La catequesis del obispo Munilla en el día de Todos los Santos

¿Qué se celebra exactamente con esta fiesta? ¿Qué fue antes, la fiesta de Todos los Santos o la fiesta de Halloween o los muertos? ¿Es casualidad su proximidad en el calendario? ¿Por qué celebrar a los Santos?
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Gracias a su labor en Radio María, el obispo Munilla ha ido desarrollando durante estos años una impresionante labor de evangelización desde la radio. En su página web personal, enticonfio.org, Munilla también va colgando todo el contenido difundido por él.

Hoy, con motivo de la festividad de Todos los Santos, rescatamos un escrito de hace unos años del actual obispo de Orihuela-Alicante donde entra a explicar esta festividad tan importante dentro de la Iglesia:

Catequesis de Munilla sobre Todos los Santos:

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Especialmente hoy, día de Todos los Santos, la Iglesia se centra en esa Iglesia Triunfante en el cielo; que es el modelo y nuestra cumbre.
Hay una gran confusión entre la fiesta del 1 de Noviembre de «Todos los Santos», y la del 2 de Noviembre: «Fiesta de los Fieles difuntos».

Con frecuencia se confunden ambas cosas, por distintos motivos; a veces por motivos prácticos, por el hecho de que hoy sea festivo, y mañana –día 2- sea laborable, muchos católicos adelantan al día de todo los santos , el culto o la memoria de los difuntos; que sería más propio hacerlo el día 2.

También esta una confusión, incluso teológica, sobre la fe en el más allá, y se ha silenciado en lo que se refiere a los distintos estados posibles después de esta vida: cielo, purgatorio, infierno; y se ha silenciado sobre todo el estado del purgatorio y del infierno. Esta confusión llega a que – a veces-, confundiendo lo que es un funeral con una canonización. Asegurando en el propio funeral que el difunto está ya en el cielo, lo cual es imprudente, y eso no encaja con lo que es la practica sacramental de la Iglesia en los funerales, donde se encomienda a la misericordia de Dios el alma del difunto; precisamente por lo que pueda tener necesidad de purificación, para que por la misericordia de Dios pueda contemplar su rostro.

De hecho, mañana día de los fieles difuntos, oramos por las almas de los difuntos en la medida que tengan necesidad, de esa oración: en la medida que necesiten de la purificación para poder ir al cielo.
A esta confusión, contribuye el hecho de que no se entiende, o que se ha oscurecido, «la vocación que tenemos todos a la santidad». Esta palabra «santidad» suscita en nosotros ciertas reminiscencias que no son las correctas. A veces suscita una figura de retablo con corona en la cabeza a otros les sugiere ciertas obras milagrosas otros piensan que la santidad es algo ñoñó, «ser un santito es ser un ñoño, un tonto», de quien no tiene los pies en la tierra y que no participa de los retos de esta vida y de los quehaceres diarios.

La ruptura protestante, allá por el siglo XVI, cuestionó la misma existencia de los santos y la veneración que dentro de la Iglesia católica tenemos a los santos. Lutero borro de un plumazo toda la intercesión de los santos. Se basaba en un texto bíblico; le parecía que eso habían sido corruptelas que se habían introducido dentro de nuestra devoción; se basaba en: 1ª Timoteo 2, 5:5 Porque hay un solo Dios, y también un solo mediador entre Dios y los hombres, Cristo Jesús, hombre también, Lutero decía: «si solo hay un solo mediador : Cristo, sobran los demás sean santos , mártires, o incluso la misma Virgen María, sobran como mediadores».

Porque según esto los santos le quitan la centralidad de la mediación a Jesucristo. Pero la concepción católica, también confiesa que Jesucristo es el único mediador, en el sentido que su humanidad está mediando ente Dios y los hombres. Jesús, Dios y hombre verdadero es el «Emmanuel» Dios con nosotros y al mismo tiempo es el que representa al humanidad con Dios. Es el puente que ha unido las dos orillas.
En su naturaleza humana estamos todos incluidos, y también los hombres estamos en Dios.

