Hoy Madrid celebra a su patrona, la Virgen de la Almudena, y una vez más ha sido con toda solemnidad. http://www.revistaecclesia.com/monsenor-osoro-preside-la-misa-en-honor-a-la-virgen-de-la-almudena-en-la-plaza-mayor-Madrid/ La Plaza Mayor estaba abarrotada. Con el arzobispo de Madrid, Don Carlos Osoro, concelebraron el cardenal Rouco y los arzobispos Fratini y Herráez, nuncio de Su Santidad el primero y electo de Burgos el segundo. Todo se desarrolló muy bien, un año más, y sólo haré tres o cuatro comentarios marginales. La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, de chapeau. Y supongo que nadie me tendrá por fan de esa señora. Hizo lo que tenía que hacer y estuvo donde tenía que estar. Con su dignidad de no creyente y su representación del pueblo de Madrid. Tengo con ella mil discrepancias que además son irreductibles. Pero no es una perroflauta como tantos y tantas colegas suyos que además de ser impresentables hasta huelen mal. Ésta al menos parece duchada. Su voto ha sido medidísimo, de encaje de bolillos, pero ni baboso ni hiriente. Dijo lo que una agnóstica respetuosa e inteligente podía decir. No hirió a los católicos aunque todos comprendieran que no hablaba una católica. Pienso, tal vez equivocadamente, que molestó más a los suyos, con su presencia y sus palabras, que a quienes nada tenemos que ver con sus ideas. Don Carlos estuvo asimismo bien. Es un obispo de talante conservador, acreditado en las tres diócesis que anteriormente rigió y su homilía puede entenderse perfectamente en ese sentido. Aunque el uso, cabe pensar que mimético de palabras equívocas, resta claridad al mensaje. Porque palabras hoy tan de moda como encuentro y descarte, al no ser unívocas, permiten casi todo. Lo verdaderamente importante no es el encuentro ni el descarte sino con quién o con qué te encuentras y a quién o qué descartas. Estoy absolutamente convencido de que el arzobispo Osoro no defiende para nada sino que rechaza el encuentro con la pederastia, el asesinato de mujeres, la corrupción… Y que descarta todo ello sin la menor vacilación. La imagen de los dos arzobispos de Madrid, el emérito y el actual era una imagen de encuentro y no de descarte. Y el himno de la Virgen de la Almudena que Rouco hizo popularísimo en Madrid y que Osoro canta con entusiasmo. Porque evidentemente al nuevo arzobispo le gusta cantar. Por lo que vi por TV13 todo salió muy bien y con muchísima asistencia. Los locutores, salvo Manuel González que se sabe el tema y no chupa micrófono, creo que debió pasar bastante calor con la capa, penosillos. Dando importancia a lo que no tiene ninguna, no informando de lo que podría tener algún interés y tapando con sus vaciedades la misma celebración de la misa. Aunque la locutora principal estuvo más discreta que otras, o la misma, en otros actos también se pasó algo. La Cifuentes con la medalla de la Almudena me pareció una burla. Aunque apruebe su presencia institucional. P.D.: Me ha satisfecho muchísimo coincidir con colega de Blog a quien tanto admiro como es Guillermo Juan Morado. http://infocatolica.com/blog/puertadedamasco.php/1511090925-la-alcaldesa-de-madrid-y-nues Con lo que lo afirmado por esta pobre cigüeña no se aparta del pensamiento de un doctor en Teología por la Gregoriana.
La Almudena en Madrid
| 09 noviembre, 2015
Para «el cazador de herejes»según el cual muchos, a parte Riera al que nombra, somos semipeligianos. ¿Y porqué no pelagianos enteros?
Lo cierto es que «Dios que te creó sin tí no te podrá salvar sin ti,» de San Agustín cazador de pelagianos auténticos.
