El cardenal Francesco Coccopalmerio, salpicado por el escándalo, ha propuesto el establecimiento de una mesa de diálogo permanente entre la Iglesia y la masonería en el curso de una reunión de prelados con altos representantes de las logias italianas.
Destacados prelados católicos y un cardenal, Francesco Coccopalmerio, participaron a fines de la semana pasada en una conferencia sobre la masonería y la Iglesia católica, organizada por la principal logia masónica de Italia.
‘Iglesia Católica y Masonería’ fue el título de la conferencia presidida por Stefano Bisi, Gran Maestro del Gran Oriente, reunido con miembros notables de la jerarquía católica entre los que figuran el citado Coccopalmerio, de quien recordamos la silenciada orgía en sus apartamentos vaticanos, el arzobispo de Milán, Mario Delpini, y Francesco Stagliano, presidente de la Pontificia Academia de Teología del Vaticano.
El arzobispo Delpini pronunció el discurso de apertura, mientras que Coccopalmerio pronunció las palabras de clausura. La charla del Gran Maestro Bisi se tituló “La masonería entre Ratzinger y Bergoglio”. Por su parte, Giuseppe Ferrari, que dirige el Observatorio sobre el Pluralismo Religioso, reseñó “qué diálogo es posible entre católicos y masones”.
De esta conferencia surgió la idea, sugerida por Coccopalmerio en la clausura, de crear una mesa de diálogo permanente. “Por lo que he podido entender, pero no soy muy experto en este tema, creo que hay una evolución en el entendimiento mutuo”, señaló el cardenal. “Hace cincuenta años había menos conocimiento pero las cosas han avanzado y espero que estos encuentros no se queden aquí. Me pregunto si no podríamos pensar en una mesa permanente, incluso a nivel de autoridad, para discutir mejor las cosas”.