Medios de tirada nacional se han echo eco de la polémica originada a raíz de la celebración de una simulación de una ‘boda gay’ en una ermita privada en Madrid.
Algunos medios han aprovechado para atizar al páter Góngora, el cura almeriense que viralizó las imágenes por redes sociales, tildándole de «homófobo» por simplemente defender la postura de la Iglesia sobre la homosexualidad. «La Tradición ha declarado siempre que “los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados” (Congregación para la Doctrina de la Fe, Decl. Persona humana, 8). Son contrarios a la ley natural. Cierran el acto sexual al don de la vida. No proceden de una verdadera complementariedad afectiva y sexual. No pueden recibir aprobación en ningún caso», dice el punto 2357 del catecismo de la Iglesia católica.
No son pocos los «católicos» liberales que durante estos días se han lanzado en tromba contra todo aquel que defendía ni más ni menos que la posición de la Iglesia. Algunos, sacerdotes han recordado que la Iglesia y los católicos no odiamos al pecador sino al pecado y que no se puede pasar la mano por el hombro en ciertas cuestiones. Lo contrario, sería faltar a la Verdad.
Según publicó El Debate, testigos presenciales del acto explicaron que «no hubo lecturas, ni oraciones, ni nada que imite ningún rito católico» y que lo «más parecido» fue la entrada y salida de la pareja «como ocurre en cualquier rito». «Lo que sucedió ese día fue el acompañamiento de todos los invitados a la pareja a rezar por ellos, por su unión y hubo presencia de simbología religiosa porque ellos son religiosos», añaden.
En este sentido, insisten en que estas dos personas son católicas y «plenamente conocedoras de los mandamientos más básicos y de los sacramentos que forman el catolicismo» y matizan que todos los presentes eran conscientes de que lo que allí ocurría no era «una ‘boda gay’ ni una simulación de una matrimonio católico con la simbología religiosa».
«Esta pareja, siendo consciente de sus circunstancias y habiéndose unido civilmente nos convocó a acompañarlas en oración, pidiendo por ellos y por su futuro como pareja. Simple y llanamente. No fue una boda ni nada que se le asemeje», apostillan.
El papel del padre Damián
Aunque ha pasado algo más desapercibido, también ha generado gran controversia en círculos eclesiales la presencia en aquella celebración del polémico y controvertido sacerdote redentorista, el padre Damián.
Según ha podido saber InfoVaticana, el sacerdote acudió vestido de chaqué al convite y no de cura, aunque le une una estrecha amistad con la pareja.
Tal es así que el día antes de la celebración de este remix entre ‘matrimonio’ civil gay y rato de oración en la ermita, el padre Damián celebró una Adoración para pedir por la pareja.
Uno de los dos compartió en sus redes sociales un momento de esa adoración. En la imagen que ilustra esta noticia, se observa como el padre Damián expone al Santísimo. Justo debajo del altar, está todo lleno de velas encendidas y entremedias aparecen dos letras que corresponden a las iniciales de los nombres de la pareja.
Para más inri, la Adoración no tuvo lugar en San Gerardo Mayela, la parroquia del padre Damián ubicada en el humilde barrio de Aluche. Este rato de oración para pedir (no se sabe muy bien el qué) por la pareja que ha firmado llevar un estilo de vida contrario al Evangelio y al catolicismo, tuvo lugar en la capilla lateral de la céntrica parroquia redentorista del Perpetuo Socorro situada en el barrio de Chamberí.
Como ya saben nuestros lectores habituales, esta parroquia redentorista es conocida porque al menos dos de sus sacerdotes niegan la comunión en la boca, pero al parecer si ponen la parroquia a disposición para adoraciones particulares para ‘avalar’ el pecado.
A todo esto, el padre Damián no ha salido todavía a la palestra a dar explicaciones. En sus redes sociales anunció con motivo del inicio de la Cuaresma que se iba a tomar un tiempo de desconexión. Está por ver si la archidiócesis de Madrid decide tomar cartas en el asunto para evitar que la situación se descontrole aún más.
En el comunicado emitido ayer, el Arzobispado de Madrid confirmó que «no fue informado ni consultado sobre la posibilidad de realizar dicha celebración, siendo un acto unilateral de la finca» y anunció que «tendrá efectos canónicos al respecto». ¿Habrá algún tipo de sanción contra el padre Damián tras años de provocaciones?
Gran revuelo por la celebración de un ‘matrimonio’ civil gay en una ermita de Madrid