El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo ayer que su gobierno está “profundamente comprometido” con la defensa del aborto legal. Lo afirmó tras la entrada en vigor una ley que restringe el aborto en el estado de Texas, informa Aciprensa.
“Mi administración está profundamente comprometida con el derecho constitucional establecido en Roe vs Wade hace casi cinco décadas y protegerá y defenderá ese derecho”, aseguró Biden haciendo referencia al fallo de la Corte Suprema de 1973 que abrió la puerta al aborto en todo el país.
La Ley de Latidos del Corazón de Texas entró en vigor ayer tras el no pronunciamiento de la Corte Suprema y una corte federal de apelaciones ante una petición de último minuto para bloquear la ley.
Esta nueva legislación exige que los médicos busquen un latido fetal antes de realizar un aborto. Si se detecta un latido del corazón, que puede ser tan temprano como a las seis semanas de embarazo, el aborto quedará prohibido por ley, excepto en emergencias médicas.
“La ley de Texas afectará significativamente el acceso de las mujeres a la atención médica que necesitan, particularmente para las comunidades de color y las personas con bajos ingresos”, declaró Biden ayer.
La vicepresidente del país, Kamala Harris, también emitió un comunicado calificando la ley como un “asalto total a la salud reproductiva”.
“La Administración Biden-Harris siempre luchará para proteger el acceso a la atención médica y defender el derecho de la mujer a tomar decisiones sobre su cuerpo y determinar su futuro”, afirmó Harris.
En los últimos meses ha crecido el debate dentro del episcopado norteamericano sobre si permitir el acceso o no de los políticos abortistas a la comunión eucarística. El Vaticano, a través de una carta del prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, pidió a los prelados que se pensaran bien una declaración de esas características.
Joe Biden se considera católico practicante y es habitual verle asistir a la misa dominical. Incluso cuando fue a la cumbre del G7, en Inglaterra, se le pudo ver asistiendo a la eucaristía en una pequeña parroquia en Cornualles.
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¿A quien querrá engañar? Pues por lo visto, muchos encantados de comprarle la mercancía.
Y mientras tanto, Francisco y Ladaria se confabularon para presionar al episcopado norteamericano, a fin de que no dijeran que los políticos promotores del aborto no pueden comulgar.
Ese Biden tiene que ser públicamente reprendido. Tal vez la excomunión sea una medida demasiado drástica y de dudoso encaje legal-canónico. Digo esto porque Biden no ha firmado directamente ninguna ley positiva que favorezca el aborto, con lo cual no se prueba su colaboración directa e imprescindible en la ejecución, cosa que sí le haría acreedor de dicha pena.
Pero, repito, una buena bronca pública del mismísimo Papa y no de los obispos USA se hace cada vez más necesaria.
No se puede ir por la vida presumiendo como hace ese individuo senil de ser devoto católico y defender el mal llamado derecho al aborto.
Es un tirano. Y más que hacer
La Virgen María fue inmediatamente a visitar a su prima Isabel después del anunció que le dió el Ángel.
Todavía no se iban a oír los latidos en su Santisimo vientre.
Sin embargo San Juan saltó de gozo frente a Cristo.
Y ahora resulta que es un logro, que si hay latidos de corazón , no se aborte.
Y el paladín de la justicia, católico hasta la médula, inconforme con ésa medida, quiere que se aborte aún si el niño ya casi dice «mamá».
¿Y todavía se dice que «antes» eran tiempos bárbaros?
Y Francisco una vez más pondrá su sonrisa y su cara de cemento armado frente a esta noticia. Son tal para cual. Pero para felicitar a james martin o para ir a alabar a Castro a Cuba sí que le falta tiempo y se da toda la prisa que puede. Es capaz de ir a la toma de posesión de Castillo en Perúcon cancer y todo.
Biden es un genocida.Biden puede decir lo que quiera.Puede decir que es catolico y cuantas más cosas se le puedan ocurrir pero debe entender que a los verdaderos hijos De Dios quienes constituyen su Iglesia siguen pidiendo por su conversión.
Puede existir un asesino que se llame “catolico”?
Acosta, caray, puede existir. Lo que no debe es intentar convencernos de que sus crímenes son admitidos por la Iglesia. Los católicos solemos ser pecadores, y algunos con pecados muy graves. Lo que se nos pide es conversión y comunión, no negación del mal cometido.
¿No es este Biden ese personaje al que la COPE dedica grandilocuentes ditirambos, y encendidas alabanzas?
Pues con eso todo está dicho.
Biden, aunque no haya firmado directamente ninguna ley pro aborto, apoya tales leyes, promociona el aborto y ataca a quienes defienden la vida. Y todo públicamente, provocando escándalo. La Iglesia en EE.UU. debe aplicar el Código de Derecho Canónico y dejarse de debates, votaciones y cuentos:
Can. 915 – No deben ser admitidos a la sagrada comunión los excomulgados y los que están en entredicho después de la imposición o declaración de la pena, y los que OBSTINADAMENTE PERSISTAN EN UN MANIFIESTO PECADO GRAVE.
Aunque uno no sea terrorista, la apología del terrorismo es un crimen; y lo mismo ocurre con el aborto (me refiero moralmente; aunque no lo sea legalmente). Y como es un pecado grave y público, en el que Biden incurre de forma obstinada, se le debe negar la comunión por dicho canon, sin necesidad de declaración expresa de excomunión (a un pecador público se le debe negar sin juzgar su fuero interno; basta con el externo).