La Archidiócesis Católica de Múnich y Freising ha celebrado un “réquiem ecuménico” por un glaciar junto con miembros de la Iglesia Evangélica.
El evento se llevó a cabo el 25 de julio en Zugspitze, la montaña más alta de Alemania, para despedir el glaciar Schneeferner y para “llamar la atención sobre las consecuencias del rápido avance del cambio climático y la importancia de preservar la creación”, según un comunicado de prensa de la archidiócesis.
El servicio fue dirigido por una pastora protestante y un “asistente pastoral” católico laico. Según los informes de los medios, ningún clérigo católico estuvo presente en el evento.
“Alrededor de 50 personas siguieron la ceremonia en la capilla de la Visitación de la Virgen María a una altitud de 2.600 metros en Zugspitzplatt”, escribió la Arquidiócesis de Munich y Freising en una publicación de Facebook. “La cruz, decorada con una calavera y tibias cruzadas, condujo a los dolientes a través del viento y la niebla en dirección al ‘lecho de muerte’”.
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Como decía Chesterton, cuando el hombre no esta a Dios esta a cualquier gilipollez.
Podía haber ido Francisco
El Santo Padre Francisco no participa en semejantes patochadas.
Lo que pasa que está ocupado con la JMJ de Lisboa. Si no, ya hubiera ido.
Decadencia máxima.
El modelo de diálogo interreligioso está bien plasmado en el episodio de Elías y los sacerdotes de Baal. Respecto a la estupidez de considerar a la Naturaleza un ente pensante y con alma, solo indica la idolatría a la diosa Gea, a la que se considera que se debe servir y que, si es preciso, exterminar a la especie humana que es la que lo contamina todo. Cuando se deja de hablar de Dios y se sustituye a Éste por la ecología, es normal observar estos episodios de vergüenza ajena.
Falta algo más que hacer, me pregunto . Decadencia total, como alguien dijo.
El glaciar contestó :hasta el año que viene.!!. Cuidad de la huella de carbono!!
Por favor, no es que hayan perdido la fe, si alguna vez la tuvieron, unos y otros, es que han perdido la cabeza.
Por cierto bonito glaciar, cuanta bondad y belleza de Dios Todopoderoso.
Tropa de payasas ecuménicas divinas de la muerte.
Aprovechando el réquiem, se podían haber ido ellos con el glaciar.
Era un buen glaciar, más allá de los defectos que todos tenemos de un modo o de otro, tampoco hay que ser perfeccionista. Alguna superficie de roca pelada por aquí y por allá, pero el que esté libre pecado…Lo importante es el ejemplo que nos ha dejado, de calidez…ah, no, es verdad.