En la archidiócesis de Chicago se llevará a cabo el próximo año una peregrinación eucarística, y su arzobispo, cardenal Blase Cupich, ha desconcertado a sus feligreses imponiendo ‘restricciones’ a la exposición del Santísimo Sacramento.
La Archidiócesis de Chicago pretende restringir la exposición de la Eucaristía durante una peregrinación eucarística nacional que atravesará la región de Chicago el próximo año, antes del Congreso Eucarístico programado para julio próximo.
La restricción anticipada se produce en medio de diferencias de énfasis y enfoque entre los obispos estadounidenses sobre el proceso de reactivación eucarística de la Iglesia, ahora en curso, y el Congreso Eucarístico planeado para 2024 , especialmente sobre el énfasis de la reactivación en la adoración de la Eucaristía.
Mientras que el cardenal Blase Cupich ha argumentado que el énfasis en la adoración podría distraer la atención de la catequesis sobre la importancia de la misa, el obispo Andrew Cozzens ha hecho hincapié en una visión unificada entre la adoración eucarística y la adoración de Dios en la misa.
Una fuente cercana al proceso de planificación de la peregrinación comunicó al National Catholic Register que cuando los peregrinos atraviesen Chicago en el verano de 2024, la arquidiócesis llevará a cabo una misa en la Catedral del Santo Nombre, seguida de una procesión eucarística encabezada por el cardenal Cupich, pero que por lo demás se esperará la eucaristía. para ser reservado como viaje de los peregrinos.
“Les dijo que podían pasar por Chicago, pero que no podían exponer el Santísimo Sacramento mientras caminaban. Ese parecía ser el compromiso al que llegaron para venir”, señala al Register un alto funcionario de la Iglesia, que habló bajo condición de anonimato.