Tal y como avanzó InfoVaticana hace algunos días, el juicio canónico contra José María Martínez, ex profesor del colegio Gaztelueta y numerario del Opus Dei, tiene mala pinta para él.
En un nuevo artículo escrito en su blog personal, Chema Martínez profundiza en algunos aspectos que ya contó este medio el día después del encuentro de su abogada con el obispo de Teruel, José Antonio Satué.
El ex profesor denuncia que Satué «ha modificado el derecho sustantivo». El Obispo de Teruel no ha tenido reparos en cambiar lass de juego «durante el partido». El numerario del Opus Dei, lamenta que «ya no se juzga si soy inocente o culpable sino que, dando por hecho lo segundo, se valora si la Prelatura del Opus Dei debe expulsarme de la institución».
La indignación de José María Martínez es máxima. «Creo que cualquiera percibe los abusos e irregularidades que se están perpetrando con apariencia de legalidad en este proceso. Con este caso, pienso yo, se le está haciendo mucho daño a la credibilidad de la Iglesia. Por todo esto pido a los que lean estas líneas que recen por la Iglesia y por el Papa; con estos colaboradores él lo necesita», escribe en su blog.
Por su interés, reproducimos el escrito completo del ex profesor del colegio Gaztelueta:
Un nuevo asalto
El pasado lunes 13 de noviembre se reunieron mi nueva abogada y el Delegado, Mons. Satué. Yo no acudí porque era un acto muy formal, técnico, y porque sigo desconfiando de la imparcialidad de quien me juzga. Creo que una injusticia así debería hacer reflexionar a cualquier persona de bien, más si espera ser juzgado al final de su vida.
El encuentro fue un nuevo despropósito jurídico, un paso más en la deslegitimación del derecho canónico y en el abuso de poder que se está llevando a cabo.
El Delegado, como ha establecido el Tribunal de la Signatura Apostólica de Roma, ha modificado el derecho sustantivo. Es decir, durante el partido han cambiado las normas de juego. Ya no se juzga si soy inocente o culpable sino que, dando por hecho lo segundo, se valora si la Prelatura del Opus Dei debe expulsarme de la institución.
Mi abogada le preguntó al Delegado por qué este cambio. No hubo respuesta. Pidió una justificación, una motivación —que en derecho debe ser algo muy común—; tampoco se le dio. Entiendo, entonces, que es porque no la hay, porque es ¡ar-bi-tra-rio! Precisamente lo que el derecho trata de evitar, la arbitrariedad, el abuso de poder. Como el derecho canónico no me podía condenar, ahora se inventan un procedimiento alternativo para que sea el Opus Dei el que me condene y ellos se laven las manos.
Otro disparate: el Delegado no va a tener en cuenta la investigación previa —esa que se llevó a cabo en 2015 y donde el cardenal Ladaria pidió que se restituyera mi fama— porque es superflua ahora, según el Delegado. Es superflua porque no se quiere tener en cuenta ninguna aportación que me pueda ayudar. Lo que puede ir a mi favor se elimina.
Yo creo que es “superflua” porque ahora me están juzgando por algo de lo que ya me habían juzgado antes, y como eso es una barbaridad, es mejor decir que es “superflua” y esconder la prueba.
El Delegado no entregó sino que dejó ver a mi abogada la acusación, una carta de Juan Cuatrecasas de 2023 en la que describe los mismos hechos que ya juzgó la Audiencia de Bizkaia y que desestimó el Supremo Español en su gran mayoría. ¡No hay nada nuevo! Ahora, tres años después de esa resolución, quieren juzgarme por los mismos hechos. De esos, los más graves, el Tribunal supremo no los consideró probados, pero eso al Delegado le da igual.
