Corre por las redes el chascarrillo de que el sarao que se celebró en la Plaza de San Pedro sobre la fraternidad humana, con espectáculo y mucha gente importante, debería cambiar su lema de #NoSolo (#NotAlone) por el de #BastanteSolos, habida cuenta de la escasísima asistencia de público.
Mientras, en una España donde la adscripción a la Iglesia, más que descender, se despeña, la procesión del Corpus de Toledo se celebró con la acostumbrada acogida popular multitudinaria. ¿Qué misterio es este?
Después de todo, la fraternidad humana es algo en lo que coinciden católicos y no católicos, algo que está en la base de la omnipresente Agenda 2030 de la ONU, en la misma razón de ser de la ONU, en realidad. Otro tanto puede decirse de la preocupación ecológica y la lucha contra el Cambio Climático, de la que se nos habla como pedía San Pablo que predicáramos el Evangelio, a tiempo y a destiempo. Entonces, ¿por qué tiene tan poco éxito las iniciativas eclesiales que se centran en estos asuntos, tan caros a los nuevos tiempos?
Para responder, permítanme que razone al margen de la fe, como podría hacerlo un no creyente. Después de todo, los designios de la Providencia son insondables, y de las razones profundas de esta crisis pueden disertar mucho mejor que yo cualquier teólogo ortodoxo. Partiré, por tanto, desde el mero sentido común, la experiencia y una pizca de psicología de ventas.
Vista desde fuera, desde la increencia respetuosa, la Iglesia es una institución que vende un producto, siempre el mismo desde hace dos mil años: la Salvación por la Encarnación, Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo. El mundo (entendido en un sentido teológico) vende otros productos, estos sí cambiantes de una época a otra. Ahora toca el Medio Ambiente, la Tierra como semidiosa, como ser sintiente, en cuyo interés debemos sacrificarnos; toca la promoción de sexualidades alternativas a la única que se ha considerado normativa durante milenios y la única, también, que garantiza la supervivencia de la especie; la inclusión, la diversidad, la equidad y otras cuestiones menores.
Ahora, es cierto que todo este paquete tiene un éxito en Occidente incomparablemente mayor que el que ofrece la Iglesia, al menos como instrumento de poder y materia de prédica de medios de comunicación y sistemas educativos. Greta tiene más tirón entre los jóvenes que cualquier cura, obispo o el mismo Papa. Es comprensible que, para acercarse a las ovejas perdidas (que forman un rebaño incomparablemente mayor que el ‘pusillus grex’ eclesial, a nuestros pastores les tiente hablarles sobre todas esas cosas que les preocupan. Comprensible, pero indeciblemente estúpido.
Y si me nombraran jefe de Marketing de la Iglesia Católica (discúlpeseme la irreverencia), les explicaría por qué es lo peor que podrían hacer. Porque como agente contra el cambio climático y defensor de la aceptación y acogida a homosexuales, transexuales y demás colectivos de ese pelaje, la Iglesia sería solo una copia desleída, y la gente, por lo general, prefiere el original a las imitaciones.
Especialmente cuando va a ser una copia tardía, repetitiva, vacilante (no puede ir tan lejos como va el mundo sin autodestruirse) y cutre. Estas ansias de relevancia imitativa no captan nuevos (perdón de nuevo) “clientes”, porque el público tiene sobrados proveedores del producto original, más capaces y atrevidos. En cambio, al descuidar el mensaje central, transmite la impresión de que no confía en él, no lo ve ya como suficientemente atractivo y verdadero. Es decir, es una estrategia con la que no se ganan nuevos adptos y se corre el riesgo de perder lo que ya se tenían.
Supongamos que mi interés es la ecología. ¿Qué es más probable, que busque satisfacer mi interés en Greenpeace o en la parroquia? ¿Quién me dará más confianza, activistas de larga data y profesores con profundos conocimientos, o unos tipos con sombreros extraños que acaban de llegar a este campo, como quien dice?
