Las luces y sombras de la JMJ de Lisboa

Vista aérea de la multitud de jóvenes en la vigilia con el Papa en la JMJ de Lisboa Vista aérea de la multitud de jóvenes en la vigilia con el Papa en la JMJ de Lisboa
|

El gran evento mundial de la juventud católica ha llegado a su fin. La próxima parada será en el 2027 en Corea del Sur en donde serán otros países quienes deban tomar la delantera a la hora de movilizar a sus jóvenes.

España ha jugado, sin lugar a dudas, un papel fundamental durante estos días en Lisboa. Miles de jóvenes españoles han ‘conquistado’ durante estos días al país vecino. La bandera de España ha sido la más vista en la capital lusa y es que no podemos olvidar que seguimos siendo ‘tierra de María’ y aunque las cosas aparentemente pinten feas, todavía queda un reducto de juventud española dispuesta a no perder la catolicidad que tanto caracteriza a nuestra patria.

Entrando en materia, durante esta JMJ se ha podido ver de casi todo. Habrá cosas que gusten más y otras menos. Este artículo pretende ser un esbozo de aquellas cosas que han funcionado y que han servido para cumplir con la verdadera finalidad de la JMJ, que ya le adelantamos a algunos que no es hacer proselitismo pro LGTB, sino acercar a la juventud a Cristo. Por desgracia, no todo se ha hecho bien y damos cuenta de ello. Empecemos con las negativas para terminar con un sabor no muy agrio al finalizar la lectura.

Irreverentes copones y sagrarios

Nada más empezar la JMJ dimos la noticia que corrió como la pólvora por redes sociales y que medios internacionales se han hecho eco de ella. Hablamos de la ‘sorpresa entre los sacerdotes de la Misa del Encuentro de los españoles en la JMJ por tener que repartir la comunión en cuencos de patatas fritas‘.

A nuestra redacción llegaron las imágenes de los cuencos de patatas fritas, de aceitunas o de cacahuetes (según para lo que lo utilicen ustedes) que fueron utilizados como ‘copones’ para repartir la comunión. Ni se dignaron en quitar la etiqueta y el código de barras del Ikea.

De la vigilia con el Papa, nos llegaron otras imágenes no menos curiosas que la de los ‘copones del Ikea’. Se habilitaron carpas donde se reservó al Santísimo para poder rezar. Hasta ahí todo correcto. El problema es que de nuevo brotó el exceso de imaginación de alguno y se les ocurrió utilizar una especie de cajas que se utilizan para repartir comida en furgonetas como sagrarios. Vean y juzguen ustedes mismos.

Creo que de nada sirve el argumento del minimalismo cuando se han gastado cerca de 5 millones de euros en al altar de la JMJ. La imagen y sensación que se transmite es de dejadez e irreverencia por lo más Sagrado que tenemos los católicos. Si ni siquiera nosotros somos capaces de darle la importancia que merece, ¿Quién lo hará?

Misa ‘LGTB’ y predicación de James Martin

La realidad es que la cuestión LGTB ha pasado sin pena ni gloria por esta JMJ. Muchos ‘apóstoles’ y medios (o panfletos) vendidos a estas causas quisieron enarbolar esta cuestión y magnificar esta causa, pero se van a casa con las manos vacías. Ni una mención del Papa. Se han tenido que contentar con el «todos, todos, todos» de Francisco.

Y es que Francisco tiene razón, porque la Iglesia es para todos… los bautizados que somos hijos de Dios. Y acoger al pecador, que somos todos nosotros, no implica acoger, validar ni bendecir ningún pecado, sea el que fuere. «Enderezándose Jesús, le dijo: Mujer, ¿dónde están ellos? ¿Ninguno te ha condenado? 11Y ella respondió: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Yo tampoco te condeno. Vete; desde ahora no peques más». (Juan 8:11).

