Durante unos minutos, este pasado domingo, los numerosos bañistas de la costa de Ostia, en Roma, vieron sobrevolar una avioneta amarilla con un inquietante mensaje.
Eran las 16.30 horas y entre baño y baño se escuchaba el rugido de la aeronave que continuaba dando vueltas en el cielo con el cartel. El escrito tomó a todos por sorpresa: sin dedicatoria de amor ni mensajes publicitarios: “Benedicto XVI nunca abdicó” esta es la misteriosa frase que ondeaba en la pancarta.
Dado que recientemente se publicó un libro que promueve la tesis de que la renuncia de Benedicto XVI fue nula, algunos atribuyeron el mensaje a una publicidad que su autor, Andrea Cionci, ya ha negado tajantemente al diario romano Il Messaggero.
La empresa que gestiona los contratos de aviones con mensajes publicitarios tampoco ha hecho público el cliente que ha encargado tal servicio y otra teoría, recogida por los diarios locales, es que se trataría de un mensaje correspondiente a un rodaje.
Según algunos testimonios, la aeronave, procedente de Roma, habría realizado algunos pasajes frente a la costa de Lido, entre la rotonda del tramo final de Via Cristoforo Colombo y el muelle. Luego se alejó dejando un reguero de preguntas mezcladas con asombro. Algunas publicaciones en las redes sociales indican que el avión entonces habría ido aún más al sur y habría sido avistado hasta el área de Circeo.