Por el contrario, si lo que busco es algo que no solo dé sentido a mi vida, sino también a mi muerte, al universo entero; si tengo hambre de lo transcendente y lo sagrado, no me va a ser fácil encontrarlo hoy en la Iglesia. Desconfiaré de la importancia del mensaje central de salvación, vista la escasa insistencia con que se predica hoy por el clero, sobre todo por el alto clero. Por poner un ejemplo que he citado otras veces: es difícil mantener la centralidad de la Eucaristía en la vida cristiana cuando todos hemos visto con qué docilidad y celeridad se precipitó la jerarquía a aceptar la interrupción de las Misas públicas en periodo de pandemia, aceptando sin protesta que lo suyo no era un “servicio necesario”.
Yuval Noah Harari, el filósofo de cabecera de Klaus Schwab, director del Foro de Davos, ha propuesto que una Inteligencia Artificial “reescriba” las escrituras religiosas para crear una «nueva Biblia» global con el objetivo de ser la base de una religión única universal “correcta”, tecnológicamente infalible.
Pero la Iglesia es portadora de un mensaje que procede, no de alguien que ha dicho verdades, sino de Alguien que es la Verdad, de quien nos ha creado junto a todo lo que existe. Es eso, o la Iglesia no es nada. Y por eso las peregrinaciones como la de Chartres o de la Cristiandad estarán cada año más pobladas, llenas sobre todo de jóvenes, y los saraos ‘Fratelli Tutti’ y ‘Laudato Sì’ serán cada vez menos populares.
Ayuda a Infovaticana a seguir informando
Francisco, con la exaltación de su ideología afín al NOM, está alejando a muchos.
Ahora que está enfermo sería un buen momento para que renuncie, a ver si salimos del pozo en el que nos ha metido el argentino.
Muy buen análisis. O la Iglesia es fiel a sí misma, tal como la quiso Cristo, llena de santos; o no es más que una ONG, el sueño de los francisquistas, vacía de gente y vacía de alma.
No nos caerá esa breva. Vamos a tener argentino «pa» rato. Bergoglio es el «tonto», muy tonto útil de los del NOM… «qué largo se me hace este pontificado» decía alguien
Sacerdote Católico. No creo que se arrepienta ni que se vaya, porque cuanto más enfermo se halla, peor se pone.
El número 6 es número de hombre. Y tal vez eso de la fraternidad humana se halla celebrado en junio, porque junio es el sexto mes.
Para esa gente no hay nada espontáneo.
Estoy de acuerdo con este artículo en cada una de sus palabras.
Y yo
La iglesia debe ser imitación a Cristo, no imitación al mundo. Al imitar al mundo está aliándose con el principal enemigo de Cristo, mundo que ya fue vencido por Él. Lo que queda es un sucedáneo diabólico para probarnos. La iglesia traidora a Cristo se adherió al mundo cuando el concilio de marras, decidió que Cristo ya no era la Verdad, pues la salvación ya no pasaba por el. Pasaba a partir de entonces por cualquier ocurrencia pseudorreligiosa, creándose una salvación forzosa para todos en un coladero inmundo, incluidos los enemigos de Cristo. Se olvidaron de la incompatibilidad entre la luz y las tinieblas. La patochada ocurrida en San Pedro es una blasfemia contra la Eucaristía, una fantochada masónica de los sin Dios, que el Vaticano renegado ampara. No es suficiente comprobar su fracaso, los cristianos en masa debieron acudir a echarlos a patadas de allí. Y reponer a Cristo.
El mensaje central de la Iglesia es que Dios quiere el sufrimiento para hacernos perfectos. Baste como primer ejemplo la Salvación por la Encarnación, Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo. Pero Dios quiere y permite que nosotros luchemos contra el sufrimiento y nos perfeccionemos espiritualmente. Evitando intentar eludir sufrimientos con medios que los profundizan. No tiene nada de malo la preocupación por el medio ambiente y la preocupación ecológica que incluye a otras especies . Buscar poner fin a las guerras es bueno. Nada de esto significa que la Iglesia acoja la ideología de género. Ya el Papa encauzará a los díscolos que pretenden estas estupideces. Por otra parte, inevitablemente, los gentiles pretenderán cosas como que la inteligencia artificial reescriba las escrituras.