Nosotros creemos que Cristo es el único mediador, pero Jesús no anula la mediación de los hombres sino que la suscita. Un ejemplo: ¿Quién es el mejor padre?, ¿Aquel que se sacrifica y hace todo por sus hijos, y les da todo hecho?, o ¿El otro que también se sacrifica por sus hijos, peor les «hace hacer», les suscita responsabilidades y colaboración.

Evidentemente que el segundo es mejor padre3… pues ese es Jesucristo. No solo está mediando e intercediendo por nosotros, sino que está suscitando también, nuestra colaboración. De tal forma, que los santos no eclipsan la luz de Cristo, sino que más bien «reflejan la luz de Dios»; y la reflejan en muchos matices. Porque no podemos mirar a la luz directamente, como al sol, no estamos capacitados para percibir esta luz en toda su riqueza; y sin embargo vemos reflejada esa luz de Dios en todas las criaturas que nos rodean, y en todos los santos con caracteres tan distintos: unos muy impetuosos, otros tímidos, otros muy severos, unos más dulces…

Los santos han reflejado esa luz de Dios en diferentes estados: unos casados, otros monjes, en contexto de guerras, en contextos de paz…
Y cuando vemos el ejemplo de Cristo, vivido en circunstancias tan distintas, uno se ve reflejado, y podemos ver la luz de Dios transmitida en situaciones muy a nuestro alcance y muy cercanas a nosotros. Si decimos que la naturaleza es reflejo de la belleza de Dios; hoy en día donde todos somos muy ecologistas. Además es muy «políticamente correcto» afirmar que la naturaleza es reflejo de la bondad… la «madre naturaleza». Nosotros hablamos que la naturaleza refleja la belleza de Dios; pues es infinitamente mayor ese reflejo en los santos.

Y tantos santos que hay que no han sido canonizados, y que en la fiesta de todos los santos los tenemos presentes, están también ante Dios intercediendo por nosotros. Una cosa importante: a los santos les tenemos devoción; solo a Dios ADORAMOS. Hay desviaciones en esto de la devoción a los santos: hay recursos supersticiosos a los santos y tenemos que tener cuidado con esto con eso «si invocas a san Judas te toca la lotería». Y tantas desviaciones que hay que están cerca de las magias y supersticiones…» Todo esto es contrario a la fe.

La triple finalidad de la devoción a los santos

1-El ejemplo. La Iglesia canoniza a algunos santos, no significa que lo esté «llevando al cielo», porque ya estaba en el cielo, antes de ser canonizado. Lo que se hace es que se reconoce que esa persona, cuando estaba viva, vivió las virtudes de forma heroica; y la Iglesia da a conocer la vida de esa persona para que sea objeto de imitación, por parte de los católicos.

Por esto es muy importante conocer la vida de los santos. En nuestra sociedad se ha puesto de moda que conozcamos vidas de personas, a los que llamamos «famosos», y cuyas vidas están puestas como si fuera un escaparate en programas de cotilleo, en revistas… etc. 3 h.c. dic.-16.

Vemos que en la medida que quitamos a los santos como referencia y modelo de imitación, hemos colocado en su lugar a determinados personajes que tiene una vida moral poco envidiable y poco imitable.

No podemos olvidar que las palabras «convencen», pero los ejemplos de vida «arrastran». Por tanto es mucho más eficaz leer la vida de un santo, que escuchar un buen sermón. Porque en la vida de los santos vemos ejemplos de vida en circunstancias diversas y muy cercanas a nosotros, por eso, la Iglesia nos anima a conocer la vida de los santos, y hacer ello una lectura cotidiana.

También recomienda a los medios de comunicación a dar a conocer a través de películas u otras formas la vida de los santos.

2.-La comunión: Dice este punto: Para que la unión de toda la Iglesia en el Espíritu se vea reforzada por la práctica del amor fraterno
Si tenemos, entre nosotros el mandato de Cristo de «amarnos unos a otros»; no solo es «amar a la Iglesia peregrinante, en esta vida»; también tenemos que amar a los santos que están en el cielo, porque también forman parte de la iglesia, también son nuestro prójimo.

