La diócesis de Canarias se ha puesto en contacto con este medio a raíz del artículo publicado esta semana en InfoVaticana ‘Los obispos canarios, la inmigración ilegal y la esclavitud del siglo XXI’.
Según nos reportan, este artículo contiene «una serie de afirmaciones que desvirtúan, el verdadero sentido de las palabras de Mons. José Mazuelos a la cadena COPE» a pesar de que fueron transcritas en su literalidad.
La diócesis de Canarias asegura a InfoVaticana que «de todos es conocida la actitud y manifestaciones públicas de Mons. Mazuelos, en el tema demográfico y apoyo a la natalidad«. Este apoyo, «es el que le lleva a expresar su alegría ante el aumento de población que puede suponer la estancia legal de los inmigrantes, sobre todo los que son practicantes católicos, se implican responsablemente en nuestras parroquias y sus hijos siguen un proceso catequético».
Desde la diócesis canaria consideran «errónea e incluso maliciosa» la interpretación que hacemos de que el obispo “aboga por traer inmigrantes para solucionar el problema demográfico a costa de convertir Canarias en una especie de paraíso del mestizaje» cuando declaró que «necesitamos a los inmigrantes«.
Por otro lado, detallan que el obispo de Canarias «no aboga, ni lo ha hecho nunca, por las malas condiciones laborales a las que, en demasiadas ocasiones, muchos inmigrantes se ven obligados a aceptar». Por ello, remarcan que «Cáritas diocesana ha llevado siempre un seguimiento de esta situación convencido de que la Iglesia debe ser testimonio de justicia en el trabajo y ha apostado por un trabajo decente».
«Pero sí es una realidad constatable que muchas de las personas que llegan a nuestras costas y buscan un trabajo para sobrevivir dignamente, están dispuestos a aceptar las tareas que otros no quieren, porque sin dejar de ser dignas, son necesarias y se exige que se les retribuya correctamente», argumentan desde la diócesis insular.
Por otro lado, puntualizan desde el obispado que «en Canarias no se pretende dar cabida a toda África y solo hay que tirar de hemeroteca para saber que el Obispo de Canarias desde que llegó a esta Diócesis ha manifestado, junto al Obispo de Tenerife, su apoyo a los “corredores de hospitalidad” como medio eficaz que la Iglesia ha dispuesto para que estos hombres, mujeres y niños puedan ser acogidos en otros puntos de la península; y que la situación de los MENA –menores extranjeros no acompañados- cuando salen de los centros de acogida ha sido y es una preocupación constante de toda la Iglesia en Canarias».
La diócesis de Canarias no es partidaria de relacionar delincuencia e inmigración. «Es arriesgado y fácil atribuir a la migración una lacra que tiene sus orígenes en otros condicionamientos sociales, pero es mucho más duro expresar, en este contexto dedicado a las manifestaciones del Obispo de Canarias ante COPE que a los migrantes cuando llegan a España sin recursos “no les queda más remedio que delinquir”.
Aunque desde la diócesis de Canarias no le guste tal realidad, no se trata de una afirmación «sin más». En estos momentos, por ejemplo, Cataluña es una de las regiones con mayor tasa de inmigración y esto es lo que ocurre: «Casi ocho de cada diez detenidos en Barcelona son extranjeros».
Por último -y cambiando de tema- el obispo de Canarias no ha querido valorar la declaración Fiducia supplicans «por motivos de agenda y de tiempo para, tras una lectura reposada, valorar esta Declaración».
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El buenismo de numerosos dirigentes de la Iglesia, abogando por acoger a todos los inmigrantes ilegales que nos llegan de forma masiva, está en la práctica favoreciendo el dolor y la explotación de esos inmigrantes (ahogamientos, pagos abusivos a las mafias, condiciones de vida indignas en los países de destino,…) y está también favoreciendo la degradación de nuestras sociedades (delincuencia, aceptación de lo ilegal, creación de guetos, disolución de nuestros valores,…)
Harían mejor esos buenistas en pedirles a los dirigentes políticos que dejen de abrir las puertas a los ilegales, que persigan a las mafias y que organicen de una vez una inmigración legal, digna y ordenada.
Cuantos inmigrantes ha acogido en su palacio este señor? Entre cero y ninguno. No tengo nada mas que preguntar
Y a este obispo suelo verlo comprando en unos grandes almacenes y no es precisamente de los que tienen cara de buenos amigos y es más de rehuir a la gente, como que va como huyendo, no se ve en su actitud ninguna bonhomía ni amabilidad. Entonces la hipocresía me parece todavía más estomagante. Es un papólatra Bergogliano, en una homilía hizo suyas las palabras de que en la iglesia caben todos, todos, todos… Tampoco deja confirmar a los jóvenes en el rito tradicional, prohibido total, ya se ve el estilo progre decadente que hay en Canarias…
El Paraíso no está en la tierra, muchos inmigrantes salen de sus países porque no les gustan, y vienen a Europa. Pero luego resulta que tampoco les gusta, porque tienen estos o aquellos trabajos. Pero los que han nacido en España y en Europa tampoco tienen los trabajos ni la vida que les gustaría tener. La iglesia hace buenas obras, pero otras veces calienta las cabezas de personas de forma que les incita a venir porque sus países son malos y luego cuando están aquí les enredan la cabeza con protestas y reivindicaciones. Todas las latitudes del mundo tienen sus cosas buenas y sus cosas malas. ¡No existe el Paraíso!.