El Cuerpo de un cristiano, desde que recibió el Bautismo, es Templo de Dios, y se puede profanar cometiendo pecados de impureza. La sexualidad es un regalo que Dios ha dado, por eso, se tiene que vivir la santa pureza, es decir, la virtud de la castidad. A través de su mandamiento, pide no cometer actos impuros y vivir la sexualidad con dignidad.
El sexto mandamiento de la Ley de Dios prohíbe todos los pecados contrarios a la castidad. También toda acción, mirada o conversación contrarias a la castidad. Los pecados contra la pureza, cometidos con pleno conocimiento y consentimiento pleno, son siempre graves.
Los principales medios para guardar la santa pureza son: la oración, la confesión y la comunión frecuentes, la devoción a la Santísima Virgen, la modestia y la guarda de los sentidos y la huida de las ocasiones de pecar, como conversaciones, miradas, lecturas, amistades y espectáculos deshonestos.
El Papa Francisco ha explicado que esta palabra del Decálogo supone una llamada a la fidelidad, puesto que no existe una relación humana auténtica sin la lealtad y la fidelidad. Como dijo el Santo Padre, «no se puede amar solo cuando conviene».
“El amor se manifiesta cuando se da todo sin reservas. El ser humano necesita ser amado sin condiciones, y cuando no encuentra este amor el corazón busca llenar ese vacío con sucedáneos, componendas y mediocridades, entregándose a relaciones estériles e inmaduras, con la falsa ilusión de encontrar allí un poco de luz y de vida”.
Por otra parte, tras afirmar que la vida conyugal requiere un tiempo de noviazgo para discernir y verificar la cualidad de la relación, analizando este mandamiento el Santo Padre, ha subrayado: “Este mandamiento nos llama pues a dirigir nuestra mirada a Cristo, para que sepamos encontrar en Él la fuente de nuestra fidelidad, de nuestra constancia en las relaciones con los demás y de nuestra comunión mutua».
Jorge Rivera
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Igual que en el imperio romano, la decadencia de una sociedad esta muy ligada a la impureza.
Los datos actuales son espeluznantes: las webs pornográficas son las que mueven mas dinero del mundo -miles de millones-, el crimen del aborto elimina 45 millones de personas cada año, la tasa de divorcios en Occidente alcanza el 50%, aun asi, nunca he oido en ninguna homilía hablar de la virtud de la pureza o castidad. Es mas, en algunos ambientes se habla de que la Iglesia esta obsesionada con este tema, todo para ridiculizar esta virtud.
La Virgen de Fátima dijo que la impureza es el pecado que lleva mas almas al infierno. Pues que sigan asi, ya veran como acaban……
¿Una Iglesia homosexual practicante, que casa a homosexuales practicantes, me va a decir a mí qué es la castidad y qué es el Sexto Mandamiento?
«¿Una Iglesia homosexual practicante…»
Teniendo en cuenta que la Iglesia es el conjunto de todos los fieles, vivos y difuntos, con Cristo a la cabeza, ¿qué significa su absurda frase?
«…que casa a homosexuales practicantes…»
Me temo que está usted desorientado: la Iglesia no casa ni siquiera a heterosexuales: los ministros del sacramento del matrimonio son los propios contrayentes, no el cura. Y, por institución divina, éstos sólo pueden ser un hombre y una mujer (solteros, pues si no sería adulterio). Usted debe de estar confundiéndose con las «bendiciones» truchas, que no tienen que ver con la Iglesia y que, desde luego, no se dan a practicantes (si lo fueran, no serían una «pareja» pecaminosa y no podrían recibirlas). Así que, sí: la Iglesia le va a decir a usted, y a cualquiera, lo que es la castidad y el sexto mandamiento, lo mismo que los otros nueve, pues esa es su principal misión: transmitir la Revelación y salvar almas.
Pues para no tener nada que ver con la Iglesia, las bendiciones se apoyan en un documento que lleva la firma del sucesor de S. Pedro, al que durante dos mil años se ha considerado cabeza de la Iglesia. Hasta que usted ha empezado a cuestionarlo. Va a resultar que la Iglesia no existía hasta que llegó usted y empezó a iluminarnos. Tampoco entiendo que se pongan ustedes de los nervios con estas bendiciones si no son de la Iglesia, ¿por qué les preocupan tanto?. Antes el Papa corregía a los demás, pero desde que no dice lo que los tradis quieren oír, el Papa está para ser corregido por los tradis.
