Francisco le hace a Georg Gänswein lo que le hicieron a él los jesuitas en Buenos Aires

ganswein y Francisco
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El el semanario alemán «Die Zeit» ha dado a conocer la noticia de que el Papa quiere bien lejos del Vaticano al que ha sido secretario personal de Benedicto XVI.

Según publican medios alemanes, el arzobispo Georg Gänswein tiene que mudarse del monasterio Mater Ecclesiae, la casa de retiro de Benedicto XVI, el 1 de febrero. Según «Zeit», el Padre Georg fue informado de la fecha de su expulsión del domicilio vaticano el mismo día del funeral del Papa Emérito en una carta firmada personalmente por el Papa Francisco.

El lunes, la Oficina de Prensa de la Santa Sede anunció que el Papa recibió a Gänswein en audiencia privada. Aunque se desconoce el contenido de esa conversación, varios medios informan que el arzobispo fue llamado a filas el sábado antes por el cardenal secretario de Estado, Pietro Parolin y el Papa Francisco.

De este modo, vuelve a coger aún más fuerza los rumores de que las críticas al ‘chismorreo’ que hizo el Papa durante el ángelus del domingo iban dirigidas al ex secretario personal de Ratzinger.

Es normal y comprensible que el libro de Gänswein no haya sentado bien dentro de los Sacros Palacios, pero lo que tampoco parece normal -y menos aún de un Papa que debe adoptar una actitud paternal- es la de comunicar al arzobispo que debe salir de la que hasta ahora ha sido su casa el mismo día del funeral de su ‘padre’ espiritual. Otra decisión de Francisco, y no de sus círculos próximos sino del mismo Papa, que casa poco con las proclamas sinodales, de misericordia y compasión a las que tan acostumbrados nos tiene. Pero todo esto, tiene una explicación.

Cuando Francisco fue expulsado de la residencia de los jesuitas en 1990

En mayo del año 2015, el periodista inglés Austen Ivereigh publicó una biografía de Francisco enfocada en sus años en Argentina bajo el título de «El gran reformador: Francisco, retrato de un Papa radical».

Ivereigh cuenta en el libro como fruto de la tensión de Bergoglio con los provinciales jesuitas de Argentina, en 1990 enviaron a Bergoglio al exilio en Córdoba, sin ningún cargo. Poco después de la marcha de Jorge Mario a Córdoba, el arzobispo de Buenos Aires en aquel momento, Antonio Quarracino, pidió a Roma tener precisamente a Bergoglio como obispo auxiliar. Y lo logró.

El vaticanista Sandro Magister escribió que «en las consultas secretas que preceden al nombramiento de cada nuevo obispo, que el superior general de los jesuitas, Kolvenbach, puso por escrito su juicio negativo sobre el nombramiento de Bergoglio. Pero no fue escuchado. Sin embargo, hay un episodio, inmediatamente después de la consagración de Bergoglio como obispo, en el verano de 1992, que muestra cuan áspero seguía siendo el desacuerdo entre los dos».

Mientras esperaba que se estableciera cuál iba a ser su nuevo hogar, Bergoglio se hospedó en la casa de la curia jesuita de Buenos Aires, en la que en el ínterin había llegado a ser provincial su archienemigo García-Mata.

El periodista Ivereigh escribe en el libro que «Bergoglio acusó a García-Mata de haberlo difamado en un informe que el provincial había enviado a Roma (el informe era secreto, pero uno de los consultores le había informado a Bergoglio), mientras que García-Mata se sentía amenazado por la popularidad de la que gozaba el nuevo obispo entre los jesuitas más jóvenes».

Ivereigh afirma en el libro que «si quería que se fuera, dijo Bergoglio, se lo debía notificar oficialmente. Entonces García-Mata le escribió a Kolvenbach, quien apoyó su decisión. La carta del general de los jesuitas fue dejada en la habitación de Bergoglio. Y García-Mata recibió una respuesta escrita de Bergoglio, en la que le comunicaba su fecha de partida».