Pregunto yo ahora: ¿por qué el Delegado solo quiere juzgarme a mí? Nadie quiere responder a esta duda. Y cuando nadie lo hace es porque hay respuestas ocultas que no se quiere que salgan a la luz, o porque no hay explicación. De todos los condenados en los informes del defensor del pueblo, o del llamado informe Cremades, que estos días discute la Conferencia Episcopal, sólo tiene interés en juzgarme a mí. Y lo que es aún peor, cometiendo otra aberración procesal: saltarse el principio de no retroactividad de la ley penal. Para quien no entienda qué es este principio, sería como si la autoridad correspondiente quisiese multar o castigar a los españoles durante la pandemia por no haber llevado mascarilla el año 1999.
No me han entregado el Decreto que justifica este proceso, el que firmó el Papa en agosto de 2022. Preguntado el Delegado sobre por qué no lo entrega, respondió que así lo dice la Norma. La norma, el canon 51 del Código de Derecho Canónico dice que se ha de entregar; el 55 dice que no se hará cuando una causa gravísima impida que el texto del decreto sea entregado. Aquí no hay causa gravísima que impida su entrega. Lo que se consigue es acabar con otro derecho fundamental: el de legítima defensa. Mi abogada tuvo que copiarlo a mano. Ni siquiera se le permitió tomar una foto. Y con la acusación pasó lo mismo, tuvo que copiarla a mano. Y todo esto teniendo en cuenta que en un proceso penal cualquier detalle de la acusación o del decreto es importantísimo. Por tanto, ¿qué derecho de defensa existe en este caso?
El Delegado, que tiene ahora prisa por condenar, preguntó a mi abogada por qué no traía peritos para evaluar las pruebas. Es evidente que para saber qué hay que peritar hay que conocer las pruebas, lo peritable.
El Delegado sí entregó a mi abogada algunas pruebas —no se sabe por qué unas sí y otras no—, las mismas que utilizó la Audiencia de Bizkaia y que poseo desde hace años. Y una vez entregadas le propuso ¡reunirse en una semana! Del sumario de Bizkaia yo tengo más de dos mil folios: declaraciones, periciales, informes médicos… ¿Por qué ahora tanta prisa?
Creo que cualquiera percibe los abusos e irregularidades que se están perpetrando con apariencia de legalidad en este proceso. Con este caso, pienso yo, se le está haciendo mucho daño a la credibilidad de la Iglesia. Por todo esto pido a los que lean estas líneas que recen por la Iglesia y por el Papa; con estos colaboradores él lo necesita.
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Tremendo y aberrante este caso, donde se machaca a un inocente
Bergoglio se comporta como el emperador vesubiano y descreído que es, al que calientan la oreja y el trono el lanista Cutrecassius y sus gladiadores tracios Vidalión y Bastans…
Estimado José María (Chema), le pido a Dios que le Bendiga, a usted y toda su familia, se que esta sufriendo una tremenda injusticia y persecución, déjeme decirle que hay muchos dentro de la Obra rezando por usted, espero el OD este a la altura de las circunstancias, todo este proceso es absolutamente ilegal y fuera del ámbito canónico según he leído en infovaticana, recuerde este principio de derecho (nullum crimen nulla poena sine lege).
Hay un absoluto abuso en este caso inaudito, y esto no se puede permitir, dentro de la Obra están los mejores profesores de derecho canónico de la unav, ellos saben que todo esto es un mamotreto horroroso, es un atropello mas contra la Obra misma, y este es el sentimiento de numerarios y supernumerarios fuera de España, Dios le Bendiga amigo Chema!
No juzgo lo que ha pasado o no, pero estoy convencido de que nada de esto habría pasado sin esa costumbre del Opus Dei de que laicos adultos hurguen en la sexualidad de adolescentes.
Satue, arrepientete, todavia estas a tiempo. Satue, esa aberracion que haces es solo cosa tuya, o hay alguien detras al que obedeces servilmente?
Querido José María
Llevo siguiendo ‘tu caso’ desde hace tiempo y rezando por tí, por que no te desmorones con las pruebas a tu fe y esperanza que el Señor permite.
Te confieso que he llorado más de una vez.
Yo, probablemente, no lo habria resistido.
No se cómo ayudarte.