«las bendiciones se apoyan en un documento que lleva la firma del sucesor de S. Pedro, al que durante dos mil años se ha considerado cabeza de la Iglesia.»
Como si se apoyan en la firma del presidente. Ningún Papa puede contradecir lo establecido por Dios para el ser humano en su sexualidad. Así que ya puede venir aquí cualquier jerifalte a decir lo que quiera, que no cuela.
«Antes el Papa corregía a los demás, pero desde QUE NO DICE LO QUE LOS TRADIS QUIEREN OIR, el Papa está para ser corregido por los tradis.»
Resalto en mayúsculas tu nueva cho rra da, porque parece que quieres ganar un campeonato a ver quién suelta la mayor pa rida.
La cosa no va de «lo que los traéis quieran oír», zo que te, sino de lo que Dios ha establecido en la naturaleza afectiva y sexual del ser humano desde el principio de los tiempos, formalizado en los Diez Mandamientos (que tú, ig no ran te, sigues desconociendo, para tu escasa vergüenza), y enseñado por la Iglesia desde que la instituyó Jesucristo.
«sucesor de S. Pedro, al que durante dos mil años se ha considerado cabeza de la Iglesia»
Pero mire que es usted mostrenco: jamás se ha considerado al sucesor de San Pedro cabeza de la Iglesia. La cabeza de la Iglesia es Cristo. Los papas son subalternos suyos.
Como usted no es católico y es bastante ignorante, debía de pensar que cualquier cosa que salía por la boca de un papa era infalible; pero va a ser que no: tal idea no es católica, ni lo ha sido nunca.
«Tampoco entiendo que se pongan ustedes de los nervios con estas bendiciones si no son de la Iglesia»
Por el escándalo. No es de recibo que se engañase así a la gente.
Y a ver si se le mete en la cabeza: los papas, como la Iglesia en general, tiene la misión de conservar lo recibido y transmitirlo. La ideología personal de quien ocupa ese puesto, si es contraria a la Revelación, es totalmente reprobable y vale lo mismo que si la dice usted: nada.
Hombre Angelito tiene razón, no es que todos en la iglesia jerarquía practiquen la homosexualidad o la justifiquen, pero el porcentaje de homosexuales en la iglesia se ha disparado, y hay una mano ancha que ha llevado a la fiducha sodomita, y eso es lo mas grave que ha pasado en la iglesia de Cristo. Para mi lo mas tremendo no es la Fiducha del arco iris que antes o después desembocará en matrimonio, lo más grave es corregir a Cristo cuando dijo aquello de serán una sola carne el hombre y la mujer por el designio de Dios, y lo que Dios ha unido no lo separe el hombre. Si a mi me equiparan a la hora de casarme con el mari conio, está claro que se va a casar por la iglesia Rita la Cantaora. Es un tiro directo del progresismo eclesial cuyo fin es cargarse el matrimonio tradicional. Y esto lo podemos extender al resto de los sacramentos. ESTO ES UN CISMA EN TODA REGLA, VENDAS FUERA.
Es cierto que S Pedro no fue cabeza de la Iglesia como tampoco lo fue Jesucristo ya que fue un invento del siglo IV. muchos mártires del siglo I o II ni siquiera oyeron hablar de la trinidad y muchos serían herejes hoy en día. Lo que el bando ganador de una disputa decidió que era la verdad es a lo que usted llama tradición, pero es fácil ver que si se pudo inventar una Iglesia en el siglo IV, lo mismo se puede hacer el el siglo XXI. No sé como ustedes no entienden que la verdad es la opinión del que logra imponerse, si hubieran ganado los arrianos usted sería arriano y el catolicismo una herejía
«Es cierto que S Pedro no fue cabeza de la Iglesia como tampoco lo fue Jesucristo ya que fue un invento del siglo IV»
Vaya, hacía mucho que no soltaba ese disparate. Por lo visto, no se le pasa a usted la imperiosa necesidad que tiene de demostrar que es un inculto (y de ahí su sectarismo).
«la verdad es la opinión del que logra imponerse»
¡Qué nivel, Maribel! Con razón es usted troll. Pero, ya le he dicho mil veces que sus creencias personales, con independencia de lo absurdas que sean, no le interesan a nadie: el artículo se titula «La virtud de la castidad», algo que un sodomita debería leerse, o acabará en el infierno (el analfabetismo voluntario no exime de la merecida sentencia).