| 25 octubre, 2023
Éste, arzobispo.
Memo antes de la ordenación, en la ordenación y después de la ordenación episcopal. Un tío que dice que lo mejor del Sínodo es poder ir sin sotana desde luego se retrata él. Y es posible que también retrate al Sínodo.
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¿En Belgrano hay muchos católicos?
Por su nombre y su apellido, debe ser de la minoría húngara de Serbia (de Voivodina concretamente).
Podía haber sido peor: decir que le gusta la paella y estar comiendo callos…
El nivelazo que están mostrando lo dice todo. Asistimos a trastabilles de la partida de ejecutores responsables de la subasta de los principios genuinamente cristianos para sustituirlos por una suerte de consignas ecolo-jetas y dando por buenas disfunciones varias. Mezclando churras con merinas, modas y modos, comunismos trasnochados (si no fueran criminales) con valores cristianos. Malvivimos en un populismo cuenta chistes malos, que se enseñorea en las estructuras de la Iglesia como estrategia para salvar los muebles. La mediocridad tira hacia abajo y la excelencia siempre invita a subir. Desaparecidos los gigantes es la hora de los enanos. Montemos un circo y nos irá mejor. O designemos a Jesús príncipe del ecologismo y la Pacha-Papa que igual nos dan una palmadita; ya era hora de unirse a la pachanga moderna y abandonar el oscurantismo medieval. Y estos, tan contentos. En ocasiones parecen niños con zapatos nuevos. Les da igual sacrificar a su parroquia natural mientras pierden el tiempo inútilmente intentando convencer al enemigo. Y vendiendo su alma por unas cebollas. ¿Cómo podríamos ejemplificar la definición de un zascandil teológico?