Mons. Antonio Prieto: «Estamos en un momento de mucha confusión»

Antonio Prieto Lucena Antonio Prieto Lucena, obispo de la diócesis de Alcalá de Henares
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En una entrevista concedida a El Debate, el obispo de la diócesis de Alcalá de Henares, Antonio Prieto Lucena, se ha pronunciado sobre la situación que atraviesa la Iglesia en estos momentos.

El obispo de la diócesis Complutense ha asegurado que, aunque pueda parecer lo contrario, «el Señor sigue llamando, así que la crisis no es de llamada, es de respuesta». Aunque monseñor Prieto Lucena señala que el descenso de la natalidad «es un dato objetivo que hay que tener en cuenta, también es verdad que hay vocaciones donde hay riqueza de vida cristiana y hay fruto».

El obispo de la diócesis de Alcalá de Henares ha defendido que «donde se vive con abundancia el credo, los sacramentos, la oración y la vida moral, que son las cuatro partes del Catecismo, surgen las vocaciones«.

Durante la entrevista, le preguntan al obispo por la drástica decisión del Vaticano de hace unos días de apartar al obispo francés Dominique Rey de su labor pastoral, quien era muy conocido por tener un seminario floreciente y una diócesis muy dinámica y viva. Sobre esa noticia, Antonio Prieto reconoce que este tipo de noticias a veces «nos extrañan y preocupan».

Confusión y ataques a la familia

Por otro lado, respecto a la situación de agitación que se vive dentro de la Iglesia, el prelado de origen cordobés confiesa que «estamos en un momento de mucha confusión. Y creo que esto es algo que a todos nos preocupa, porque genera mucha desorientación en los fieles y en los pastores. También en los obispos».

Además, siguiendo con la estela de su antecesor, el obispo Prieto Lucena ha denunciado que en España «llevamos décadas en que la familia está sufriendo un proceso de disolución. Por la influencia de la cultura dominante y de las ideologías del poder, y también por la misma dinámica social, que no ayuda».

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Comentarios
19 comentarios en “Mons. Antonio Prieto: «Estamos en un momento de mucha confusión»
    1. Estimado Uno, déjele respirar, acaba de aterrizar.
      Yo, personalmente, rompo una lanza en su favor (usted sabe que no soy sospechoso en estos temas).
      Sólo le falta coger un poco de confianza.
      Es un obispo del postconcilio, educado en seminario del postconcilio, pero, dentro de lo que hay, es de lo mejorcito, con mucho.
      Trabajador como no encontrará otro, querido por los fieles como pocos, nunca le he odio nada que se pase una coma o una tilde de la sana doctrina.
      Sus misas son impecables; sus homilías son profundas, sin ambigüedades, acertadísimas en lo expuesto y plenamente ortodoxas en la doctrina; calladito y sin destacar está haciendo una labor excelente en la Iglesia.
      Lo único que, como no espabile… de momento me da que le han metido un gol por la escuadra con lo de unir seminarios con el de Madrid.
      Creo que hace bien en mantener de momento un perfil bajo, dado que aún tiene el pico amarillo.

      1. No se nada de él, creo que es el obispo del padre Fortea a quien debió mandar dejar su blog y redes sociales, para bien de todos, o sea que empezó con muy bien pie y valentía

          1. También se puede recurrir a la técnica de la vocación por recomendación si son casos muy extremos o también a la tecnica de buscar mentes moldeables. Anda que no sé yo cosas de estas.

          2. Pero hay que tener mucho cuidado con las supuestas vocaciones de autistas y en tratamiento psiquiátrico que nos acechan. Anda que no abundan y luego se demuestra q es todo mentira, pero delante de Dios.

      2. Pues ya lo de unir seminarios con Madrid, estando ahí el bergogliano Cobo, pues no entiendo nada…

        Cobo se ve a las mil leguas que de doctrina católica poco y que de bergoglianismo, modernismo y Agenda 2030, mucho…

        Seminarios con Cobo de obispo deben ser aberrantes… esos seminaristas terminarán sin fe y adorando a a Pachamama (o lo que les echen) como no espabilen y renieguen de esa mala influencia.