Recemos por este pobre hombre, para que no pierda la Fe, para que el Espíritu Santo le conceda la fortaleza de un ejército y San Miguel Arcángel le proteja de todos los ataques que tengan previstos contra él. Que halle un trabajo digno para poder mantener su familia, que encuentre el apoyo moral en todos aquellos que le quieren de verdad. Que la Virgen le dedique sus mejores gracias y conceda permanecer en el Amor de Cristo hasta el último aliento en este mundo, amén.
Un abuso de autoridad escandaloso. Es increíble
Hombres de la iglesia pisoteando los derechos más elementales de una persona
Si te sirve de algo, si lees esto, tienes todo mi apoyo. Y tienes razón cualquiera con un mínimo de objetividad se da cuenta del atropello.
Un fuerte abrazo, amigo!
Puedes denunciar en alguna corte penal internacional?
Este pseudo-proceso no solo es una chapuza, lo que denota la cortedad intelectual de quienes la están manejando,
sino un caso «de libro» de abuso de poder, lo cual es mucho más grave e indica que hay maldad y arbitrariedad a partes iguales.
A estas alturas todos sabemos que Cuatrecasas es protegido de Omell a y S atué es un delfín del presidente de la conferencia episcopal.
No necesito más datos para atar cabos.
Ánimo Chema. Somos muchos los que te apoyamos y te admiramos. Eres una especie de reencarnación del santo Job. En manos del nuevo sanedrín eclesial.
Si todo está siendo como lo cuenta debería estudiar la forma de llevar a la Iglesia ante el Tribunal Europeo de Derechos Humano
Convendría que profesores y doctores en derecho canónico se pronunciaran públicamente
Este asunto parece revelar un tremenda injusticia y una violacion de los principios jurídicos más elementales. El calvario que está haciendo pasar a este pobre profesor es inaceptable. El comportamiento de la jerarquía de la Iglesia es demoníaco
Desgraciadamente hay obispos que lo tendrán difícil para llegar al Cielo. Dios se apiade de sus almas. Porque lo que realmente condena es la falta de caridad y la soberbia.
Y causa gran escándalo. Jesus tiene palabras duras a quienes escandalizan.
Don José María Martínez es inocente, y la actitud de Francisco y de la jerarquía del Opus Dei, hacia el profesor de Gaztelueta, es inmisericorde.
¿Ocariz no tiene nada que decir al respecto? Si los de fuera vemos una insoportable e injusta persecución, no se sabe con qué finalidad, los más cercanos deberían hacer algo al respecto. Es evidente que el ataque va contra la institución a través del profesor de Gaztelueta. Me recuerda a las checas soviéticas. ¿Qué hay de lo de los cien notarios?
Yo no veo que lo de los 100 notarios vaya mal. Todo lo contrario.
Ánimo Chema.
Me duele cada palo que te han dado.
Justo los que dicen que al ser laico no eres miembro de la Prelatura te quieren echar de la Obra.
En la práctica no pueden hacer nada contra un laico. Tu vida seguirá igual rodeado de tus seres queridos y haciendo lo mismo digan lo que digan estos tristes.
Un fuerte abrazo.
El obispo de Teruel, como el de Barbastro en el tema de Torreciudad, es un simple peón. No estamos hablando de eminencias intelectuales, precisamente.
Aquí los fundamental es quién está dando las órdenes, el autor o autores intelectuales de estas tropelías.
Así es la iglesia de Francisco, arbitraria, aberrante y escandalosa.
Y así son sus colaboradores, hechos y conformados a su medida.
Jesuitismo puro en la venas de la Iglesia. Odio, rencor, venganza, soberbia… van a dejar la Iglesia como está su orden: desierta.
Todo mi apoyo y cariño para este laico, que, sin duda, esta bien preparado para llegar a lo más alto en el Cielo. Y todo mi apoyo a su familia natural y sobrenatural.
Ánimo a rezar por la Iglesia, y por el Papa para que se de cuenta de lo mal que lo está haciendo, y rectifique.
Rezaré mucho .cómo pide