Hace unos días informamos de una bendición a una pareja gay -recién ‘casada’ civilmente- en una parroquia de Bolonia, diócesis que gobierna el cardenal Matteo Zuppi. La noticia, destapada por La Nuova Bussola Quotidiana, provocó una reacción del arzobispado en forma de una nota en la que se niega que se hubiera producido bendición alguna. La Bussola responde a esa nota.
El comunicado que intenta esclarecer lo sucedido el pasado 11 de junio en Budrio, cuando una pareja gay fue ‘bendecida’ durante una misa, según documenta La Nuova Bussola Quotidiana, es en realidad, afirma la publicación católica italiana, “un concentrado de mentiras para negar la evidencia y desviar así la posición del cardenal sobre las uniones del mismo sexo”.
Según la nota del arzobispado, no hubo bendición, simplemente una “Misa de acción de gracias por el grupo En Camino, dirigido a acompañar y ofrecer apoyo en la vida cristiana también a las personas con tendencias homosexuales”. Y estaba presente una pareja gay.
La nota, si no miente directamente, es deliberadamente engañosa, sobre todo porque Pietro y Giacomo, la pareja del mismo sexo, no estaban allí por casualidad, como miembros del grupo, como demuestra el diario italiano con abundantes pruebas fotográficas y declaraciones de los propios celebrantes, que dejan meridianamente que fue una Misa celebrada para celebrar la unión.
La Bussola aporta una prueba más, un mensaje de WhatsApp con el que Pietro invitó a sus amigos a participar en la ceremonia: “el sábado 11 de junio de 2022, salvo circunstancias imprevistas, Giacomo y yo nos uniremos en el ayuntamiento de Budrio Town Sala. Acto seguido, en la iglesia de enfrente, celebraremos una misa de acción de gracias/encomienda por nuestra vida en común”.
Tampoco es cierto, añade la publicación, que el objetivo del grupo En Camino sea simplemente «acompañar y apoyar a las personas con tendencias homosexuales en la vida cristiana», como dice el comunicado de la diócesis, sino llevar la agenda LGBT al corazón de la Iglesia, la legitimación de cualquier orientación sexual, la aplicación práctica de la ideología de género, incluida la aceptación de las uniones homosexuales.
La nota, para ocultar la heterodoxia del grupo, también cita de forma parcial, errónea y engañosa la carta a los obispos del entonces Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Cardenal Joseph Ratzinger, fechada el 1 de octubre de 1986. para justificar la actividad del grupo ‘En camino’: “Dios ama a toda persona y también la Iglesia, renovando su compromiso contra toda discriminación y violencia por razón de la orientación sexual”, considerando “reductivo definir la identidad de las personas únicamente sobre la base de su ‘ orientación sexual'».
En realidad, esta cita está tomada del documento final del Sínodo de los Jóvenes (párr. 150), que sólo en la segunda parte de la oración -la persona no puede ser definida sólo por la orientación sexual- retoma el concepto expresado en el n. 16 de la Carta de Ratzinger sobre la pastoral de las personas homosexuales. Pero en la carta de Ratzinger esta declaración siguió a la denuncia de la actividad de un lobby gay dentro de la Iglesia que, ayudado por fuerzas externas y enemigos de la Iglesia, pretende subvertir la enseñanza de la Iglesia sobre la sexualidad (nn. 8 y 9); y sobre todo sigue el no. 15, en el que se define bien la tarea de la pastoral de las personas homosexuales:
“Esta Congregación, por lo tanto, anima a los Obispos a promover, en sus diócesis, una atención pastoral a las personas homosexuales en total acuerdo con la enseñanza de la Iglesia. Ningún programa pastoral auténtico podrá incluir organizaciones en las que las personas homosexuales se asocien entre sí, a menos que esté claramente establecido que la actividad homosexual es inmoral. Una actitud verdaderamente pastoral incluirá la necesidad de prevenir a las personas homosexuales de las ocasiones próximas de pecado”.
Por si no quedó claro, el documento de la Congregación para la Doctrina de la Fe condena claramente actividades como las del grupo En Camino y la pastoral propugnada por el cardenal Zuppi, incluida la bendición de las parejas homosexuales.
Bendición de una pareja gay: los embustes del cardenal Zuppi