«El mensaje central de la Iglesia es que Dios quiere el sufrimiento para hacernos perfectos»
¿¿Einn?? ¿Quién le ha dicho a usted semejante disparate? ¿O es de su propia cosecha?
«Baste como primer ejemplo la Salvación por la Encarnación, Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo»
A ver si lo he entendido: como «Dios quiere el sufrimiento para hacernos perfectos», ¿los sufrimientos que Él padeció fueron para hacerle perfecto, porque sin ellos no lo habría sido? Creía que la Iglesia había enseñado durante dos milenios que el motivo por el que el Verbo se encarnó fue para que Cristo pudiera ofrecerse a Sí mismo a Dios Padre en Holocausto, único Sacrificio, el de la Cruz, que podía reconciliar a los hombres con Dios.
«No tiene nada de malo la preocupación por el medio ambiente y la preocupación ecológica que incluye a otras especies»
Cuando la ecolatría sustituye a la verdadera fe, merece toda la preocupación del mundo.
«Ya el Papa encauzará a los díscolos que pretenden estas estupideces»
¡Qué bromista! Sí, sí: como «encauza» a los sinodales gays alemanes y belgas, o a James Martín, o a Biden «El Católico», o a los obispos argentinos y malteses, o a los heterodoxos cardenales McElroy y Hollerich, o al arzobispo Paglia, etc. Vamos, que lo hará cuando las ranas críen pelo.
Pues, creo que todos deberían ver la entrevista que hace Quintana Paz a un nunca sospechoso Diego Fusaro
theobjective.com/videos/cultura/2023-05-11/diego-fusaro-papa-francisco/
No será sospechoso para usted. Para mí, un hegeliano como Fusaro (según él mismo confiesa), que no para de citar al comunista Pier Paolo Pasolini, y que dice que la mayor tragedia del siglo XX fue la caída del comunismo, o que la filosofía es y debe estar por encima de la religión, y encima entrevistado por un agnóstico como Quintana Paz, me parece algo más que «sospechoso», por más que critique a Francisco. Y sobre sus teorías conspiranoicas, mejor no entrar.
Es muy simple. Para que me ofrezcan lo mismo que el mundo, pues me voy con el mundo… Y lleva siendo así desde los 60. El problema es que no aprendemos. Seguimos con conciertos de pop cristiano, sentimentalismo y tonterías semejantes… Vamos, lo que hace el mundo. No, señores, así vamos muy mal. Hay que salir del marco capitalista neoliberal en el que la Iglesia es una opción más y ser LA OPCION contra el mundo
Este artículo es muy bueno y debería hacernos reflexionar
Lu.
Hola yo no sabía que existía todos estos movimientos oscuros modernistas progresistas que están destruyendo a la Iglesia dentro de la iglesia a través de cardenales, obispos, sacerdotes teólogos religiosos laicos que están en esa línea de lobos dentro de la Iglesia para quererla destruir estaba hace tres semanas estudiando un curso para hacer catequista y en el curso de Biblia nos dieron toda la teología modernista Y que ahora ya nada es pecado que Jesús era 100% hombre que no hizo ningún milagro en fin una cantidad de herejías alzamos la voz y la quisieron callar el Señor quiso que yo levantara la voz pero lamentablemente con todo descaro asumen de que las altas jerarquías avalan esta doctrina anticristiana porque eso es toda doctrina herética es anticristiana y ahora presumen de que la alta jerarquía de la Iglesia avalan estos movimientos esto nos hace despertar a lo abominable que está sucediendo dentro de la Iglesia tenemos que orar mucho rezar el Santo Rosario y Eucaristía .
