El abusador serial, jesuita y artista Marko Rupnik seguiría siendo, según el Anuario Pontificio, consultor del Dicasterio para el Culto Divino.
La actitud del Vaticano con respecto al abusador padre Marko Rupnik sigue siendo un escándalo que contradice la supuesta política de ‘tolerancia cero’ y las palabras contra el abuso clerical del último documento de Doctrina de la Fe, Dignitas infinita.
Según informa el recientemente acosado Silere non possum, el Anuario Pontificio de 2024se puede encontrar aún, en la sección dedicada al Dicasterio para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, el nombre del P. Marko Ivan Rupnik S.J. Debería ser un error -bastante grave dado el eco mediático que ha tenido este caso- en el sentido de que, aunque todavía fuera consultor, ya no debería llamarse padre y no debería tener las palabras S.I., es decir, Societas Iesu, ya que ha sido expulsado de la orden.
También está presente en el sitio web del Dicasterio, por no hablar de la omnipresencia de su obra artística en algunos de los lugares más emblemáticos de la catolicidad. En nuestras diócesis tenemos decenas de sacerdotes que han sido suspendidos y destituidos como medida preventiva por cargos mucho menos graves. Rupnik, por otro lado, ¿lo mantenemos como consultor de los dicasterios del Papa?