Condenan al cardenal Ouellet a pagar una indemnización por despedir a una monja tradicionalista

Ouellet abusos celibato
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El tribunal civil de Lorient dictaminó que el ex número tres del Vaticano había despedido indebidamente a la madre Marie Ferréol, miembro desde hacía treinta y cuatro años, de su comunidad bretona de Pontcallec.

El tribunal civil de Lorient condenó este miércoles 3 de abril a la comunidad de los Dominicos del Espíritu Santo, al cardenal canadiense Marc Ouellet y a dos visitadores apostólicos (investigadores) del Vaticano por el despido de una monja, «sin motivo», según ella tras haber pasado treinta y cuatro años en esta congregación. La asociación sindical de la comunidad de las Dominicas del Espíritu Santo tendrá que pagar 33.622 euros a sor Marie Ferréol.

La sala civil condenó también a esta comunidad religiosa a pagar a la monja 182.400 euros por daños materiales y 10.000 euros por daño moral, en solidaridad con el Marc Ouellet, ex prefecto del Dicasterio de los Obispos y los visitadores apostólicos del Vaticano Jean-Charles Nault y Maylis Desjobert.

«No está demostrado que el decreto de exclaustración, firmado por el cardenal Ouellet […] hubiera recibido aprobación papal», precisa el tribunal en su sentencia, consultada por la AFP. Sor Marie Ferréol, de 57 años, fue expulsada en octubre de 2020 de su comunidad situada en Berné, cerca de Lorient, tras la visita del cardenal canadiense Marc Ouellet. Una “exclaustración” sin motivo, impuesta en mitad de la noche, después de treinta y cuatro años de vida dentro de su comunidad.
Durante el juicio, el 4 de octubre de 2023, la presidenta de la primera sala civil, Armelle Picard, señaló que la carta del cardenal Marc Ouellet entregada a la monja evocaba un “mal espíritu”, caracterizado por “críticas sistemáticas […], partido y espíritu de clan, manifestaciones públicas de resistencia o desacuerdo, ataques a la verdad, charlas destructivas e incluso, a veces, manipulación de las personas.

El magistrado se sorprendió al no poder tener acceso al expediente de acusación del Vaticano. El señor Bertrand Ollivier, abogado de los dos “visitadores apostólicos”, que vinieron a investigar a la comunidad, respondió que “no existe ningún derecho de acceso al expediente en materia canónica”. La monja vivía sin incidentes desde 1987 en esta comunidad cercana a los movimientos católicos tradicionalistas. Pero a partir de 2011, las cosas empeoraron, cuando la hermana Marie Ferréol denunció «graves abusos y hechos», alegó su abogada Adeline Le Gouvello.

La defensa de la monja celebra la condena

Maître le Gouvello, abogado de la Madre Marie Ferréol, ha emitido un comunicado en donde afirma que «no podemos más que saludar la calidad de la motivación del tribunal que procedió a un examen en profundidad de las solicitudes, los medios y los documentos comunicados por las partes».
«Para sor Marie Ferréol, esta decisión supone un gran alivio: la justicia pudo constatar objetivamente que se había cometido una injusticia, un abuso de poder demostrado», afirma su abogada que además señala que «esta sentencia constituye un paso muy importante hacia su rehabilitación. El reconocimiento de las injusticias, irregularidades y faltas cometidas contra ella nos permitirá avanzar hacia la rehabilitación moral y el retorno a la condición de consagración dentro de la Iglesia».
Los condenados, incluida la propia Congregación de las Hermanas Dominicas del Espíritu Santo, anunciaron que apelarían.