Este post me hace pensar en la Iglesia como camino para la gloriosa vida eterna. Sobre el atractivo que significaría ofrecerlo y concluyo que es prácticamente inexistente para la actual sociedad. Hasta hace algunos decenios casi en todos los medios de comunicación, la información que se difundía, revistas, diarios, televisión, etc, aunque no se mencionara a Dios, se daba por cierta su existencia. Hoy lo que predomina es una absoluta ausencia de mención y caso contrario se niega su posibilidad. Así que entre quienes no están evangelizados lo que predomina es el ateísmo y cuando supuestamente no, basta hacer una pregunta acerca de Dios o sobre como se lo percibe y las respuestas son de total confusión e ignorancia. Cómo se les puede hablar entonces sobre el hombre hijo de Dios, que en el suplicio de la Cruz alcanzó la perfección para salvarnos? Cómo ofrecerles el atractivo de un camino con obligaciones, abstinencias, esfuerzos, solidaridad, altruismo, abnegación y sobre todo amor a Dios.
(Comentario que se perdió). El mensaje central de la Iglesia, como camino a la gloria eterna, ya no resulta atractivo. Hasta hace algunos decenios en casi todos los medios de comunicación, información general, revistas, diarios, televisión, etc. aunque no se mencionara a Dios se daba por cierta Su existencia. Hoy es todo lo contrario. Lo que predomina es el ateísmo y cuando supuestamente no, basta hacer una pregunta acerca de Dios o como se lo percibe y las respuestas son pura confusión e ignorancia. Es necesario que la Iglesia, mientras se mantiene públicamente vigente, haga recuperar, para empezar, la «idea» sobre Dios y su existencia. Así se podrá hablar entonces sobre el hombre Hijo de Dios, que en el suplicio de la Cruz alcanzó la perfección para salvarnos. Se podrá ofrecer el único camino hacia la gloria eterna.
«el hombre Hijo de Dios, que en el suplicio de la Cruz alcanzó la perfección para salvarnos»
¿Es necesario que cada día nos ponga una herejía? Si se perdió el comentario, mejor haberlo dejado perdido.
Vamos a ver: la culpa de que la Ifpglesia en sus ordenados haya retrocedido hasta el escándalo y la desesperación es de los propios ordenados que en vez de predicar a Jesús y este crucificado; lo han substituido por las cosas del mundo y por tanto, en ellos está entonar el mea culpa que no harán por soberbia.
Dice que «Jesús que en el suplicio de la cruz alcanzó la perfección para salvarnos»
El Hijo de Dios, como Segunda Persona de la Santísima Trinidad, Verbo encarnado de Dios y Palabra eterna del Padre y Dios al mismo tiempo; no alcanzó la perfección para salvarnos, ya que El es la perfección.
En el sublime acto de su presencia en el mundo y en su mensaje, estaba la muerte a sufrir por el género humano y salvarle del pecado de origen. Esa es la liberación del ser creado por Dios, y lo canta muy bien al Salmo 23, cuando dice: «Portones, alzad las puertas eternas que va a entrar el Rey de la Gloria».
Víctor. Tendrá que revisar sus fuentes para las críticas que suele hacer y algunas de sus convicciones supuestamente católicas. Jesús fue perfecto en el sentido que obedeció toda la ley del Padre, en el suplicio de la cruz inclusive, como nuestro Salvador. Y alcanzó la perfección poseída por su Padre resucitando con gloriosa inmortalidad. Como hay distintas versiones, todas con el mismo significado, usted mismo lea Hebreos 2:10.
