Obispo alemán ‘disidente’ pone en duda las bases del ‘camino sinodal’

Rudolf Voderholzer, Rudolf Voderholzer, obispo de Ratisbona
|

El obispo de Ratisbona, Rudolf Voderholzer, crítico del ‘camino sinodal’ desde el principio, encuentra ahora en los resultados del estudio sobre abusos de los luteranos nuevas razones para oponerse a la deriva que ha emprendido el episcopado alemán.

Voderholzer era uno de los ‘cuatro malditos’ que, entre los obispos alemanes, se opusieron al famoso ‘comité sinodal’ que Roma acabó obligando a retirar de momento de los planes de sínodo alemán, junto a Gregor Maria Hanke (Eichstätt), Stefan Oster (Passau), y el cardenal Rainer Maria Woelki (Colonia), y ahora vuelve a la carga con motivo de la publicación del estudio sobre abusos sexuales en el seno de la Iglesia Luterana de Alemania.

Porque si la razón de ser -la coartada, por decir mejor- del camino sinodal alemán fue el informe sobre abusos sexuales de larguísima data en la Iglesia Católica en Alemania y las soluciones ofrecidas vienen a ser una ‘protestantización’ de la Iglesia, ¿qué sentido tiene ahora, cuando se sabe que los luteranos tienen idénticos problemas?

“Sobre este proceso penden grandes interrogantes”, afirma Voderholzer en una entrevista con el periódico dominical católico de la diócesis de Ratisbona. «Ahora tenemos una oportunidad parcial de comparar las instituciones con la Iglesia protestante».

Voderholzer pide que los debates se aparten de la “guerra de trincheras ideológica”. Por eso apoya el plan del psiquiatra forense Harald Dressing de realizar un estudio de campo en el que se tengan en cuenta todos los grupos sociales para poder explorar de forma amplia las causas del abuso sexual. «Esto ayudará realmente a los afectados a largo plazo».

Voderholzer asegura haber recibido mucho apoyo por su posición crítica hacia el Camino Sinodal, “en muchas cartas y en muchos otros mensajes de solidaridad”, e incluso está dispuesto a aceptar la etiqueta de «conservador» como un cumplido.