La pequeña nota en este sentido la dio James Martin, el conocido como el ‘apóstol LGTB’ quien finalmente si impartió una catequesis a un grupo de jóvenes jesuitas en una parroquia de Lisboa. También damos reporte de la celebración de una Misa en Nuestra Señora de la Encarnación para ‘católicos LGTB‘ en la que tuvo que intervenir la policía.

El motivo de la intervención policial fue que un grupo de jóvenes católicos acudieron allí para hacer una “una iniciativa pacífica”, y que “no es contra la comunidad gay”. “Individualmente, no tenemos nada contra estas personas. El enemigo es esta ideología y algunos padres que la defienden contra lo que debería ser la Iglesia Católica y contra lo que es la voluntad de Dios”, resaltó uno de los promotores a 7Margens.

Letras de canciones obscenas

Durante los primeros días de la JMJ fue especialmente comentado en amplios círculos eclesiales tuiteros la polémica que generó las canciones que sonaban en algunos de los festivales nocturnos oficiales de la JMJ.

No hace falta ser Cristóbal Colón para descubir que tipo de música es la que escuchan a día de hoy la gran mayoría de jóvenes, católicos o no católicos. Lo que quizá fuera surrealista es que algunas de esas canciones, poco virtuosas, sonaran en este ambiente. Bien lo explicó el sacerdote Pablo Pich en su cuenta de twitter:

El Milagro de Jimena

Pasemos ya a las luces que ha dejado la JMJ durante estos días. La noticia más importante es sin duda el milagro del que se ha beneficiado Jimena, una chica española que asegura haber recobrado la totalidad de la vista por intercesión de la Virgen de las Nieves.

Jimena, una chica madrileña de 16 años que acudió a Lisboa con un club del Opus Dei, recuperó la vista en Fátima al comulgar, justo el día de la festividad de la Virgen de las Nieves a quien estaba haciendo una novena para pedir por el milagro de su curación.

Confesionarios repletos

Por desgracia, es habitual entrar en muchas parroquias en las que algunos sacerdotes han olvidado la tarea fundamental que tienen de estar sentados en los confesionarios. Muchas veces las prisas o porque no dan abasto, son las causas por las que los confesionarios se llenan de polvo en cientos de parroquias.

Por suerte, durante esta JMJ hemos podido ver los confesionarios repletos de jóvenes. Largas colas de gente queriendo confesarse para limpiar su alma y volver a estar en gracia y en comunión con Él. «Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve justos que no necesitan de arrepentimiento» (Lucas 15, 7).

Hasta 150 confesionarios se habilitaron en El Parque del Perdón. Son muchos los sacerdotes que confesaron ininterrumpidamente durante horas administrado el sacramento del perdón a todos aquellos que quisieron acercarse.

Las catequesis de Munilla y Demetrio

Entre tanto ruido y palabras vagas o vacías, hay dos obispos que han sabido hacerse oír con sus predicaciones estos días en Lisboa y eso que no lo tenía fácil.

A ambos les impusieron hablar en sus respectivas catequesis sobre ecología integral. Quizá lo cómodo, fácil y sencillo hubiera sido hablar del reciclaje, de los problemas de contaminación, etc. Pero ni el obispo de Córdoba ni el de Alicante quisieron perder la oportunidad de predicar la verdad, aunque ésta sea incómoda y sea causa de azotes y sacudidas del enemigo.

Monseñor Demetrio Fernández fue tajante en hablar a los jóvenes contra el aborto y la ideología de género, mientras que monseñor José Ignacio Munilla fue valiente al defender la dignidad humana al recordar que «nadie nace en un cuerpo equivocado». Unas afirmaciones que le han costado volver a estar en el punto de mira de los medios.

Ahora solo falta esperar y ver que esta JMJ germine en el interior de muchos jóvenes un profundo proceso de conversión personal y que se traduzca en una mayor identificación de nuestros jóvenes con Jesucristo; que salga una juventud verdaderamente católica y que no quiera imponer los dogmatismos mundialistas desordenados al catolicismo y que muchos jóvenes salgan decididos a entregarse a Dios en la vida sacerdotal, consagrada, laical o formando verdaderas familias cristianas.