Un sacerdote ‘gay’ asegura que el Papa le rehabilitó: «Te doy el poder de las llaves»

sacerdote gay Daniel Pajuelo y James Allison
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Smdani, un sacerdote ‘youtuber’ entrevista a un ex sacerdote ‘gay’ que fue reducido al estado laical. Supuestamente, el Papa le habría rehabilitado a través de una llamada telefónica, algo que publicamos hace dos años.

Daniel Pajuelo Vázquez, más conocido como smdani, es un sacerdote católico de la congregación de los Marianistas. Pajuelo, de 44 años, es profesor además de cura, pero es conocido sobre todo por su actividad en las redes sociales.

Cofundador de iMisión, una asociación católica que busca formar a cristianos comprometidos con la evangelización digital, este sacerdote tiene un canal de YouTube con más de un millón de seguidores. Hay que aclarar que no es la primera vez que aparece en estas páginas.

En su última entrevista, Pajuelo entrevista a un ex sacerdote -o no, ya lo veremos- que se considera homosexual. «James Allison es un sacerdote y teólogo católico nacido en Inglaterra a quien las cosas de la vida le llevaron a vivir en latinoamérica y después en España donde reside actualmente», dice en la presentación el cura marianista.

«Su honestidad consigo mismo, con Dios y con los demás, le ha llevado en muchas ocasiones a ser persona ‘non grata’ en la Iglesia católica y es que, desde bien niño, descubrió que era gay y decidió no ocultarlo nunca a pesar de saber que eso le iba a traer mucho dolor en la vida», asegura.

Pajuelo explica que conoció a este cura a través de la lectura de un libro en el que aparecen diez historias de “amor LGTBI”. La editorial del libro le dio el contacto de James, para que pudiera entrevistarle. “Os aseguro que el encuentro que viví con James fue providencial, lleno de luz, carente de rencores, capaz de abrir puertas, de sanar heridas, y de ayudar a muchas personas a reconciliarse consigo mismas, con Dios, y con sus hermanos y hermanas en la fe. Ojalá ayuden”, señala el sacerdote marianista.

Allison dice en la entrevista que, tras ser miembro de los dominicos durante aproximadamente 15 años, ahora es un sacerdote de status canónico “misterioso”. El protagonista confiesa a Pajuelo que, una vez se salió de la congregación religiosa, hace algunos años, un cardenal “ilustre” intentó reducirle al estado laical “sin tener ninguna razón legítima para hacerlo”.

Allison sostiene que para que tomar esa medida, o tiene que pedirlo el sacerdote, o bien tienes que haber hecho algo malo, “pero malo malo”. En mi caso, el que yo estuviera celebrando misas para grupos LGTB, ciertamente no entra dentro de lo suficientemente malo” como para tomar esa medida.

“Y mucho menos durante el papado de Francisco, donde ha dicho ‘hagan lío’, ‘vayan a las periferias’ y cosas por el estilo”, dice Allison. “Este tipo quiso echarme” y echó mano de “algún párrafo del Derecho Canónico” para mandarle una carta en la que le comunicaron que había dimitido del estado clerical y ya no podía ejercer como sacerdote, ni enseñar ni predicar.

Allison relata cómo le enseñó a su ex maestro de novicios dominico esta carta. Casualmente, este señor era Raúl Vera, obispo emérito de Saltillo, viejo conocido de estas páginas, ya que llamaba la atención por celebrar misas para asociaciones LGTB. Allison cuenta que el prelado le dijo “no hagas caso a eso, es una sandez. No escribas al Santo Padre porque por los filtros no le llegará, pero yo voy a buscar una audiencia privada con él y le voy a pedir que te arregle la situación”.

El obispo emérito de Saltillo consiguió, tiempo después, la audiencia, y le llevó una carta de Allison contando su situación. Vera, al salir del encuentro con Su Santidad, llamó a Allison para decirle que el Papa había estado receptivo y que algo iba a pasar.

Dos meses después, asegura Allison, estaba en su piso cuando sonó un teléfono oculto. “Soy el Papa Francisco”, sonó al otro lado. Entonces, Allison afirma que el Pontífice le dijo: “Mira, yo quiero que camines con plena libertad interior, siguiendo el camino de Jesús y te doy el poder de las llaves, ¿me entiendes? Te doy el poder de las llaves».

¿Está acusando al Papa de saltarse los procesos legales establecidos con una llamada telefónica contraviniendo una decisión de la Santa Sede?

“Evidentemente me trataba como sacerdote, a pesar de que su Congregación” le había reducido al estado laical. Después, “entendí por los canonistas” que “me estaba dando, directamente, el poder de escuchar confesiones y de predicar, que serían los dos poderes típicamente asociados con el poder orgánico o sea mi estado clerical es misterioso”.

En el resto de la entrevista, Allison asegura que los homosexuales en la Iglesia son “muchísimos” y que hay una gran falta de honestidad. Se mete con los líderes eclesiásticos “más radicales en esta materia”, que hablan del “infierno”, de la “abominación”, y menciona al cardenal Müller, ex prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, que llamó “blasfemia” teológica a la bendición de uniones homosexuales por parte de sacerdotes en Alemania.

“Son sandeces”, con la triste verdad que “la inmensa mayoría de los que patalean, chillan más contra los gays son ellos mismos gays”, asegura el entrevistado.

Allison sostiene que al comienzo del pontificado de Francisco estábamos casi como después del pontificado de Pablo VI. “Lo que no nos esperábamos eran los 35 años de marcha atrás de Juan Pablo y, en menor medida, de Ratzinger”, dice.

El sacerdote también se refirió al ‘responsum’ de Doctrina de la Fe que prohibía la bendición de uniones homosexuales por parte de clérigos. A Allison no le sorprendió el documento, «era evidente que si iban a decir alguna cosa iba a ser aquello», sino  «el buen humor con el que una inmensa cantidad de gente les dijo básicamente: ‘Por favor, sé adulto, ya no hables así, es un poco ridículo’. O sea, la reacción no era de miedo, y eso me parece importantísimo porque la gente ha aprendido a ponerse de pie».