El arzobispo de Granada, Monseñor Javier Martínez ha anunciado a través de una carta publicada por el arzobispado que «dentro de pocos días podré reincorporarme plenamente a mi misión en la diócesis».
La misiva, está dirigida a «todos los sacerdotes, religiosos y consagrados y a todos los fieles». En ella, incluye la correspondiente felicitación de Navidad y agradecimiento por su estado de salud, tras el accidente sufrido el 10 de diciembre.
«Os escribo, ya a las puertas de la Navidad, en primer lugar para desearos a todos que el nacimiento del Hijo de Dios en nuestra carne llene vuestro corazón de razones para la alegría y la acción de gracias. Es este acontecimiento, en efecto, en el centro de la Historia el que hace razonables (en medio de los males y del sufrimiento del mundo) la alegría, la gratitud, el amor», asegura el arzobispo de Granada.
Además, ha querido añadir su agradecimiento «de corazón a todos vuestras oraciones, vuestra preocupación, vuestra comunión, con motivo del accidente que he tenido el viernes 10 de diciembre al regreso de las confirmaciones en Cacín». El prelado, de 74 años, sufrió un golpe en la cabeza pero pudo salir del vehículo por su propio pie. Un particular que pasó por el lugar del accidente fue quien trasladó al arzobispo al hospital sin esperar a que llegara la asistencia médica. El mismo del accidente ingresó en el Hospital de Traumatología de Granada donde pasó 48 horas en observación tras serle diagnosticado un traumatismo craneoencefálico. Posteriormente pasó a planta donde donde se ha ido recuperando del accidente.
«Gracias a Dios, todo ha quedado en un gran susto, y dentro de pocos días podré reincorporarme plenamente a mi misión en la diócesis. Pero mi corazón está lleno de gratitud para con todos los que, de un modo u otro, incluso desde la oración silenciosa que sólo Dios oye, habéis vivido unidos a vuestro pastor, indigno, pero que os quiere con toda su alma», ha añadido Javier Martínez.
El obispo auxiliar de Barcelona continúa grave en el hospital
Por otro lado, el arzobispado de Barcelona ha informado que «el estado de salud de Mons. Antoni Vadell, obispo auxiliar de Barcelona, queremos comunicar que se mantiene estable dentro de la gravedad».
El Obispo auxiliar de Barcelona, Antoni Vadell, permanece hospitalizado, en la unidad de cuidados intensivos del hospital Clínic de la Ciudad Condal, desde el pasado sábado a causa del cáncer de páncreas que le fue detectado el pasado mes de julio. Desde el arzobispado de Barcelona, siguen haciendo un llamamiento a intensificar las oraciones para pedir por su recuperación. El obispo auxiliar pidió encomendar su curación bajo la intercesión del Beato Joan Roig Diggle.
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Pues a ver si retoma también al gran filósofo Josef Seifert, al que expulsó de la Academia Internacional de Filosofía, que el propio Seifert había fundado, por su crítica impecable de la Amoris Laetitia, en especial del 303. la bomba, como se ha demostrado.
Y ya de paso, que se ocupe de denunciar ante el ayuntamiento o ante el juzgado competente, las cruces satánicas del alumbrado navideño que siguen luciendo ante la indiferencia de la mayoría de la población. Después de la serie de terremotos que hemos sufrido recientemente, es una temeridad desafiar a Dios de esa manera. En fin…..