La verdad detrás de Lutero y el cisma protestante

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La investigadora Elvira Roca desmonta algunos de los mitos creados en torno a la figura de Martín Lutero y señala que el movimiento iniciado por el fraile agustino no trajo progreso, sino más bien todo lo contrario: «Si se estudia detalladamente la historia de todos los territorios en los que triunfó el protestantismo, se descubre que en los siglos siguientes al cisma se encuentran inmersos en continuas guerras que les lastraron en todos los aspectos; tanto en lo económico como en lo social»

«Todo lo que se suele creer del movimiento iniciado por Lutero, eso del libre examen y de la libertad religiosa, tan moderno y tan bonito, es una reducción y una falsificación de lo que realmente supuso la nueva doctrina. No hubo progreso, sino más bien todo lo contrario.»

En conversación con Libertad Digital, la profesora, investigadora y escritora Elvira Roca desmonta algunos de los mitos creados en torno a la figura de Martín Lutero y de la «Reforma» protestante.

«Si se estudia detalladamente la historia de todos los territorios en los que triunfó el protestantismo, se descubre que en los siglos siguientes al cisma se encuentran inmersos en continuas guerras que les lastraron en todos los aspectos; tanto en lo económico como en lo social», señala Roca. «El Sacro Imperio se quedó anclado en la Edad Media hasta el siglo XIX».

La autora del libro Imperiofobia y la leyenda negra explica que si bien es cierto que hubo guerras de religión entre católicos y protestantes, «tuvieron muchísimas más los propios protestantes entre ellos». «Hay que tener en cuenta la cantidad de pequeñas divisiones e interpretaciones religiosas que tuvieron lugar en muy poco tiempo. Si se estudian los datos, llama la atención la cantidad de conflictos entre propios protestantes», asegura.

«No es verdad que allí triunfase la tolerancia. En las zonas protestantes es donde más casos de intolerancia se registran: para empezar, uno no podía ser católico en un lugar protestante; el número de muertes por cuestiones de credo fue mucho mayor en esos sitios que en los católicos», indica, al tiempo que añade que «estaban regidos por aquello del cuius regio eius religio«. «¿Qué tolerancia puede haber en eso?», se pregunta.

Sin embargo, «la gran Historia universal fue redactada en el siglo XIX, no antes, principalmente por franceses y británicos, deudores directos del protestantismo iniciado por Lutero».

Roca también analiza los intereses políticos que contribuyeron a la expansión del luteranismo. «Hay que entender lo que supuso el nombramiento de Carlos V como emperador: un jovencito, Habsburgo, austriaco, que le ha disputado el imperio al propio príncipe Federico de Sajonia, al que muchos consideraban mejor preparado… Las tesis de Lutero dieron a los sublevados la estrategia perfecta», explica.

«A Federico se le sumaron muchos otros príncipes que sabían que lo mejor que podían hacer para restarle poder al nuevo emperador era poner al pueblo en su contra. Carlos era un extranjero, medio español, algo que ya en aquella época estaba mal visto por esos lugares. Lo único que compartían era la religión; así que provocaron una herejía que desembocó en una guerra».

 

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Comentarios
10 comentarios en “La verdad detrás de Lutero y el cisma protestante
  1. Las guerras religiosas la iniciciaron los protestantes, y la Guerra de los 30 años no hubiera durado 30 años si no hubiera sido por la traición de los franceses liderados por Richeleu que primero fianció los ataques del sueco Gustavo Adolfo y luego entró directamete en la guerra a favor de los protestantes. Los franceses han sido siempre traicioneros, hasta en los años 60 del siglo pasado cuando se separaron de la OTAN. Estados Unidos los liberó dos veces de los alemanes y por su soberbia manifestaron lo traicioneros que eran.

  2. Gracias Elvira Roca por desmontar tanto topicazo elevado a dogma de testigo de le fe por la misericorditis aguda que padecemos y okupa de la cátedra de Pedro, que hay que ganar para el catolicismo.