Ahora, la historia se repite, con un protagonista común pero en el lado contrario de la historia. Lo más llamativo, -casualidad o no- son los años que han pasado entre una historia y otra: 33 años desde cuando en 1990 obligaron a Bergoglio a marcharse de la residencia de los jesuitas hasta el año 2023 en donde ahora Francisco ordena a Gänswein abandonar su casa en el Vaticano.

De esta historia se puede sacar la conclusión del paralelismo entre lo que sufrió Bergoglio y lo que le acaba de ocurrir a Gänswein.

Pero ante esta situación, cuando alguien sufre un agravio, se puede actuar de dos maneras, o bien repetirlo con otros y o bien ahorrársela a otros por compasión sabiendo lo que es haber sufrido eso desde la sabiduría que otorga la experiencia personal. En este caso, Francisco parece haber optado por la primera opción y no quiere ahorrarle a Gänswein lo que a él le hicieron los provinciales jesuitas en Argentina.

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Comentarios
47 comentarios en “Francisco le hace a Georg Gänswein lo que le hicieron a él los jesuitas en Buenos Aires
  1. Recordemos lo q paso con el secretario de Juan Pablo II, ni bien asumio Benedicto, le enviaron a Polonia como titular de Cracovia.

    1. No es equivalente el caso, un secretario de Papa difunto cesa automáticamente su función, pues el nuevo Papa tendrá su propio secretario. No se le echa, simplemente cesa su función de forma natural. Y crearlo arzobispo es un ascenso. En cambio a Ganswein sí se le corre sin que haya necesidad de ocupar su lugar por otra persona en forma necesaria.

      1. La masonería eclesial es implacable y no perdona, han llegado demasiado lejos para dejar que Católicos recuperen lo que ellos le han entregado al diablo desde hace décadas!

        1. Según todas las profecías al respecto, y visiones de Emmerich y de Valtorta, los masones van a pagar con creces el mal que están haciendo.

  2. El impostor ha movido ficha con premura,dado que así podrá esgrimir un arma afilada contra don Georg:Ahora,cualquier cosa que revele éste, los turiferarios del argentino dirán que son mentiras fruto del despecho y la venganza.

    1. Bien visto.
      En su libro, Ganswein no para de asegurar que la dimisión de Benedicto fue válida y que Paco es el verdadero monarca.

      Si eso pensó que le salvaría, estaba equivocado.

      Le está bien empleado por querer nadar y guardar la ropa y querer torear a la bestia

      Ahora si quiere, que saque otro libro: «Nada más que la verdad que se me olvidó decir»

      1. No sé por qué ustedes se esfuerzan por ver siempre lo negativo. La razón por la que el arzobispo vivió en esa casa era su misión de cuidar al Papa Benedicto. El 1 de febrero seguramente ya tendrá asignada una nueva misión canónica: es joven, es arzobispo, lo más lógico es que le asignen una nueva misión, se consagró para estar al servicio de la Iglesia.
        Andar buscando paralelismos, historias y no sé cuántas cosas más solo es mala leche.

        1. ¿Que nueva misión le han encomendado?

          ¿No sigue siendo el Prefecto de la Casa Pontificia?

          ….

          Se le ven los colmillos misericordiosos…..

          1. Sigue siendo el Prefecto de la Casa Pontificia. Francisco le dejó el cargo pero le quitó la «cartera». Debe ser un título honorífico. Veremos donde lo mete ahora.

      2. He visto recientemente las imágenes de la herejía que hizo Bergoglio en el Vaticano (Octubre de 2019) adorando a la horripilancia esa de la «Pachamama», a la cual hasta le dio la bendición… Pues en las imágenes se ve claramente que en el aquelarre hereje pachamámico está el Mons Ganswein, todo contento y ufano, parece estar muy a gusto haciendo honores a una deidad pagana. Me parece que muchos tienen a Ganswein por lo que no es… (Bergo se lo quita de encima porque sabe bien que un adulador nunca es fiable).

