Tras su tajante desmentido a las noticias de que estaba colaborando con el Papa en una reforma radical de las normas que rigen la elección del pontífice, el cardenal Gianfranco Ghirlanda ha sido recibido en audiencia por el Papa.
La audiencia es pública, con lo que podemos tener la seguridad de que no se tratará el asunto de la reforma del cónclave, si hubiera algo que tratar. Pero como en Roma no se da puntada sin hilo, parece razonable suponer que el acto tiene su significado simbólico. Para empezar, para dar impresión de total transparencia, lo que, a estas alturas, parece una misión imposible.
La semana pasada, tanto The Pillar como The Remnant, norteamericanos ambos, informaron de que desde finales de la primavera se han celebrado una serie de reuniones en Santa Marta entre el Papa Francisco y el cardenal canonista jesuita italiano Gianfranco Ghirlanda, con un objetivo específico: reformar la constitución apostólica de 1996 del Papa Juan Pablo II sobre la vacante de la Sede Apostólica y la elección del Romano Pontífice, Universi Dominici Gregis.
Un día después de aparecida la noticia, Ghirlanda declaró a LifeSiteNews que la información aparecida ayer en medios y redes de que el Papa estaría a punto de aprobar una radical reforma de las normas que rigen la elección de los pontífices era “absolutamente falsa”.
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Fuentes fiables han manifestado que hubo reuniones porque Francisco quiere cambiar las normas de la Universi Dominici Gregis. Pero parece que ante el rechazo generalizado, Francisco ha dado marcha atrás, y con su habitual falta de transparencia, ahora dice Ghirlanda que no hay ningún proyecto en ese sentido.
En el supuesto de que actualmente no haya intención de cambio, no quiere decir que no lo haya habido. E incluso tal vez lo que hacen es esperar a ver si en un futuro próximo surge mejor ocasión para esas modificaciones.
En cualquier caso, semejante cambio sería un disparate.
Puros chismes de barrio, y qué poca seriedad la suya de seguir empecinado en difundir las mentiras de Esteban; está claro que a ustedes solo les interesa hacer el mayor daño posible a la Iglesia.
Aún no se ha entrado usted (no se lo quiere creer) de que sus chismes de troll anticatólico e iletrado no le interesan a nadie.
Es sorprendente que siendo usted un mentiroso contumaz, tenga esa mala costumbre de acusar falsamente de mentirosos a los demás: ahora a D. Carlos Esteban, pero previamente lo ha hecho con el propio Francisco, a quien finge «defender», pero al que también llamó mentiroso públicamente. ¿Su criterio? Que a usted le guste o no lo que se diga. Si no le gusta, no tiene ningún problema en llamar mentiroso a Francisco, a quien está todo el día usando de excusa para atacar a los católicos. Claro, que una cosa es su mala intención, y otra sus logros: usted, atacar, ataca; pero el único daño que hace es al idioma español, al que está todo el día dando de coces. Ya sabe la solución: estudiar y someterse a un exorcismo, farsante.
Por favor infovaticana, solicito que el usuario “catholicvs” sea bloqueado, es un troll grosero, calumniador, arrogante y vulgar que se dedica a insultar a quienes no nos ajustamos a su pensamiento.
Su doblez y desvergüenza no conoce límites. Que escriba éso un troll anticatólico y soez como usted, que ayer mismo (¡AYER!) Ilamó «mentiroso» a D. Carlos Esteban (porque no le gustó el artículo que escribió en esta página), y que soltó el siguiente exabrupto contra todos los lectores y comentaristas de lnfovaticana: «Déjense de lloriquear bola de fariseos hipócritas», es digno, como poco, de una «Antología del Disparate», si no de una tesis doctoral de la especialidad de Psiquiatría. Le remito a lo que ya le dije ayer, cuando cínicamente escribió lo mismo:
«Solicito a Infovaticana que me deje llamar «mentiroso» a Francisco, «perros y perras rígidos» a los comentaristas, o «marica» a Sacerdote mariano, sin que nadie me replique». ¿Usted se lee? ¿Cómo es posible que no tenga el más mínimo sentido del ridículo? Si mis réplicas a sus chorradas y habituales exabruptos no le alejan a usted, que es a quien van dirigidas, dudo mucho que…
…alejen a alguien más. De eso ya se encarga usted (o al menos lo intenta, aunque no lo logre) llamando mentiroso, como ha hecho hoy mismo, a D. Carlos Esteban, que forma parte de la misma infovaticana, a la que usted lloriquea de forma farisaica, para que le dejen trollear sin cortapisas. Si no le gusta Infovaticana, ni sus articulistas, ni sus comentaristas, ¿qué hace usted aquí? Chismorrear y lloriquear, que es de lo que acusa a los demás, proyectando precisamente aquello que usted hace.
Usted no necesita ninguna «protección» de Infovaticana (a la que insulta a diario, y no precisamente para «acercar a otros comentaristas», que si son como usted, mejor que ni se acerquen), sino un buen exorcismo, farsante.
Pues dado que sería un disparate, eso mismo da a entender, que lo acabarán haciendo. Esperarán agazapados el momento oportuno, pero…¡¡ como hay Dios que lo harán!!. Al tiempo (no creo que esperen mucho). Hace mucho tiempo que sabemos ya cómo actúan.
Son puros falsos.
Ya le he advertido con anterioridad de que se va a meter usted en un lío legal por usurpar la identidad de otra persona.
Si quiere dejar bien atado quién va a ser su sucesor, lo tiene muy sencillo: que nombre un obispo coadjutor para o diócesis de Roma.
El cardenal jesuita Gianfranco Ghirlanda, el vaticanista asesor del Papa, es uno de los que más daño le están causando a la Iglesia. Pido por su conversión.
Desmentido…
Más que «desmentido», «reculado» (de momento).