo la fe en Él, ofrece un después”.

Hace años estábamos en las sierras de Córdoba, en el valle de Punilla, en un lugar pintoresco llamado Capilla del Monte, con su calle techada, capital del folklore español, porque toda ciudad cordobesa tiene que ser capital de algo, con Rafael Jijena Sánchez, poeta surgido de los Cursos de Cultura Católica.

Capilla con su cerro Uritorco es un lugar muy especial, refugio de gente bastante rara, que llega en busca de extrañas sensaciones, de visión de ovnis, satélites y otras yerbas, de fenómenos celestes y también paraíso de la superstición.

Jijena visitó a un artesano que hacía pública exhibición de su ateísmo en un cartel. Apenas retornado, le escribió unos versos titulados “Mensaje a un artesano” que dicen así:

“Esto lo sé yo

esto lo sabes tú, artesano

lo que se cierra en tu puño

lo que florece en tus dedos

no es tuyo, hermano,

sino de Dios.

Tuya es la imperfección del jarro,

la impureza del poncho,

la aspereza de la cuja y de la mesa,

la rebeldía del lazo

y la ruda imagen del santo.

Siempre que estés delante

Dios está detrás.

Que tus manos sean

como las flores, artesano,

como la azucena

que floreció en la vara de San José,

por la humildad, por el amor”.

Esta hermosa poesía ¿habrá convencido al artesano? Dios lo quiera.

Buenos Aires, mayo 8 de 2024. Bernardino Montejano

Comentarios
1 comentarios en “ATEÍSMO MILITANTE
  1. El ateísmo no explica el mundo. Ni siquiera los mejores astrofísicos son capaces de explicar el universo y se limitan a elaborar hipótesis que presuponen que existen «dimensiones» y «magnitudes» que el hombre no puede percibir.

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