        1. «Bergo se lo quita de encima porque sabe bien que un adulador nunca es fiable»

          De momento no se lo «ha quitado de encima»: sigue siendo el Prefecto de la Casa Pontificia. Además, si fuera como usted dice, tendría que echar a todos a su alrededor, cuando, precisamente, los ha puesto ahí por aduladores.

        2. A mi tampoco me cierra este señor promotor de tratamientos con abortos. Si no se indigno con la idolatría pachamamica es porque le cae muy bien el mundo. Que haya sido secretario de un papa no lo santifica.

    2. Es verdad en parte, pero la violencia del gesto inicial le auto-acusa. En cualquier caso, la estrategia de preparar un agravio para acusar un resentimiento es un golpe que regresa a quien lo da.

  3. Este tipo de cosas me repugnan… Hasta dónde va llegar Bergoglio con ésto?…. Ya su cinismo no tiene límites…. Oremos por un Papa Santo.

    1. Se va a ensañar bien con Gänswein, parece que hace tiempo que le tenía ganas. Afortunadamente este es mucho más joven. Y la vida da muchas vueltas.
      Otro ejemplo más de la catadura de Bergoglio. ¡Si no hace falta ningún libro para conocerlo!

      1. A mí me abrió los ojos cuando le dió un soberano manotazo a una enfervorizada peregrina que solo quería rozar siquiera el pico de su vestidura. La crispación de la cara del Papa lo dejaba todo claro.

  4. me resisto a pensar que el papa haya actuado con una especia de revancha hacia el secretario de B.XVI, pero todos los indicios apuntan hacia eso. Mirándolo a golpe de vista ese comportamiento denota ruindad, y no quiero pensar en un papa con alma ruin. Pero Bergoglio tiene una historia que le precede que no parece de mucha nobleza de alma, y más bien sujeta a la miseria de todos los mortales. Lo que más tristeza produce es su animadversión hacia BXVI que hace ahora extensiva a su secretario y a cuantos formaron el círculo cercano del Papa emerito. Francisco ha sembrado en la Iglesia muchas semillas de discordia que están dando sus frutos envenenados.Ya solo nos queda pedir que el ^Papa que venga sea según lo designios del corazón de Cristo.

  5. La dureza de corazón de Francisco es lamentable.
    Gänswein es un buen sucesor de los apóstoles, y por eso Francisco va contra él.

  6. Hace mucho tiempo que lo digo.Cada día se hace más patente.Bergoglio es INTRÍNSECA Y ONTOLÓGICAMENTE perverso.No hay más.Espero que el Señor(en el que creo,que no CREE) lo llame pronto,de lo contrario acabará por destrozar lo poco que queda de la Iglesia.

  7. Donde está el cuerpo allí se acumulan los buitres.
    Pronto se unirán Gänswein, Roberto de Mattei y toda esa trup para decir que Benedicto renunció que es un simple cardenal y que Bergoglio es papa.
    Todos juntos en el horno se van a encontrar como dice el tango.

  8. Desde hace 60 años la iglesia no es una casa de paredes definidas con cristales transparentes y pintura brillante sino de una plasta pegajosa que borbotea, la prosa melosa y pringosa del modernismo y del Vaticano II que quiere decir lo que uno quiera, donde las cartas de los papas no se sabe si son alabanzas o condenas en documentos kilométricos que parecen meditaciones personales que no dicen nada definido.

    Antes se dictaba, se excomulgaba, se decretaba y a otra cosa, aplicando el derecho canónico. Ahora las causas se eternizan y se acumulan, el derecho canónico no se aplica, y tampoco para elegir un papa o para determinar si lo es o no.

    Que importa que un documento de renuncia sea objetivamente inválido si la palabra «objetivamente» descalifica al que la usa por su «rigidez»?

    Ahora mismo Paco podría decir tranquilamente que no es Papa, que no es vicario de Cristo (bueno, lo ha dicho al que quiera oirle) Y NO PASA NÁ

    1. De hecho yo creo que el plan es ese: dentro de pocos años cuando la mayoría de las iglesias sean indistinguibles de un casino, se prensentará y dira que nunca fue Papa ni vicario de Cristo, que la renuncia de Benedicto era invalida y que el se presentó unicamente como obispo de Roma. Pero que ni eso era, pero que más da, el caso es que él fue nombrado como delegado de la ONU en el Vaticano que va a ser la sede de la religión mundial. Y los católicos ya con la décima vacuna asentirán robotizados.

