Monseñor Jesús Sanz, arzobispo de Oviedo ha vuelto a alzar la voz contra la ideología de género y los males que acechan a la Iglesia.
Sanz Montes se ha consagrado como la voz del episcopado español que dice lo que piensa sin importarle el qué dirán. En una entrevista concedida a El Debate, el arzobispo franciscano denuncia que «hoy hay caminos políticos, culturales y mediáticos, que intentan reescribir la historia que no sucedió. La reescriben, la tergiversan y la banalizan o la demonizan».
Preguntado sobre su hay miedo, o incluso connivencia, dentro de la propia Iglesia a la hora de levantar la voz ante ciertos ataques ideológicos, el arzobispo de Oviedo confiesa que «sí que produce respeto». Jesús Sanz, hace una distinción entre el silencio y el mutismo. «El silencio, o una palabra discreta que en un momento cabe decir, viene dictado por la prudencia. Pero el mutismo siempre nace de la cobardía», remarca el prelado.
Ideología de género en la Iglesia
El arzobispo de Oviedo afirma sin tapujos que «La ideología de género ha penetrado en la Iglesia. La confusión antropológica que tiene que ver con la relación hombre y mujer, con la verdad del varón, con la verdad de la mujer, y con la pedagogía de dejar a los niños crecer sanamente sin redirigirlos para que puedan afiliarse a tu antropología perversa… Todo eso ha penetrado en la Iglesia».
Jesús Sanz señala que esto «lo vemos cuando en los colegios, en la docencia e incluso en la catequesis, hay expresiones y gestos en los que se reconoce una ambigüedad o, claramente, una claudicación».
«Hoy, si tú no hablas con la jerga de la ideología de género, si no mencionas el cambio climático, si no llevas el pin y la agenda 2030 en las entrañas, parece que estás en otro mundo y te arrinconan», lamenta el arzobispo franciscano.
«Bueno, pues: ni pin, ni agenda, ni cambio climático, ni ideología de género. Y, por tanto, a los colectivos que todo esto lo jalean y lo defiendan, y además te lo imponen, y si no lo aceptas te quitan la subvención que nunca te han dado, tendremos que decirles de alguna manera, con silencio y con palabra, nunca con mutismo y con ausencia, que, al menos algunos, a esto no nos prestamos», responde el arzobispo de Oviedo.
Contra Fiducia supplicans
Mientras el resto del episcopado español calla, Jesús Sanz no duda en confirmar que la declaración Fiducia supplicans entra dentro de ese ámbito de confusión que impera en estos momentos también dentro de la Iglesia. «Fiducia Suplicans, que a veces es Fiducia complicans«, afirma el arzobispo de Oviedo.
Sanz Montes también habla sobre la declaración de hace unos meses de Doctrina de la Fe sobre el bautismo de los transexuales. El arzobispo critica que el Dicasterio de Doctrina de la Fe no aclara cómo se las bautizará: según el sexo con el que nacieron, o con el que se han inscrito en el registro tras la intervención hormonal o quirúrgica y, por tanto, «deja la puerta abierta, con una dosis notable de ambigüedad, para que alguien tenga después que decir «sí» o «no»».
Ante tanto caos, confusión e incertidumbre, monseñor Jesús Sanz agrega que «no estamos ante un bazar en el que se nos está vendiendo la última novedad, sino que estamos ante una historia que es de salvación y que tiene 2.000 años de andadura«.
«Teniendo detrás nada menos que la altura de 2.000 años, que nos contemplan historias de santidad, de martirio, de grandes pastores, de grandes doctores, de excelentes papas y obispos, tenemos suficiente bagaje como para decir «No me voy a confundir con la confusión reinante; no me voy a deprimir con la tristeza que a veces nos rodea, sino que sé de Quién me he fiado y sé quién me puede acompañar»», concluye el arzobispo.