Llegará un día en el que, por la Gracia de Dios –así lo esperamos-, estando en la comunión celestial nos amaremos unos a otros, y allí habrá una comunión y será un «añadido más al gozo de contemplar a Dios».

3.-La intercesión: Los santos no solo son un «buen ejemplo», son mucho más que un ejemplo: son una intercesión en Cristo en favor nuestro». Como dice el punto 956: No dejan de interceder por nosotros ante el Padre. Presentan por medio del único mediador entre Dios y los hombres, Cristo Jesús, los méritos que adquirieron en la tierra.

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Comentarios
13 comentarios en “La catequesis del obispo Munilla en el día de Todos los Santos
  1. Las palabras de monseñor Munilla son muy acertadas.
    Muchos sacerdotes, en las exequias, se limitan a intentar consolar falsamente a los allegados del difunto, con una errónea seguridad en una supuesta entrada inmediata del fallecido en el Cielo, con lo que provocan dos males:
    1- Al silenciar la realidad del Purgatorio, no animan a que ofrezcan indulgencias, sufragios ni oraciones por las almas que allí padecen, con lo cual se pierde un enorme caudal de gracia que les sería muy beneficioso.
    2- Al negar la posibilidad de condenación, no exhortan a prevenir tal situación para los vivos que aun estamos a tiempo.

    1. Dios es Amor «Deus caritas est». Yo no me puedo imaginar un inferno lleno de gente. Dios dará oportunidades hasta el último momento y nadie irá al infierno de casualidad, sino que el que vaya , será porque ha querido con pleno conocimiento de lo que decide, por eso creo que antes de morir, el Señor dará luces extraordinarias a las personas con pecados graves no confesados. Por otra parte, Dios tendrá misericordia con los réprobos. No es admisible esas ideas de tormentos que algunos Santos o videntes nos cuentan…será «ese lugar» donde los que no quieran a Dios estén, punto.

      1. «…que algunos Santos o videntes nos cuentan…»

        Lo del rechinar y crujir de dientes no fue un santo quien lo contó, sino el Santo. Y en quince ocasiones habla Nuestro Señor Jesucristo en el evangelio del infierno eterno y los tormentos que en él sufrirán los réprobos (Palabra de Dios).

        1. Bueno…pero nosotros tampoco sabemos el contexto ni la intencionalidad de sus palabras (tenemos el esqueleto de un hecho – la palabra – pero faltan más datos). Sin por mi parte querer poner en cuestión su juicio y condena, también dijo «perdónalos porque no saben….» ¿Quién peca sabiendo y queriendo ir o no importándole nada ir al infierno? Dicho por JHS en la Cruz: la ignorancia es un atenuante.
          Es decir: que no todo está tan claro. Nadie ha vuelto y ha dicho que están lleno el infierno con gente que eternamente sufre por …un alcoholismo, por abusar del onanismo, por…miserias humanas al fin y al cabo. No digo yo los grandes malvados y perversos…pero Dios es Amor. Dios es Misericordia e incluso con los réprobos tendrá algún tipo de misericordia. Hay que repensar el infierno….un tema que por la vía de los hechos, está ya en el desván.

          1. Dios es Amor… y Justicia. No lo olvide. La doctrina católica es clara al respecto. La puede aceptar o no. Son lentejas. Volver al bucle… vaca ser que no.