  9. Desde hace 60 años la iglesia no es una casa de paredes definidas con cristales transparentes y pintura brillante sino de una plasta pegajosa que borbotea, la prosa melosa y pringosa del modernismo y del Vaticano II que quiere decir lo que uno quiera, donde las cartas de los papas no se sabe si son alabanzas o condenas en documentos kilométricos que parecen meditaciones personales que no dicen nada definido.

    Antes se dictaba, se excomulgaba, se decretaba y a otra cosa, aplicando el derecho canónico. Ahora las causas se eternizan y se acumulan, el derecho canónico no se aplica, y tampoco para elegir un papa o para determinar si lo es o no. En todo esto tienen gran culpa los papas postconciliares.

    Que importa que un documento de renuncia sea objetivamente inválido si la palabra «objetivamente» descalifica al que la usa por su «rigidez»?

    Ahora mismo Paco podría decir tranquilamente que no es Papa, que no es vicario de Cristo (bueno, lo ha dicho al que quiera oirle) Y NO PASA NÁ

  10. Estas actitudes parecen ser históricas. Al fallecer Pío XII, la famosa monja alemana que llevaba a todos más derechos que una vela fue echada de malas maneras por algún cargo de la Curia. Los secretarios de los pontífices pues parecido con mejores o peores maneras.
    Era esperable pues muriendo Benedicto XVI este arzobispo ya no tiene cometido alguno en el Vaticano y en Mater Eclesiae pues no pinta demasiado.
    Aún así seguro que lo rebajan y humillan para que no hable pues habrán intentado comprarle y parece que no ha aceptado. Cuando la mafia no te compra te castiga, pero creo que Gäswein ya lo tenía claro y tiene una misión y un legado. Todo el mundo sabe que muerto el Papa Emérito se abre una guerra curial, doctrinal y de todas las clases que acabará o en un Cónclave pronto o en un cisma.

    1. «Era esperable pues muriendo Benedicto XVI este arzobispo ya no tiene cometido alguno en el Vaticano…»

      Hay algo que parece que se le escapa: Mons. Gänstein sigue siendo el Prefecto de la Casa Pontificia; no de la de Benedicto XVI, sino de la de Francisco, el cual le relevó de las funciones que le correspondían para que cuidara a Benedicto XVI. Una vez fallecido éste, ¿le va a devolver ahora sus funciones, de acuerdo con su puesto (que no es el de «enfermero»)? Porque esa fue la excusa que dio Francisco, por lo que ahora comprobaremos si realmente era cierta. Por tanto, comparar el caso de los secretarios personales de otros pontificados no guarda analogía alguna con este caso, porque Gästein, como he dicho, no es el ex secretario de un pontífice difunto, sino el Prefecto de la Casa Pontifica de Francisco a día de hoy (veremos hasta cuándo).

    1. El Debate es «francisquita» a muerte como todos los fans del globalismo. Y lo único que hace son conjeturas que no hay por qué creerlas.

  11. Para quien conoce al argentino endomorfo, hinchado hasta el hartazgo largamente octogenario, no es novedad la mala crianza y forma de su proceder, no por el hecho de ser porteño, sino por el hecho de que compasión, consideración, respeto o ponderación para con alguien del nivel de un Ganswein, para él no existe, no se considera ni se discute. Bruto, malcriado y tosco favorable a lo no cristiano es definirlo de manera pálida.
    Síntomas y pruebas de ello sobran presentarlos o citarlos; basten ellos para afirmar que es alguien habitado por seres que proclamaron el «non serviam». Al pedir oraciones no especifica a qué «dios» van esas oraciones, sabe está en sus últimas pataletas y que ya en breve se encontrará con el «señor» al que sirve. Será una buena limpieza para la Iglesia Católica.

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