  3. Lutero dirigio una reforma ,que puede gustar o no ,pero no fue el responsable de las gueras de religion ,vamos digo yo ???
    Ahora no es aceptadble historicamente decir que el luteranismo provoco el retroceso economico de los paises donde se implanto
    Solo es necesario ver la situacion de estos paises y de los llamados catolicos
    Por favor

  4. Es un gran Milagro que la Reforma no penetre en España . Pues , si hubiera entrado , hubiera habido una guerra civil tan cruel , que habría desaparecido el pueblo español .

  5. El problema de los libros de Elvira Roca , es que se leen solamente en España y Hispano América . Sirven para excitarse ( darse manija ) sin resolver los males de » Leyenda negra » .

  6. No fue reformador de costumbres, sino de doctrinas.– La tesis de que la decadencia moral de la Iglesia, bajo los Papas renacentistas, había llegado a un extremo intolerable, y que Lutero encabezó a los «protestantes» contra esta situación, exigiendo una «reforma», es falsa y ningún historiador actual es capaz de sostenerla. Entre otras razones, porque el mismo Lutero desecha esa interpretación de su obra en numerosas declaraciones explícitas. «Yo no impugno las malas costumbres, sino las doctrinas impías». Y años después insiste en ello: «Yo no impugné las inmoralidades y los abusos, sino la sustancia y la doctrina del Papado». «Entre nosotros –confesaba abiertamente–, la vida es mala, como entre los papistas; pero no les acusamos de inmoralidad», sino de errores doctrinales. Efectivamente, «bellum est Luthero cum prava doctrina, cum impiis dogmatis» (Melanchton).

  7. Reformador de la doctrina católica.– Lutero, efectivamente, combatió con todas sus fuerzas contra la doctrina de la Iglesia Católica. Para empezar, arrasó con la Biblia, ya que dejándola a merced de el libre examen, cambió la infalible y única Palabra divina por una variedad innumerable y contradictoria de falibles palabras humanas. Se llevó por delante la sucesión apostólica, el sacerdocio ministerial, los Obispos y sacerdotes, la doctrina de Padres y Concilios. Eliminó la Eucaristía, en cuanto sacrificio de la redención. Destruyó la devoción y el culto a la Santísima Virgen y a los santos, los votos y la vida religiosa, la función benéfica de la ley eclesiástica. Dejó en uno y medio los siete sacramentos. Afirmó, partiendo de la corrupción total del hombre por el pecado original, que «la razón es la grandísima puta del diablo, una puta comida por la sarna y la lepra» (etc., así cinco líneas más). Y por la misma causa, y con igual apasionamiento, negó la libertad del hombre.

  8. Pensamiento esquizoide.– Une la Iglesia Católica razón y fe, entendiendo la teología como «ratio fide illustrata» (Vaticano I). Une la Biblia con la Tradición y el Magisterio apostólico (Vaticano II, Dei Verbum 10). Une la gracia con la acción libre de la voluntad humana. Et et.

    El pensamiento de Lutero, por el contrario, es esquizoide: Considerando que “la razón es la grandísima puta del diablo”, concluye: sola fides. Convencido de que la mente y la conciencia del cristiano están por encima de Padres, Papas y Concilios, dictamina: sola Scriptura. Afirmando que el hombre no es libre, y que no son necesarias las buenas obras para la salvación, declara: sola gratia.

  9. Para Ulka, con todo respeto:
    Cabe señalar que las dos regiones alemanas en donde se inició el desarrollo industrial en el siglo XIX son (o eran) católicas: Renania y la zona de Munich. La región más luteranizada (Prusia) sufría de un enorme atraso hasta inicios del siglo XX. Por lo demás, el desarrollo se debe sobre todo a la presencia de otros factores: minerales (carbón, hierro), agua (tanto para la industria como para el transporte), mando obra y capital. Las tesis de Weber son obsoletas.

  10. Sr. Ulka. A lo indicado por el Viejo Profesor hay que añadir que buena parte de las élites intelectuales inglesas tras la Ruptura seguían siendo católicas, o de manera más precisa, criptocatólicas. Y que los países donde se impuso el protestantismo, estaban por debajo del nivel económico de los católicos y sólo cuando el catolicismo empezó a recuperarse en esos países éstos crecieron económicamente.

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