        1. Por eso he dicho que, en mi opinión, le han metido un gol por la escuadra.
          El acuerdo se hizo público en junio del año pasado, justo cuando hacía un año de obispo.
          ¡Tenía el pico amarillo como los gurriatillos!
          Ya sabe usted que desde el nefasto CVII, con el invento diabólico de las conferencias episcopales, los obispos pintan menos que «el colorao en Madrid». Están siempre bajo la amenaza de la comunión con sus hermanos de conferencia (aunque sea en lo malo), y si alguno le hecha coj….. como, por ejemplo, hizo Monseñor Juan Rodolfo Laise, Obispo de la diócesis de San Luis (Argentina), prohibiendo la comunión en la mano, igual se despierta con una cabeza de caballo cortada en la cama.
          Como poco le llamaría D. Bergoglione y le daría “Il bacio della morte” (el beso de la muerte).

          1. «Ya sabe usted que desde el nefasto CVII, con el invento diabólico de las conferencias episcopales…»

            ¡Pero si las «Conferencias Episcopales» ya existían y se citan de forma expresa en la Instrucción de la Sagrada Congregación de los Obispos y Regulares del 24 de agosto de 1889, durante el pontificado de León XIII! Puede comprobarlo usted mismo:

            Sacra Congregatio Episcoporum et Regularium, Instructio «Alcuni Arcivescovi», De collationibus quolibet anno ab Italis Episcopis in variis quae designantur Regionibus habendis (24 agosto 1889): Leonis XIII Acta, IX (1890), p. 184.

          2. Estimado, CATHOLICVS.
            Una cosa es la costumbre surgida en 1830 en Malinas (que se extendió a otras naciones), donde los obispos belgas decidieron celebrar algunas reuniones de modo esporádico con el fin de tratar algunos asuntos, comúnmente llamadas conferencias episcopales (en España se llamaba Junta o Conferencia de Metropolitanos), y otras cosa son las actuales conferencias episcopales, instituciones administrativas de carácter permanente y personalidad jurídica pública eclesiástica y civil, que tienen como base de organización y actuación el «Decreto Conciliar Christus Dominus», concretamente el apartado 38:
            «Noción, estructura y competencia de las conferencias».
            No es lo mismo un movimiento sísmico, que seis micos en movimiento.

          3. El desarrollo concreto del apartado 38 del Decreto lo llevó a cabo Pablo VI en el «Motu proprio Ecclesiae Sanctae, Normas para la aplicación del Decretos Conciliares».

          4. «Quien como dios». Hace ya tiempo pusistes un comentario que decía:
            «hay tres cosas q no sirven para nada: la lluvia en el mar, la luna de día y la junta de Andalucía (…y añadió usted: y pablo VI de Papa)». Ese chiste te lo conté yo.
            Aplíque el chiste también en este caso.

          5. No tiene que aclararme lo que ya sabía todo el mundo (y quien no lo supiera podría consultarlo si le interesara, pues la información es pública y al alcance de cualquiera). Es usted quien ha afirmado que las conferencias episcopales son un invento posconciliar, lo cual es falso, por más que Pablo VI generalizara su extensión geográfica y redactaste normas para su funcionamiento a partir de ese momento. Le gustará más o menos lo que hizo, pero no se las inventó él ni el malísimo «El Concilio».

    2. Poca vergüenza, la tuya que acusas de sinvergüenza a un hombre íntegro plenamente entregado a su sacerdocio, ahora como sucesor de los apóstoles y que es uno de los mejores obispos de España.

  1. Coincido con su diagnóstico. Esto pasa en muchas diócesis. Credo, sacramentos, oración y vida moral son pilares indispensables para que florezca una parroquia. Habrá que sembrar mucho, pero la gracia hará el resto. Ya está bien de agenda 2030, wokismo, relativismo y calentamiento global. Queremos que nos prediquen la doctrina católica, nos administren los sacramentos y nos ayuden a educar a los hijos en la fe.

  2. En Arcalá había muchas vocaciones ¿qué habrá pazao?
    Otra solución rápida: convertir la revista diocesana en el Hola, para reportajes de seminaristas contando su vida, con reportajes de sus hermanos, sus hermanas, sus primos, sus primas… Todos contando su vida que no nos importa a nadie. No sería la primera vez que se usa esta tontada de técnica. Puede servir para enterarnos de que la prima de no se quién, por ejemplo pinta cuadros o se hace las uñas, o no sé, que juega al futbol borracha.

    1. «Todos contando su vida que no nos importa a nadie»

      ¿Y cree que a alguien le importan sus deposiciones? Tiene usted más moral que el alcoyano. Y un humor tan graciosísimo, que usted mismo se inventa chistes de los que sólo se ríe usted. Qué lástima.

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