Parolin y la Guardia Suiza a la puerta de un abortuorio (próximamente en sus pantallas)

|

Ya estoy viendo la sobrecogedora escena: el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado vaticano, ataviado con sus más solemnes galas cardenalicias, báculo en mano y acompañado por un pelotón de coloridos guardias suizos, a la puerta de una clínica abortista romana, impidiendo el paso a las mujeres que acuden para deshacerse de los hijos que llevan en su vientre.

O, quizá, para evitar confrontaciones físicas, un comando vaticano enviado en la noche para cortar la luz de uno de estos centros donde se deshacen de inocentes como si extirparan tumores.

Hasta esta misma semana, una imagen así resultaría impensable. Aunque el aborto sea a ojos de cualquier católico un crimen atroz que tiene por víctima a un ser humano por completo inocente y aunque se trate del mayor genocidio silencioso de nuestro siglo, con una cifra de víctimas estremecedora, la Iglesia nunca ha dado su apoyo a las protestas que atenten contra la legalidad.

Pero eso era antes. Con lo que podríamos denominar ‘Doctrina Krajewski’, no solo los fieles laicos, sino incluso el clero hasta la misma cúpula jerárquica romana pueden saltarse las leyes humanas en caso de necesidad. ¿Y puede haber un mayor caso de necesidad que impedir la muerte de un ser humano inocente a manos de un supuesto médico?

A estas alturas ya sabrán que el limosnero apostólico, cardenal Krajewski, rompió personalmente el precinto de la compañía eléctrica de un palacio romano ocupado -u okupado, para que se entienda mejor- para restablecer la corriente en el inmueble, en una acción abiertamente ilegal, con el probable consentimiento del Papa. Su Santidad, por otra parte, ha hecho llover elogios sobre las ONG que tratan de burlar las leyes italianas haciendo las veces de servicios de ferry para los inmigrantes que quieren entrar ilegalmente en el continente, y recientemente ha donado medio millón de dólares del Óbolo de San Pedro a quienes ayudan a los centroamericanos que en caravana amenazan con entrar, también ilegalmente, en territorio de Estados Unidos.

Así que, ¿por qué no llevar esta nueva doctrina a sus últimas consecuencias? Por mal que estén los ‘okupas’ romanos, por muy desesperada que sea la situación de los hondureños decididos a asaltar la frontera estadounidense, es imposible que sea peor que la sentencia de muerte que pesa a hora fijada sobre los niños no nacidos en las clínicas abortistas. Disfrutar de luz eléctrica es menos importante que llegar a ver alguna luz, aunque sea la del sol.

Usted y yo sabemos que esto no va a suceder, que en el caso de las protestas contra el aborto la jerarquía eclesiástica va a seguir respetando escrupulosamente las leyes de los Estados, por inicuas que resulten. Y así, como no tiene sentido racional respetar la ley que mata directamente y no hacerlo con un derecho de propiedad que ocasionalmente podría atentar con una discutible, opinable y cuestionable interpretación de una vaga ‘justicia social’, tendremos, como seres racionales, que buscar explicaciones alternativas. Y, sinceramente, lo que deducimos es más bien desolador.

Porque es evidente que la vulneración de la ley que se considera moralmente lícita e incluso obligada es la que puede aplaudir una tendencia ideológica concreta, la que favorece el Santo Padre con vehemencia digna de mejor causa.

Y es que si estas acciones resultan muy coloridas en prensa, muy fácilmente convertibles en apólogos morales para niños, en historias maniqueas de sencilla moraleja, las cosas son bastante más complejas y la realidad deja al limosnero y a quienes le azuzan en una posición bastante menos halagüeña.

Veamos. La ‘okupación’ no es ese fenómeno de familias sin techo que entran por las buenas en cualquier edificio vacío acuciados por la extrema necesidad y por su cuenta y riesgo. Eso lo sabe cualquier policía. En el caso del palacio de Via Santa Croce in Gerusalemme, la ocupación es obra de los ‘activistas’ de Action. Allí viven 450 personas y también funcionan en el local un restaurante, sala de pruebas, carpintería y fábrica de cerveza artesanal. Todo lo cual, naturalmente, compite deslealmente con los negocios que tienen que atenerse a la ley y pagar alquiler. Por lo demás, según informa Il Messagero, todos los residentes tienen que pagar el alquiler a Action. ¿No podría servir ese dinero, si no para pagar al propietario, al menos para abonar las facturas de la luz?

Se nos olvidaba hablar de la discoteca, con entrada por Via Statilia. Cada fin de semana se organizan ‘raves’ -cobrando, naturalmente- que atraen a jóvenes de la zona y persuaden a los vecinos a permanecer encerrados en sus casas. Por supuesto, las medidas de seguridad obligatorias para cualquier local de estas características brillan por su ausencia: si se es ilegal, se es ilegal.

La ‘okupación’, en Italia como en cualquier lugar de Europa, está controlada por mafias que obtienen excelentes ingresos con este negocio y que, con la acción de Krajewski, cuentan además con la bendición del clero.

