«Siento vergüenza por el papel que han tenido varios católicos con responsabilidades educativas en el abuso y falta de respeto a la identidad, cultura y valores espirituales de los Pueblos Indígenas en Canadá. Todas estas cosas son contrarias al Evangelio de Jesucristo», ha escrito el Papa tras el encuentro con el grupo de indígenas de Canadá.
El Papa Francisco volvió a recibir el viernes a un grupo de indígenas llegados desde Canadá y acompañados por el obispo Poisson. Francisco les dijo en su discurso en referencia a ellos que «se hizo un gran daño a su identidad y a su cultura, muchas familias fueron separadas y gran número de niños fueron víctimas de estos intentos de imponer una uniformidad basada en la noción de que el progreso se da a través de la colonización ideológica, siguiendo programas ideados en las oficinas».
Además, el Pontífice añadió que «esto es algo que, por desgracia, y en varios niveles, sigue ocurriendo hoy: la colonización ideológica. ¡Cuántas formas de colonización política, ideológica y económica subsisten aún en el mundo, impulsadas por la avaricia y la sed de lucro, con poca preocupación por los pueblos, sus historias y tradiciones, y la casa común de la creación! Lamentablemente, esta mentalidad colonial sigue estando muy extendida».
El Santo Padre dijo que al «escuchar sus voces, pude entrar y sentirme profundamente apenado por las historias de sufrimiento, privaciones, discriminación y diversas formas de abuso que algunos de ustedes experimentaron, particularmente en las escuelas residenciales». Fruto de ello, el Papa dijo que esto le ha hecho «sentir dos cosas con mucha fuerza: indignación y vergüenza».
Francisco insistió de nuevo en decir que «siento pena y vergüenza por el papel que han tenido varios católicos, particularmente los que tienen responsabilidades educativas, en todas estas cosas que te hirieron, en los abusos que sufriste y en la falta de respeto a tu identidad, a tu cultura e incluso sus valores espirituales».
Tras expresar sus sentimientos, «por la deplorable conducta de aquellos miembros de la Iglesia Católica, pido perdón a Dios y quiero decirles de todo corazón: lo siento mucho. Y me uno a mis hermanos, los obispos canadienses, para pedirles perdón. Claramente, el contenido de la fe no puede transmitirse de manera contraria a la fe misma: Jesús nos enseñó a acoger, amar, servir y no juzgar», sentenció el Papa. Por último, el Obispo de Roma volvió a reiterar su deseo de poder visitar Canadá para estar junto a ellos.
A pesar de este encuentro del Papa con los indígenas, de pedirles perdón y de manifestar su deseo de visitar el país para coser y cerrar heridas, el historiador Jacques Rouillard sentenció el pasado mes de enero que las acusaciones sobre el descubrimiento de supuestas tumbas y restos humanos de indígenas en colegio católicos, era falso.
Enterramientos clandestinos de indígenas en Canadá: todo era falso