| 27 octubre, 2023
Algunos no se extrañarán de la noticia.
De entre los poquísimos que sabían quien era.
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Y habrá quien piense que la Iglesia no pierde nada.
https://infovaticana.com/2023/10/27/daniel-pajuelo-conocido-como-smdani-abandona-el-sacerdocio/
daniel pajuelo, un mamarracho salido de una grotesca caricatura.
Es uno de los sacerdotes más conocidos por la juventud española. Bastante «francisquista», la verdad.
Me apena, no solo porque se pierde un sacerdote religioso. Sino porque llevamos ya muchos en los últimos años. Entran pocos y se van casi todos. La vida consagrada parece que desde hace décadas es incapaz de ofrecer un proyecto de vida a los jóvenes.
Entran pocos porque con 40 años ya no dejan entrar a nadie, quieren vocaciones de 18 años, cosa casi imposible o imposible, que sigan así y se vayan diluyendo…
Ejemplo de ordenación sacerdotal de un miembro de congregación religiosa que no tiene vocaciones. Por la publicidad, el bienquedismo y porque no tienen vocaciones ordenan a un tipo modernillo, con cierto carisma y gracia, que se explica bien y que habrá sido el típico alumno guay pensando que alguien así arrastrará a los jóvenes o a los padres ya no católicos que llevan a sus hijos a esos colegios. Resultado, polémicas, curitas estrella y al final la mundanidad y el fracaso.
También Sor Cristina abandonó los habitos y el convento.
https://www.infobae.com/america/entretenimiento/2022/11/21/cristina-scuccia-la-monja-que-gano-la-voz-en-italia-dejo-los-habitos-y-se-mudo-a-espana/
El próximo que debería dejar el sacerdocio es el redentorista Damián Montes, que es o ha sido contertulio en el programa de Sonsoles Ónega:
https://www.elpais.com/sociedad/2021-03-28/damian-montes-el-pecado-de-la-iglesia-ha-sido-unir-sexo-y-pecado.html?outputType=amp
Se dice que las armas las carga el diablo. Algunos nombres y apellidos, parece que también.
No sé quién es. Pero casi siempre es una noticia triste, el abandono, salvo que sean cosas como la droga o cualquier vicio.
No se crea, aro, hay algunos que nunca debieran haber sido ordenados. Pero es que en algunos seminarios no hay el debido discernimiento y se ordena a todo el que entra y va pasando los exámenes. Total, si solo hay dos o tres y se les echa, ¿qué pasa con la estadística si encima el 90 por ciento de los profesos o de los curas que hay en la diócesis -¿verdad que sí señores obispos catalanes, vascos, de Aragón y de Castilla y León, que a veces sólo se habla de los catalanes y vascos, pero el problema está en muchos otros sitios?- superan de largo los setenta años?
Al ser marianista habrá ido a un noviciado, en todo caso, no a un seminario diocesano…