La Comunidad de Lanceros ha seguido de cerca todo lo referido al lamentable informe del exreligioso corazonista Ángel Gabilondo, ahora Defensor del Pueblo.
Lamentable por varias razones que pasaremos a exponer. Lo más curioso de esta historia ha sido el silencio de los obispos y, en particular, del obispo secretario general y portavoz César Francisco García Magán, que no parece muy dado a trabajar. En el caso del cardenal José Cobo es lógico su silencio después de los elogios que le echó Gabilondo en la presentación del Informe. Elogios que algún día habrá que aclarar, no vaya a ser que piense que Gabilondo ha hecho un gran servicio.
A lo más que han llegado los obispos ha sido a dos tuits en la red X (Twitter) del presidente de la Conferencia Episcopal cardenal Omella. Muy propio de Omella al que parece no le da para más que dos tuits. Dice un miembro de la Comunidad de Lanceros que es lo lógico porque hoy lunes hay convocada una Asamblea Plenaria extraordinaria para afrontar este caso y eso es lo que está esperando García Magán. Otro miembro apunta que, como siga esperando, lo que diga no va a servir de mucho. O quizá tengan miedo los obispos a decir la verdad porque saben que hay que amarrar la enseñanza concertada y la asignación tributaria.
Como ustedes lectores de Infovaticana saben, lo que dijo Omella fue lo siguiente: “Las cifras extrapoladas por algunos medios son mentira y tienen intención de engañar. Ello sin perjuicio de que «la Iglesia es a la vez santa y siempre necesitada de purificación… Todos los miembros de la Iglesia, incluso sus ministros, deben reconocerse pecadores. En todos, la cizaña del pecado todavía se encuentra mezclada con la buena semilla del Evangelio hasta el fin de los tiempos. La Iglesia congrega a pecadores alcanzados ya por la salvación de Cristo, pero aún en vías de santificación» (Catecismo Iglesia Católica 827). No nos cansaremos de pedir perdón a las víctimas y trabajar por su sanación”.
La excepción episcopal ha sido, una vez más, monseñor José Ignacio Munilla que dejó bien claro que “no es de recibo que el Parlamento Español solicitase al Defensor del Pueblo una investigación sobre los abusos sexuales en el seno de la iglesia; y que, finalmente, nos trasladen ahora los resultados de una encuesta encargada a una consultora… ((Para hacer eso -para encargar una encuesta- es obvio que no se necesitaba al Defensor del Pueblo)). Algunos medios de comunicación extrapolan los resultados de esa encuesta al conjunto de la población española, sin rigor alguno. Por ejemplo, el diario El País, falseando lo que el propio Defensor del Pueblo ha dicho, titula: «La investigación del Defensor del Pueblo estima en 440.000 las víctimas de pederastia en la Iglesia española» Pero el único dato objetivo es que el Defensor del Pueblo ha certificado 487 nuevos casos de abusos acontecidos en el espacio de varias décadas, que se añaden a los 1.430 casos anteriormente conocidos. Yo me limito a manifestar dos cosas: 1º.- Nuestra más rotunda condena a cualquier abuso cometido en el seno de la Iglesia, unida al firme compromiso de continuar tomando todas las medidas necesarias para que la Iglesia sea un ámbito seguro. 2º.- ¿Por qué el Parlamento Español no solicitó, ni antes ni ahora, investigar el resto de los casos (que, por cierto, son la inmensa mayoría)? ¡¡No parece que el interés sea proteger a las víctimas!!”
Nuestros amigos de Adelante España han elaborado esta lista de datos del carácter manipulador y tergiversador del Informe del hermano Gabilondo. He aquí lo que han publicado:
“1. Es una encuesta y no está basado, por tanto, en datos. El informe se fundamenta en un sondeo realizado por la empresa GAD-3 en base a una muestra de 8.013 personas.
- El estudio es de una calidad pésima. Y esto no lo dicen agentes que pudieran tener intereses subyacentes. Son las propias víctimas de abusos sexuales que han criticado que el estudio es de una «calidad pésima» en comparación con otros países como Australia o Irlanda, y sobre todo «teniendo en cuenta que España es el último Estado en realizar este tipo de investigación».
- Se refieren únicamente a la iglesia católica, a pesar de ser un problema de la sociedad , que es donde en menor cantidad se producido. Según sus cálculos, un 11,7% de la población española ha sufrido abusos sexuales siendo menor de edad y un 1,13% los habría sufrido en un ámbito religioso. Es decir, para el defensor del pueblo, el 10,57% de la población que ha sufrido abusos sexuales no tiene ninguna importancia.
- Unos datos muy poco creíbles. En primer lugar, el informe asevera que el 0,6% de los españoles habría sido abusado por un sacerdote católico (esto es, 284.500 personas). Si se hace una regla de tres con los abusos totales (página 183), el 11,7% (5,5 millones de personas) habrían sufrido abuso infantil. Esto es, que alrededor del 12% de la población española habría sido abusada siendo menor de edad. Esto significa que 1 de cada 8 menores de edad habría sido abusado. Obviamente es imposible.
- Según el estudio, el 73,7% de las víctimas de Abuso Sexual Infantil (ASI) son mujeres. Sin embargo, llama la atención la inversión de la distribución en el caso de las víctimas en el ámbito religioso: el 65% son hombres, así que en este caso estaríamos hablando de que la mayoría de abusos producidos en el seno de la Iglesia los habrían cometido sacerdotes homosexuales.
