Más reflexiones sobre el infierno

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Me gustaría seguir reflexionando sobre los condenados al infierno. Si Dios no pusiera su mano, el condenado podría sumirse cada vez más en la tristeza y en la rabia. Es decir, ¿qué impediría que su odio pudiera aumentar sin fin durante toda la eternidad? Si esto sucediera, algunos condenados llegarían a abismos sencillamente increíbles de sufrimiento. ¿Qué impide un aumento eterno del dolor?
En un infierno dejado de la mano de Dios, esto podría ser. Pero tal pensamiento resulta intolerable. El peso de sufrimiento que se generaría resulta difícil de soportar para cualquier inteligencia que trate de imaginarlo y ponderarlo.
Parece más razonable que Dios ponga un límite a la tristeza y el odio a través de su intervención. De manera que el sufrimiento del estado sin Dios sea eterno, pero no creciente.

De lo dicho se observa que existen varios infiernos posibles. Éste que hoy he comentado sería abrumador. De entre todos los infiernos posibles, podemos esperar que Dios haya permitido que exista el menos doloroso para sus moradores.
Comentarios
5 comentarios en “Más reflexiones sobre el infierno
  1. Cuando le preguntaron a Cristo si eran muchos los que se salvaban, Él contestó: esforzaos por entrar por la puerta estrecha, porque Muchos son lo que va al camino ancho de la perdición.

  2. «Muchos son los llamados y pocos los escogidos» (Mateo 22, 11-14)
    Con esto creo que está dicho todo ( y tiemblo literalmente pensando en no responder adecuadamente a la llamada que se me hace)

  3. Manu, no. Los santos no pueden interceder por las almas del purgatorio. Pertenecen a la Iglesia Triunfante y ya han colmado sus méritos y sólo pueden interceder según los planes de Dios, por los que estamos en este mundo. Sólo la Iglesia que llamamos militante puede interceder (porque así lo quiere la misericordia de Dios) por las almas del Purgatorio, ofreciendo sus «méritos» para que se apliquen por ellos.

  4. En cuanto a su artículo anterior, dónde opina que poquísima gente se condena:
    Cómo se explica que la opinión de todos los santos y Doctores, desde los primeros siglos de la Iglesia, fue precisamente la contraria (que la mayor parte de los hombres se condenan)?
    San Leonardo de Puerto Mauricio habla de esto (citando a muchos de los santos que compartían esa opinión) en su famoso sermón Del Pequeño Número de los que se Salvan. Se puede escuchar aquí: https://www.youtube.com/watch?v=elCX2vFeC7E

  5. Por favor, a ver si alguien me puede responder a una pregunta. Sin duda los santos interceden por nosotros, y nosotros por las almas del pulgatorio, pero ¿pueden los santos interceder por las almas del purgatorio? ¿habitualmente? Alguién podría darme una explicación o algo de documentación. Gracias

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