El británico-escocés-irlandés Pelagio, un religioso no sacerdote(como nuestro contemporáneo Bianchi y su Bose) pero versado en teologías y dominador del latín y el griego, al que el propio San Agustín calificó de santo varón y hombre de leyes el papa Zósimo,, vivió durante años en Roma y sostenía que la gracia no tenía ningún papel en la salvación, sólo era importante obrar bien siguiendo el ejemplo de Jesús.La fuerza moral de la voluntad humana (liberum arbitrium), cuando está fortalecida por el ascetismo, le era suficiente en sí misma para desear y conseguir el noble ideal de la virtud.(Masonismo?Confiesa que mediante la sola fe justificante hemos sido liberados de nuestros pecados personales, pero esta gracia de la remisión no santifica el alma, acción que atañe a la escética. Fe justificante y Gracia santificante. que fue un binomio que tomaría sesgado Lutero para sus tesis fe sin obras interpretando a San Pablo según propio parecer erróneo cuando es un hecho que San Pablo habla de las obras de la Fe mosaica inválidas para la justificación, por más que Francisco en el último Yon Kippur haya exhortado a los judíos de religión a proseguir en la propia santificación. ¡Tremendo!
«Al que tenga se le dará, y al que no tenga aun de lo poco que tuviera se le quitará Por tus palabras seras condenado y por tus palabras serás salvado. No todo el que diga Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos»!.Y tantos textos más que clarísimamente demuestran que son las obras en la FE, nuestra vida vivida en la FE, es la santificable, que son salvíficas en Cristo Jesús que nos redimió. Pero las obras, nuestras vidas son nuestras y de ella somos cada uno responsables por nosotros mismos en cuanto que conscientes. y por eso el VII define el Sacramento del Altar y Comunión como fuente y culminación de toda la vida cristiana, pues en él se nos convierte en Gracia de Dios por acción del Espíritu Santo,la LITURGIA!, eso que los protestantes llaman magia y por eso se andan en busca de sucedáneos sin parar.
No somos pelagianos ni semipelagianos. Somos católicos como los originales que ya entonces hubo todas estas intemperancias y desvios de espiritualidad subjetivista y relativista.
Es cierto que la gracia de la Redención nos viene de Dios por su incondicional iniciativa pues nada ni nadie le puede ni pudo condicionar. Pero la salvación en Cristo, Jesús=Salvador, depende de nosotros, de nuestros comportamientos y conductas si están en conformidad con lo mandatado por Jesucristo pues tanto serán convertibles en Gracia de santidad o Gracia Santificante, cuanto sean conformes con la FE de la Revelación que nos fue transmitida de una vez por todas . Hay que entrar con el traje estipulado la misma especie y condición que la piel, la carne y los huesos. Nada que no sea santo en Dios.
En resumen: que la Gracia de Dios sea por su iniciativa incondicionada y gratuita y permanente no quiere decir que la Gracia de la Salvación sea gratis sin contrapartida por nuestra oarte. Se nos invita a entrar, pero por la puerta, siguiendo un orden establecido y en condiciones de hijos de Dios adoptivos coherederos con Cristo. Después que nos llame a rendir cuentas de nuestros talentos y ojalá no caigamos en la tentación de quienes solamente tenemos un talento lo enterremos para no perderlo y asegurarnos de su devolución cuando el amo riguroso nos lo reclame. Hemos de trabajar, negociar que es no dar lugar al ocio en adquirir Gracia. Hay méritos y deméritos desde que llegamos a conscientesy por lo mismo responsables. Ante Dios, Padre,Hijo y Espíritu Santo.
Dios misericordiosísimo que quiere arrepentidos en este mudo, es perdonador en este mundo y paciente. Pero no lo perdona todo a pesar de lo que se está diciendo. Es Jesucristo quien dijo que el pecado contra el Espíritu Santo NO se perdona en esta vida ni en la otra. Cudadito con la desacralización.