Concilio de Calcedonia:
“Siguiendo, pues, a los Santos Padres, todos a una voz enseñamos que ha de confesarse a uno solo y el mismo Hijo, nuestro Señor Jesucristo, Él mismo PERFECTO en la divinidad y Él mismo PERFECTO en la humanidad, Dios verdaderamente, y Él mismo verdaderamente hombre de alma racional y de cuerpo, consustancial con el Padre en cuanto a la divinidad, y Él mismo consustancial con nosotros en cuanto a la humanidad, semejante en todo a nosotros, menos en el pecado (Hebr. 4,15); engendrado del Padre antes de los siglos en cuanto a la divinidad, y Él mismo, en los últimos días, por nosotros y por nuestra salvación, engendrado de María Virgen, Madre de Dios, en cuanto a la humanidad; que se ha de reconocer a uno solo y el mismo Cristo Hijo Señor unigénito en dos naturalezas, sin confusión, sin cambio, sin división, sin separación, en modo alguno borrada la diferencia de naturalezas por causa de la unión, sino…
…conservando, más bien, cada naturaleza su propiedad y concurriendo en una sola persona y en una sola hipóstasis, no partido o dividido en dos personas, sino uno sólo y el mismo Hijo unigénito, Dios Verbo Señor Jesucristo, como de antiguo acerca de Él nos enseñaron los profetas, y el mismo Jesucristo, y nos lo ha trasmitido el Símbolo de los Padres».
Y, tras definir (ex cathedra) esta fórmula, el Santo y Ecuménico Concilio de Calcedonia estipuló que «a nadie será lícito profesar otra fe, ni siquiera escribirla o componerla, ni sentirla, ni enseñarla a los demás”.
«Tendrá que revisar sus fuentes para las críticas que suele hacer y algunas de sus convicciones supuestamente católicas»
Qué alucinante: un hereje corrigiendo a un católico. Y encima no se conforma con soltar una herejía, sino que la vuelve a repetir, añadiendo más disparates al enunciado original. ¡Y se queda tan pancho! Así se entienden sus desvaríos en temas morales…
en otras noticias, pues la moral deriva de la doctrina, de la que usted está totalmente falto. Es normal que un hereje no lo sea por negar un sólo punto de ésta, sino que, con frecuencia, incurre en varias herejías y sus creencias deformadas le acaban llevando a posiciones moralmente insostenibles.
En cuanto a Hebr 2,10, en vez de interpretarlo a la protestante, debería leer las notas de una Biblia católica, en las que le explican que los padecimientos le hicieron «plenamente apto» (no «perfecto» en el sentido que usted da a esa palabra, pues éso ya lo era), para realizar su obra: ser autor de la salud de esos «muchos hijos» que el Padre se proponía llevar a la gloria.
No Catholicvs. Nuestro Señor Jesucristo es Dios verdadero y hombre verdadero. En cuanto al cumplimento de la ley de Dios y en estar libre de pecado, ya era perfecto, pero N. S. Jesucristo, como hombre de carne y hueso, alcancanzó la perfección para nuestra salvación muriendo en la Cruz.
¿Cómo que «No Catholicvs. Nuestro Señor Jesucristo es Dios verdadero y hombre verdadero», si eso se lo he dicho yo y hasta le he puesto la definición del Concilio de Calcedonia? ¿Está usted abonado al «no» y lo dice incluso cuando tiene que decir que sí?
«alcancanzó la perfección para nuestra salvación muriendo en la Cruz»
No, no lo hizo: eso es una ocurrencia suya, que sostiene cosas muy raras tanto en lo doctrinal como en lo moral y que nada tiene que ver con la fe católica.
«Alcanzó». «Plenamente apto» está bien, aunque pienso que no define suficientemente la perfección para vencer a la muerte y resucitar en gloriosa inmortalidad, con la misma perfección eterna poseída por su Padre. Por esto Su pronunciamiento en Galilea a sus discípulos, cuando Jesús les dijo que toda potestad le había sido dada en el cielo y en la tierra.
Cristo, el Verbo encarnado, resucitó por su propio poder. Esa historieta de tebeo que está contando sobre que adquirió (sobre la marcha, debe de ser) una «perfección» para así resucitar, sin la cual no lo podría haber hecho, es una herejía. Lo cual confirma lo que ya le he dicho varias veces: usted no profesa la fe católica, y lo mismo que hacen Testigos de Jehová, mormones y protestantes, emplea las Sagradas Escrituras para sustentar sus herejías. Es lo que pasa cuando uno no reconoce que es la Iglesia la única autorizada para interpretarlas. A partir de ahí, y como la imaginación es gratis, se acaban sosteniendo auténticos disparates, como los de usted.
