Con 67 años monseñor José Antonio Eguren pasa a ser arzobispo emérito de Piura, ocho años antes de la edad establecida por el Código de derecho canónico.
La Santa Sede nunca explica los motivos que se esconden detrás de una renuncia anticipada y suele ser el propio interesado el que da las explicaciones pertinentes.
Durante estos últimos meses hemos visto ‘caer’ a unos cuantos obispos por todo el mundo antes de tiempo. Muchos de ellos alegan problemas de salud, aunque en algunos casos no sea del todo cierto. En otros casos, es la propia Nunciatura (como hemos visto en los últimos casos de obispos polacos) la que explica en un comunicado la realidad del motivo de la renuncia que se suele pedir desde Roma a los obispos que tienen algún ‘pastel’ entre manos.
Aunque ya adelantamos ayer en InfoVaticana que la renuncia anticipada de José Antonio Eguren está directamente relacionada con la investigación del Vaticano al Sodalicio de Vida Cristiana en Perú, el ahora arzobispo emérito de Piura no ha aludido a ninguna causa concreta que le haya llevado a presentar su dimisión ante el Santo Padre antes de los 75 años.
El mensaje de despedida de José Antonio Eguren
En su mensaje de despedida, Eguren cita a Benedicto XVI y dice que “amar a la Iglesia significa también tener la valentía de tomar decisiones difíciles, sufridas, teniendo siempre delante el bien de la Iglesia y no de nosotros mismos”.
«Doy gracias a Dios, Uno y Trino, por la oportunidad que me ha concedido de servir a mis hermanos en la fe en esta querida porción de la Iglesia universal. Quiero expresar mi gratitud a los Sucesores de San Pedro que confiaron en mí, a quienes siempre me esforcé por servir con filial afecto y obediencia. Asimismo, quiero expresar mi gratitud a los sacerdotes, consagrados, consagradas, y fieles cristianos laicos, quienes me han acompañado en esta misión. Su amistad, apoyo, y ardor evangelizador han sido para mí una fuente permanente de inspiración, aliento, y fortaleza como Pastor», escribe el arzobispo.
En su mensaje, monseñor José Antonio Eguren asegura que en todo momento ha procurado «cumplir con la misión que me fue encomendada, con justicia, honradez y en fidelidad a las enseñanzas de la Iglesia, preocupándome especialmente por el bien de los más pobres y necesitados. En el seno de mi hogar cristiano y de mi comunidad del Sodalitium Christianae Vitae, aprendí que siempre hay que amar a la Iglesia y hacerla amar».
Eguren dice adiós tras 18 años al frente de la archidiócesis de Piura remarcando que siempre encontrarán en él a «un pastor que se esforzará por ser fiel al Señor Jesús y al Sucesor de San Pedro». Por último, pide oraciones para los nuevos desafíos «que tendré de ahora en adelante». Asimismo, solicito a todos que, a partir de hoy, brinden a Monseñor Guillermo Elías Millares, Administrador Apostólico de la Arquidiócesis de Piura, todo el apoyo necesario.
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