Llegan los primeros cambios de Cobo en Madrid: Jesús Vidal, nuevo vicario general y Avelino Revilla se va de párroco a La Concepción de Goya

José Cobo
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Estaba previsto que en las fechas próximas a la festividad de la Almudena, patrona de la ciudad de Madrid, llegaran los primeros cambios del cardenal Cobo.

Y así ha sido. Este martes, la archidiócesis de Madrid dio a conocer los nuevos cambios y nombramientos efectuados por el arzobispo de Madrid y que muchos de ellos fueron adelantados el lunes en InfoVaticana por Diego Lanzas.

En primer lugar, se confirma la salida de Avelino Revilla como vicario general de la archidiócesis de Madrid. Su nuevo destino es la parroquia de la Inmaculada Concepción de la calle Goya. En su lugar, Cobo ha nombrado al obispo auxiliar Jesús Vidal como nuevo vicario general. También se confirma el cambio del Canciller-Secretario General Alberto Andrés Domínguez. Cargo que ahora recae en Eduardo Aranda.

Cobo cambia al Vicario Judicial, Roberto Serres, por Manuel Francisco Mora. Juan Carlos Merino, por su parte, es nombrado responsable de la Vicaría para el Clero. En cuanto a las vicarias territoriales, solo se confirman tres cambios: de la Vicaría 1, se nombra responsable a Juan Pedro Gutiérrez, de la IV y la V a Óscar García Aguado y de la vicaría número VII a Jesús González Alemany. El resto de vicarios renuevan el nombramiento hasta que finalice el que ya poseen.

En la delegación de Educación Católica se nombra como responsable a José Luis Guzón y en la delegación de Laicos al profesor José Manuel Aparicio. Para la delegación de Actos Públicos, se nombra al sacerdote Jesús Junquera, miembro del cabildo de la catedral y para la delegación de Relaciones Institucionales al sacerdote Andrés Ramos.

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Comentarios
7 comentarios en “Llegan los primeros cambios de Cobo en Madrid: Jesús Vidal, nuevo vicario general y Avelino Revilla se va de párroco a La Concepción de Goya
      1. Pues a ver si convence usted a Francisco, que no para de dar carguitos a los amiguetes, mientras indica a los fieles la salida, que obviamente toman las de Villadiego (en eso debe de consistir la tan cacareada «Iglesia en salida»: en no hacer proselitismo, no vaya a ser que alguien se convierta a la fe católica, y a quienes ya eran católicos echarlos a base de decir disparates o directamente insultándolos). Sólo hay que ver el mar de sillas vacías en sus audiencias. Y la estampida va en aumento, pues los enemigos de la Iglesia, que son quienes le alaban por su labor destructora, no van a ir a verle.

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