‘The Chosen’: decepción con la serie de Netflix sobre la vida de Cristo

The Choosen Fragmento de la serie 'The Choosen'
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“The Chosen”, una popular serie en la que, milagrosamente, Netflix parecía tratar con seriedad y fidelidad la vida de Cristo, ha causado decepción entre los católicos por un comentario publicado en redes por la cuenta de la misma producción.

“Estas son las malas noticias: tu religión, tu iglesia, las leyes, tus esfuerzos por ser justo no te salvarán”, indica la publicación de The Chosen en Instagram. “Y estas son las buenas noticias: no necesitas tu religión, tu iglesia, la ley o tus esfuerzos para salvarte. De la temporada 3, episodio 3”.

La decepción de los católicos ante la opinión de los propios autores de la serie, frontalmente contraria a la doctrina católica de la salvación, la resume en un tuit el popular sacerdote español Jesús Silva (46.000 seguidores en Twitter): “Bueno, pues parece confirmado. La famosa serie The Chosen que tanto bombo está recibiendo y que hasta está en Netflix, finalmente muestra su verdadero rostro. Qué pena”.

Esperar que Netflix, o cualquier otro campeón mundial del entretenimiento, vaya a ajustarse a los principios de nuestra fe católica es bastante ingenuo, naturalmente, y apenas hay motivos serio para esperar otra cosa que armas contraria a nuestra fe en la guerra cultural procedentes de las multinacionales del entretenimiento de masas.

Pero The Chosen no es, en su mayor parte, una serie irrespetuosa, irreverente o contraria a la fe, al menos, lo que hasta ahora se ha podido ver, y el comentario de los productores no deja de ser una visión distorsionada de la interpretación del mensaje, probablemente de raíz protestante, que no parece afectar a la fidelidad de la obra al relato evangélico.

Quizá un broche apto para la polémica sea lo que cuelga el usuario Manu en su cuenta de Twitter: “The Chosen no es una serie perfecta y no es el sustituto a hacer oración para conocer a Cristo… Sí es importante verla con criterio para poder quedarse con lo bueno y descartar lo demás. Pero es innegable el bien que ha hecho en mi propia vida y en mi relación con Dios”.