          2. La Paz sea contigo.

            Dios es Amor pero…también Justicia. De lo contrario atentaría frontalmente contra su Divinidad.
            Jesús, como Dios, no puede HACER NI DECIR NADA INÚTIL. Por tanto, si habló del Infierno y a uno de sus apóstoles lo definió como «hijo de la perdición», es que no hay que bromear ni especular con ello. El hecho -se supone- de que en el último momento antes de morir y del juicio particular, Dios conceda un instante para arrepentirse, NO IMPLICA QUE SE ACEPTE. La soberbia de vida OSCURECE TODO TIPO DE ARREPENTIMIENTO. ¿Cómo se explica si no, la caida de Lucifer y todas sus legiones? Ese pecado de rebelión no apareció de golpe, ya que todo pecado HUNDE SUS RAÍCES EN EL TIEMPO, y los ángeles fueron creados en un determinado tiempo.
            Tengamos cuidado. Más vale prevenir que curar.

            N.B. Las mayúsculas, no son gritos, como dicen en Internet. Es que no tengo forma de destacar en negrita ni subrayar. Gracias.

          3. Claro, claro. Si el réprobo no se arrepiente, Dios será misericordioso. No digas más bergogliadas, por favor.

  2. Nunca he comprendido el problema de los protestantes con la Santísima Virgen María y los Santos. ¿Cuál es ? Un intercesor no es alguien que tenga poder, porque ya decimos en Misa: «Tuyo es el Reino, el Poder y la Gloria, por siempre, Señor». Por lo tanto el Poder siempre es de Dios y nada más que de Él, pero la Santísima Virgen María, Su Madre, y los Santos puede interceder con sus súplicas por la misma razón que nosotros, pobres pecadores, podemos hacer oraciones de petición en la confianza que, si son para mayor Gloria de Dios, se nos concederá. La intercesión de los Santos y de la Virgen tiene más valor que nuestras pobres peticiones porque están ya junto a la Trinidad Santísima.
    Pero, ay de aquellos supersticiosos, que crean manipular a los santos para sus tonterías, porque eso no es culto de dulía ni de hiperdulía, sino superstición pura y dura.

  3. En cuanto a las Almas del Purgatorio, son Iglesia Purgante porque su expiación terminará y del Purgatorio solo hay una salida: el Cielo. No pueden elevarse por si mismos y necesitan ser elevados. Tradicionalmente la advocación mariana más invocada para esto es la de la Virgen del Carmen que, rodeada de ángeles (siempre he pensado que el Ángel de la Guarda del difunto estará también allí con gran gozo) , saca al alma ya purificada para llevarla al lugar destinado para ella en el Paraíso. No debemos pensar que, como mi padre era muy bueno o mi hermano era muy bueno también, se habrán ido derechito a la Gloria (cosa muy actual) y más nos vale rezar por sus almas. La oración nunca se pierde, si están en el Purgatorio les servirá por la Comunión de los Santos y si están en el Cielo otra alma necesitada se beneficiará de ella.

    1. Gracias Maria Jesús por tu explicación. Hoy he terminado la novena por las benditas almas del purgatorio, la he rezado con mi hija, para que aprenda y así el día que Dios me llame, ella la podrá rezar por mi alma. El purgatorio es algo maravilloso que Dios ha creado para la purificación de las almas, en su infinita misericordia. AMÉN.

  4. Muy buena catequesis.

    Diría, que hoy más que nunca, deben, los santos , ser referencia en nuestras vidas. La parte humana de la iglesia, es un corral de «gallinas cacareando». La desfiguracion de la iglesia es tremenda. Recuerda la Pasión de Cristo. El cuerpo de Nuestro Redentor quedó desfigurado.

    Como seres humanos, podemos acostumbrarnos a esto, en esto somos parecidos a los cerdos. Que nadie se ofenda.

    Los santos muestran la fe vivida de acuerdo al Evangelio. Ellos y un buen catecismo, yo utilizo el de San Pío X
    (conciso y preciso),a día de hoy, imprescindibles, para contrarrestar lo que vemos y oímos.
    Una «iglesia extravagante» (Beata A.
    C. Enmerick), que osa desafiar la Palabra y mandatos de Dios. Esta es la realidad humana de la misma

    Gloria a Dios en sus santos.

    Pedro, Pablo, J. M. Vianney, Jacinta y Francisco Marto, José S. del Río,.. santos y santas rogad por nosotros.

    Ven Señor Jesús!

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