Como siempre, usted entresaca y reinterpreta lo que para la Iglesia ha estado claro siempre, y así lo ha enseñado. Cristo no es un hombre al que Dios le haya dado poder: Cristo es Dios. Como usted no entiende ni las relaciones intra trinitarias y que el Padre le «dé» algo al Hijo, así…
…como tampoco la unión hipostática, es lógico que, tanto en Mt 28 como en otros pasajes, tampoco entienda que, si bien el entrar en el ejercicio pleno de sus poderes lo reserva para después de la Resurrección (Jn 17,1-5; Flp 2,6-11; Hch 2:36; Hch 10,42; Rom 1,4), la plenitud ontológica la tiene desde la Encarnación. Cristo, Dios encarnado, tiene toda la potestad sobre todo lo creado (como dice el versículo 18) y terminará ejerciéndola en el Juicio Final (Mt 25).
No se trata de una competencia Catholicvs. No siga copiando y pegando «sin ton ni son». Jesús alcanzó la perfección para salvarnos al morir en la Cruz. Venció a la muerte resucitando. Es lo que sostiene la Iglesia Católica. El Hijo habita con su cuerpo glorioso junto al Padre. Cómo tiene su cuerpo humano y el Padre es incorpóreo es simbólico que se diga «a la derecha de Dios Padre».
Más le valdría a usted copiar y pegar con «ton y son», lo que le obligaría a leer primero lo que copia, en lugar de, directamente, inventar: no, Nuestro Señor Jesucristo (su primo Chechu no tengo ni idea, pues no le conozco), no alcanzó ninguna «perfección para salvarnos al morir en la Cruz». Un disparate repetido muchas veces no muta para convertirse en algo cierto: sigue siendo el mismo disparate que al principio. Así que, puede repetirlo muchas veces, que se va a encontrar otras tantas negativas (y se va a cansar usted antes que yo, no lo dude). Y lo de mezclar verdades con falsedades puede ir olvidándolo: no le funciona el truco. Yo sí sé lo que sostiene y lo que no sostiene la Iglesia (soy católico).
«El Hijo habita con su cuerpo glorioso junto al Padre. Cómo tiene su cuerpo humano y el Padre es incorpóreo es simbólico que se diga ‘a la derecha de Dios Padre'»
¿No me diga? Igual creía que yo pensaba que Cristo no tiene cuerpo, o que Dios Padre sí lo tiene… Pero, ¿de dónde ha salido usted? No será un «teólogo» aburrido de Herejía Digital, ¿no? Decir que Cristo está «sentado a la derecha del Padre» no indica «posición» (Dios Padre no ocupa lugar y no tiene derecha). Es una locución en lenguaje figurado para afirmar Su divinidad y que Cristo es igual al Padre (Jn 10,30). Sólo el Hijo tiene derecho a «sentarse» a la derecha del Padre (es un honor sentarse a la derecha del anfitrión en un banquete). Además, tal expresión remite al Salmo de David: «Oráculo de Yahvé a mi Señor: ‘Siéntate a mi diestra en tanto que pongo a tus enemigos por escabel de tus pies'» (Sl 110,1). El significado de «derecha del Padre» San Juan Damasceno lo…
…explicaba como «la gloria y el honor de la divinidad». Y, así, Cristo conreina y posee la misma potestad judiciaria que Dios Padre.
¿Por qué no se entretiene usted leyendo alguna página de Apologética católica o un manual de Teología? ¿Pretende ir pasando de un tema a otro, dando su curiosa interpretación de todas las Sagradas Escrituras? Le recuerdo que esta noticia trata sobre los de la «fraternidad humana» y su estentóreo fracaso (había eco en la plaza de San Pedro, de tan vacía).