El Vaticano ha anunciado hoy la orden del Papa de cambiar el gobierno de las Memores Domini, asociación del movimiento Comunión y Liberación. Francisco ha designado al arzobispo de Taranto como delegado especial, quien se encargará a partir de ahora de la gestión de esta institución.
El comunicado con el que el Vaticano ha anunciado esta medida –que, por cierto, adelantó nuestra Specola– es el siguiente:
«El Santo Padre Francisco, teniendo en cuenta la experiencia de los Memores Domini y reconociendo en su carisma una manifestación de la gracia de Dios, ha ordenado un cambio en la gestión de la Asociación, nombrando a Su Delegado Especial el Altísimo Mons. Filippo Santoro, Arzobispo de Taranto.
El Delegado Especial , a partir del 25 de septiembre de 2021, asumirá temporalmente, ad nutum de la Sede Apostólica, con plenos poderes, el gobierno de la Asociación, con el fin de salvaguardar su carisma y preservar la unidad de los miembros. Simultáneamente, decae el actual gobierno general de la Asociación.
El Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida ha designado al P. Gianfranco Ghirlanda, SJ, Asistente pontificio para los asuntos canónicos relacionados con la misma Asociación».
Pues ya tenemos otro movimiento de la Iglesia comisariado. Uno que, por cierto, afecta a Benedicto XVI, quien vive en los jardines vaticanos juntos a cuatro miembros de esta asociación, quienes le asisten en su vejez.