- Las víctima de los sacerdotes son, casualmente, son personas mayores de 65 años. La edad media de las víctimas encuestadas es de 48,6 años. Sin embargo, las que dicen haber sido víctimas de sacerdotes son considerablemente mayores: 65,1 años. Esto supone que estaríamos hablando de un problema de hace más de 50 años que en ningún caso se puede trasladar al presente. Además, con estas denuncias, mucho de los sacerdotes no se pueden defender al estar ya fallecidos. Y es que el objetivo parece más quitar la fama a personas e institución que otra cosa.
- Casi nadie (el 78%) denunció los hechos. En la página 181 del informe anida otro extraño dato. Y es que de las personas que se consideran víctimas, el 78,2% no denunció los hechos. De los que sí lo hicieron (20,9%), solo el 32,2% de los casos terminó en condena. Es decir, que en el 93,2% de los casos totales la percepción de víctima no se ha visto refrendada con una condena judicial. Sólo el 6,8% son víctimas reconocidas por la Justicia.
- El ámbito religioso fue el minoritario. Por último, cabe resaltar que, a pesar de lo que se suele pensar, los abusos ocurrieron en el ámbito religioso (4,6% de los casos) o en el educativo religioso (5,9%) con menos frecuencia que en el ámbito familiar (34,1%), la vía pública (17,7%), el ámbito educativo no religioso (9,6%) o en el ámbito laboral (7,5%). Si se aplicase el mismo método que ha seguido Gabilondo para calcular el número de víctimas en la Iglesia (una simple extrapolación a partir de los datos de una encuesta), también habría que asumir que 1.400.000 españoles han padecido abusos en el ámbito familiar, 800.000 en la vía pública y 700.000 en los colegios no religiosos. Sin embargo, de esas cifras no se habló en la comparecencia del Defensor del Pueblo. Pero eso sí, nos fijamos solo en el ámbito religioso”.
Lo escribió nuestro amigo Luis Fernando Pérez Bustamante el sábado : “Si los obispos españoles tienen un mínimo de respeto por la Iglesia que pastorean, deberían presentar una demanda criminal contra el diario El País por la información de ayer y por el editorial de hoy”. La pregunta es sencilla: qué harán los obispos hoy cuando se reúnan en Asamblea Plenaria. No vaya a ser que sea tan extraordinaria para decir lo ordinario o alguna ordinariez. Lo que está en juego es la dignidad de la Iglesia y de los católicos. Veremos si son capaces de denunciar esta burda manipulación.
Diego Lanzas
Ayuda a Infovaticana a seguir informando
A lo mejor, ante una calumnia, habría que presentar la denuncia correspondiente.
Si hay una cosa que defiene a la mayoría de obispos, es que nunca defienden a sus sacerdotes, sino que generalmente, con tal de quedar ellos bien, abandonan a sus clérigos al pie de los caballos del enemigo.
Pues habrá que pensarse empezar a abandonar a los obispos
Efectivamente.
Poco he de esperar de la Conferencia Episcopal, viene acreditando, con muy escasas excepciones, una sumisión vil al socialismo y globalismo reinantes.
La maldita casilla de la Declaración de la Renta y el patrimonio inmobiliario les tiene presos. Y su fe, de nuevo con contadas excepciones, se nota débil y tibia a mucha distancia.
No se puede defender lo que se ha dejado ir.
Va a ser al revés.
Me temo que esto va a ser aprovechado por los Bergoglianos para empujar su agenda homosexualista y feminista dentro de la Iglesia.
Es incluso probable que el estudio ha sido encargado en consuno entre la logia eclesiastica y la politica.
Va a ser al revés. Me temo que esto va a ser aprovechado por los Berg0glianos para empujar su agenda hom0sexualista y fem1nista dentro de la Iglesia. Es incluso probable que el estudio ha sido encargado en consuno entre la logi@ eclesiastica y la politica.
Sí, estoy de acuerdo con su opinión. Bergoglio es el que encabeza siempre la crítica a los curas (evidentemente, sobre todo a los que tienen fe y aman a Cristo y la Tradición) y el tema este de la pederastia también lo ha utilizado para degradar a la Iglesia (aunque luego él protege a algún amiguete/s gentuza de esa pederástica, como siempre, la hipocresía por bandera).
Respuesta corta a la pregunta de la noticia:
NO.
Que va a pasar con los seminarios españoles despues de la visita apostolica? O de eso mejor no hablamos?
Insisto, que mejor momento para que los obispos españoles que merezcan semejante nombre y en especial los cardenales que se supone está dispuestos a derramar su sangre por Cristo, para que todos al unísono le canten las cuarenta al Argentino pontífice y le cuenten las verdades del barquero en esta insólita visita a Roma. Que hablen de la verdad de los seminarios, de que solo aquellos de buena doctrina funcionan y que los de chichinabo pues eso, hichinabo. Pero, ¿creen ustedes que alguno de estos prelados tendrá el VALOR de decir la verdad? Nooooo, se plegarán como plañideras y luego aqui contarán lo que quieran. Porque uno puede decir que está dispuesto a derramar la sangre…desde la comodidad de su pisazo en el el centro asistido como un capitán general.