Ayuda a Infovaticana a seguir informando

Comentarios
16 comentarios en “Parolin y la Guardia Suiza a la puerta de un abortuorio (próximamente en sus pantallas)
  1. No es ‘Doctrina Krajewski’; es Doctrina Francisco. Krajewski es un mero correveidile que ejecuta las órdenes francisquitas, eso sí, con entusiasmo digno de mejores causas. A quien habría que procesar es a Francisco. Krajewski siempre podrá invocar la obediencia debida al dictador.

  2. Dice el dicho que ,» no hay loco que coma lumbre», las «locuras caritativas», tienen un límite, y es cosa de ver hasta dónde se llega y no pasarse en el apretón de la rosca.
    Solo los santos hacen santas locuras.
    ?, Pero están los santos, en peligro de extinción.

    1. En primer lugar, espero que la justicia italiana cumpla su labor y den su merecido. En segundo, me parece excelente el artículo ya ayuda bastante a ver claro puesto que este tipo de acciones están envueltas en ideas nobles pero el sofigma no es fácil de ver para muchos.

  3. Esto es consecuencia de separar la Iglesia del Estado. De separar el orden natural del orden de la gracia. Lo que ocurre es que para los católicos liberales o mejor llamados neocon, esa doctrina ya ha prescrito con Juan Pablo II. la Iglesia no puede (sin traicionar su misión) dejar de afirmar que hay una ley moral natural, que Ella custodia, y a la que los poderes públicos deben someterse” . Pero ese discurso está ya pasado de moda. Es mejor atacar al Estado por sus leyes inicuas, pero sin decir que el Estado sin la ley de Dios no puede nada. Creemos que la sana laicidad es privar al Estado del orden de la gracia y eso es absurdo porque sin Dios nada se puede. Sí , el aborto está muy mal, pero en España no se empezó por el aborto, se empezó por el divorcio y ahora vivimos la ruina espiritual y moral de una nación. Como dice el cardenal Sarah: o Dios o nada, pero no sólo para los individuos sino para las naciones que son también la suma de los individuos.

  4. El señor Esteban ha escrito este artículo como siempre: para atacar al Papa. Solo les recuerdo que los migrantes (es ofensivo llamarlos okupas o ilegales) en primer lugar son seres humanos que arrastran dramas terribles de desigualdad, segundo, no dejan su país y su gente porque quieren sino porque no encuentran otra salida; y tercero, ellos son nuestros hermanos. No olvidemos que el tercer mundo existe porque existe un primer mundo. En el tema de la migración tenemos que entonar un mea culpa ya que el desarrollo y los avances de nuestros países muchas veces se levanta sobre los cadáveres de mucha gente del Tercer mundo.

    1. No, el desarrollo de nuestros países se levanta sobre el esfuerzo y el sudor de todos nosotros.

      Sobre los cadáveres del tercer mundo lo que se levantan son algunas fortunas de corruptos de nuestros países entre los que no cabe excluir algún clérigo.

      1. Tambien hay paises cuyas ventas escuelas enseñan el Coran 100%. Y no se estudia matematica, historia… etc
        Cuantas universidades con excelencia hay en los paises arabes???
        Ademas nosotros no hemos pronunciado la frase: “conquistaremos arabia con el
        Vientre de nuestras mujeres”
        (Seria muy heteropatriarcal?)

  5. San Juan Crisóstomo nos enseña que “Si no logras encontrar a Cristo en el mendigo a las puertas de la iglesia, no Le encontrarás en el cáliz”.

  6. Otro artículo digno de la loca de Carlos Esteban, que gasta una lenguaaaaaaaa…..
    Y claro le corean el resto de histericas chismosas y desocupadas, como siempre….
    Hala, sigan envenenandose de mutuamente…!!!!!

  7. Leí en algún Blog futurista que Parolin será el próximo y último Papa…el que desarme totalmente la estructura moral y doctrinal de la Iglesia mediante un pacto con el nuevo Orden. Entonces, quedará el pequeño número de creyentes sin templos, mártires de la persecución más sangrienta, a la espera del Señor que vuelve.

    1. Jajajajaja, los ultras se creen ahora una especie de resto, anawin no seáis ridículos. Aunque me encanta la idea de Parlin de Papa.

      1. Pero Edgar , cómo te va a gustar la idea, si el Sr, Palorin fue a China y dijo que en ese maravilloso país se respetaban a carta cabal los derechos humanos, y que eran tan felices y encantadores que casi era una Disneylandia, (con una leve exageración), Si llegara a ser Papa, diría que el infierno es un maravilloso centro turístico. Creo que hará buen papel, el que quede por una moneda al aire
        Debe ser más confiable.

  8. Hipocresía progre. Vale, de acuerdo.
    Ahora pregunto: ¿Qué hicieron los anteriores Papas respecto a estos temas?
    Nada que yo sepa, si no apoyar tácitamente.
    Está feo ver la paja en el ojo ajeno y no ver la viga en el propio.
    Y esto que digo no es una defensa a este Papa Francisco, sino una crítica a todos o casi. No vale con ESTAR, hay que SER.

  9. ¿Y la noticia es???
    No hay noticia.
    Es solo propaganda de la resistencia tridentina.
    Personalmente me chirría un cardenal en plan activista.
    Pero sólo mostrando el rostro misericordioso de la Iglesia, que es el de Cristo, a alguien en nuestra sociedad le va a interesar y pueda pararse a considerar nuestra postura a favor de la vida.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 caracteres disponibles