LVII. 7. (…) En una crónica de la Historia Tripartita se lee lo que sigue: en cierta ocasión el emperador Teodosio, dejándose llevar de su indignación, sin hacer distinción entre responsables e inocentes, mandó matar a casi cinco mil hombres de Tesalónica porque algunos de ellos, durante una sedición, habían apedreado a los jueces de la ciudad. Poco después de esto, estando el emperador de paso en Milán, quiso entrar en la catedral, pero San Ambrosio salióle al encuentro y se lo impidió diciéndole: «Emperador, ¿cómo es posible que te muestres tan enormemente presuntuoso después de haberte dejado llevar de aquel furioso arrebato de ira? ¿Acaso la potestad imperial te ciega hasta el punto de no reconocer el pecado que has cometido? Procura que la razón guíe tus actos de gobierno. Cierto que eres príncipe; pero entiende bien esto: príncipe significa el primero, no el amo. Eres, pues, no el amo de tus semejantes, sino el primero entre ellos, y, si ellos son siervos, siervo también eres tú y el primero de los siervos. ¿Con qué ojos miras el templo del Señor, que es Señor de todos y también Señor tuyo? ¿Cómo te atreves a pretender hollar con tus pies este santo pavimento? ¿Cómo osarías tocar nada con esas manos que chorrean sangre y proclaman tu injusticia? ¿Cómo puedes llevar tu audacia hasta el extremo de intentar tocar con esa boca tuya que mandó criminalmente derramar tanta sangre, el cáliz de la sangre santísima del Señor? ¡Anda! ¡Vete! ¡Aléjate de aquí! No se te ocurra aumentar la perversidad de tu pecado anterior con un segundo pecado de sacrilegio. Acepta esta humillación a la que hoy el Señor te somete, y utilízala como medicina que pueda devolver la salud a tu alma». El emperador obedeció a San Ambrosio, renunció a entrar en el templo, y gimiendo y llorando regresó a su palacio; y fue tanta su pena y tan constantemente prolongado su llanto, que Rufino, uno de sus generales, viéndole un día tras otro y durante muchos tan afligido, preguntóle por qué estaba tan triste. Entonces el emperador le contestó:
-Tú no puedes comprender lo mucho que sufro al ver que las iglesias están abiertas a los siervos y a los mendigos, mientras que a mí se me ha prohibido la entrada en ellas».
¡Asqueroso pelagiano este tal Ambrosio!
¿Quién es el para juzgar?
Malleusheresiarcarum, riera, mucho ver herejes por todas partes pero vosotros caéis en la herejía semipelagiana al decir que arrepentirse es condición para ser llamado al banquete, con lo cual ponéis la iniciativa de la salvación en el hombre y no en Dios. El arrepentimiento (representado en el traje de fiesta) es RESPUESTA, no CONDICIÓN a esa llamada. La gracia divina es GRATUITA, sin condiciones. ¿Queda claro, panda de herejes semipelagianos?
¿Doctor por la Gregoriana? ¡Socorroooo, Piedadddd, AuuXXILIOOOOOOOOO! Salvando la persona del caso, de la Gregoriana salieron Martini rector magnífico martiniano y Díez Alegría por poner dos ilustres casos descatolizadores. No es suficiente garantía hoy lo Gregoriana.Otra cosa es que el citado Doctor sea fiable como lo es aunque tenga algo que ver con el Opus acomodaticio, pero en general ortodoxo.
Se agradece que desde tierras bayonesas salgan términos de Hispanidad, pero tentándose la ropa.
A Osoro,una amiga mía le llama el clon.
Adivinad de quién…
«Los servidores salieron a los caminos y reunieron a todos los que encontraron, buenos y malos, y la sala nupcial se llenó de convidados». (MT 22,10)
¿Si Jesús obra así, ¿Quién es usted para criticar a los invitados a la Eucaristía?
Me disgusta Osoro y su talante, la comunista Carmena y la Cifuentes abortista.
.
Creo que la jubilación de Rouco ha sido una gran desgracia para Madrid.